Brasil: gobierno paralizado por ausencia de Bolsonaro y desconfianza en el vice
El presidente se encuentra internado desde el 27 de enero.
Lhan a negativa a delegar sus funciones en su vicepresidente
dejado en claro la desconfianza que Bolsonaro le tiene al general retirado Hamilton Mourão, según informó ayer el Portal de Perfil.
Los motivos estarían fundados en declaraciones del vice brasileño opuestas a las del primer mandatario, enfrentamiento no disimulado con el ministro de Relaciones Exteriores, Ernesto Araújo, y un modo de ejercer su cargo diametralmente opuesto al de Bolsonaro: mientras este continúa con su retórica agresiva, Hamilton Mourão aporta moderación, ofrece entrevistas a los medios atacados por Bolsonaro y hasta se mostró solidario con el ex presidente Lula da Silva cuando dijo que era una cuestión humanitaria que pudiese ir al funeral de su hermano.
En relación al hipotético distanciamiento con China varias veces insinuado por Bolsonaro, declaró: “A veces el presidente tiene una retórica que no condice con la realidad. China no está comprando Brasil, porque nadie puede comprar al Brasil”.
En relación al que fue hasta ahora la principal realización del gobierno, la flexibilización de la tenencia de armas: “No lo veo como una cuestión de combate a la violencia. Lo veo apenas y exclusivamente como el cumplimiento de una promesa de campaña”, contradiciendo totalmente el discurso de Bolsonaro. En una entrevista a O’Globo puso en duda la capacidad del canciller de conducir la política exterior, y desde el seno de un gobierno absolutamente conservador manifestó que el aborto debe ser una decisión de cada mujer. Mourão declaró: “A veces el presidente tiene una retórica que no condice con la realidad”Vice presidente de Brasil, Hamilton Mourão. Bolsonaro desde el primer día anunció que se comunicaría con el pueblo sin intermediarios, a través de las redes sociales. Pero Mourão ofrece entrevistas frecuentemente, incluyendo los medios denostados por el presidente y sus hijos, quienes continúan tratándolos de mentirosos e izquierdistas. Según las crónicas de los propios periodistas que lo entrevistan, el vicepresidente ofrece una imagen opuesta a la de Bolsonaro, siendo accesible, amable y menos beligerante.
Mourão también se ha diferenciado del presidente al mostrarse más próximo a los modos de la convivencia democrática, algo que parece fácil cuando la comparación es Bolsonaro. Así, ante el caso del diputado Jean Wyllys que renunció a su banca y se exilió del país debido a las persistentes amenazas contra su vida, Mourão declaró que esas amenazas constituyen un ataque a la democracia.
La principal divergencia en cuanto al rumbo del gobierno que Hamilton Mourão ha manifestado es con la política exterior adoptada por Bolsonaro de la mano del canciller Ernesto Araújo, discípulo del filósofo Olavo de Carvalho. El alineamiento con EEUU e Israel, una visión altamente ideológica y, siguiendo a Donald Trump, el menosprecio a la agenda climática, entre otros, son los tópicos que no solo desagradan a Mourão sino también al resto de los militares.Y es en materia de relaciones exteriores que estos han hecho valer su poder, vetando algunas iniciativas de Bolsonaro y su canciller. La primera fue la instalación de la base norteamericana en Brasil, decisión tomada en solitario por el presidente y el canciller.