Brasil define su suerte voto a voto
Aseguró que considerará “terroristas” a los colectivos sociales Sin Tierra y Sin Techo.
Brasil elige presidente este domingo, en la segunda vuelta de unas elecciones marcadas por la crispación y el hastío. Con el ultraderechista Jair Bolsonaro como favorito, quien en los últimos días radicalizó sus amenazas contra Lula asegurando que“se va a pudrir en la cárcel”junto a su candidato Fernando Haddad. Y fue más allá al asegurar que los colectivos sociales denominados Sin Tierra y Sin Techo, serán considerados “grupos terroristas”.
“Será una limpieza nunca vista en la historia de Brasil”, advirtió Bolsonaro extendiendo sus amenazas contra los grupos de izquierda.
El exmilitar, lidera todas las encuestas de intención de voto, pero Fernando Haddad, del Partido de losTrabajadores (PT), confía en la remontada, al haber aumentado su apoyo en las encuestas en los últimos días.
Bolsonaro marcó un 56 % en intención de votos válidos en el último sondeo de la firma Datafolha, presentado este jueves, mientras Haddad se haría con el 44 %. La distancia se ha ido achicando. El sondeo anterior de la misma firma arrojaba un 59 % de intención de votos válidos a Bolsonaro y un 41 % a Haddad. Además, el candidato izquierdista ha logrado reducir su índice de rechazo dos puntos, hasta el 52 %, y el de Bolsonaro ha aumentado tres puntos, hasta el 44%. Haddad apunta a revertir la situación en esta jornada logrando convencer a los más de 30 millones de brasileños que no votaron la última vez
Bolsonaro intentó convencer a los votantes que rechazan al PT con una campaña que buscó hacer foco en el rechazo de parte de la población brasileña a los políticos tradicionales y de los ciudadanos hastiados de la violencia que azota un país que registró 63.880 asesinatos en 2017, el récord por tercer año consecutivo.
Se trata de un político machista, racista, militarista y homófobo, por las declaraciones que vertió durante años en los medios de comunicación brasileños.
Ambos candidatos luchan estas últimas horas antes de la apertura de urnas por hacerse con los votos de los indecisos, un 6% del electorado, según Datafolha, y de quienes abogan por el voto nulo, un 8%.
También pretenden convencer a los 30 millones de brasileños -el 20,3% del electoradoque no acudieron a las urnas en la primera vuelta, a pesar de que el voto es obligatorio en Brasil. Brasil podría estar a las puertas de uno de los mayores cambios políticos de su historia reciente.