Se necesita "presionar más" al Gobierno para frenar ola de asesinatos a periodistas en México
El cuerpo del periodista Alejandro Márquez fue abandonado en una zanja al costado de la carretera Tepic-Pantanal, en el estado de Nayarit. Fue hallado el sábado 1, durante la asunción del nuevo presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador. Sputnik te cuenta cuál es el panorama venidero de la libertad de expresión en México.
"No está a la vista" que el nuevo mandatario dé "una definición clara sobre cómo fortalecer las estrategias que inhiban estos ataques [a periodistas], que fortalezcan su protección", dijo a Sputnik el presidente de comisión de Libertad de Expresión de la Sociedad Interamericana de Prensa, Roberto Rock.
"Tampoco creo haya un pronunciamiento importante de López Obrador en favor de la protección de la investigación y el combate a la impunidad en estos casos", agregó.
El asesinato de Márquez es el décimo en México en lo que va de año 2018, de acuerdo a la cuenta de la organización internacional Comité de Protección de Periodistas; 12 se contaron en 2017. Durante el Gobierno de Enrique Peña Nieto (2012-2018) 47 periodistas fueron asesinados en total.
El especialista opina que hasta que "no se profundice en las investigaciones", será "muy difícil" identificar culpables. "Por supuesto que se necesita un mayor compromiso de las autoridades a nivel nacional y a nivel de los resultados donde existe apatía, que es una forma de complicidad", opinó Rock.
Según Artículo 19, organización que promueve y defiende la libertad de expresión, "el panorama de la libertad de expresión en México no mejoró" durante su mandato, y la impunidad de los crímenes contra periodistas llegó y se mantiene en el 99,2%. Desde el año 2000, nueve mujeres y 111 hombres periodistas han sido asesinados.
Rock considera que los asesinatos se deben a una "conjunción" de factores, entre los que están "el auge importante de la inseguridad en el país, especialmente en la implantación de mafias y el narcotráfico, con una complicidad del aparato político que ha permitido que queden en la impunidad la absoluta mayoría de estos casos". También advirtió que "no debe descartarse que hay ataques promovidos por políticos aliados a los narcotraficantes".
A su vez, opinó que la "débil reacción por la parte de los medios de comunicación" y la "poca presión" que han ejercido sobre las autoridades para esclarecer los casos, ha dejado en evidencia que para cambiar la situación se necesita "mayor consistencia de los medios y de la sociedad civil en general, para que juntos ejerzan mayor presión".
"Uno diría que la autoridad no debería esperar que haya presión de la sociedad civil o de los medios para hacer su tarea, pero evidentemente esa es la condición que existe en el país", acotó.