La Republica (Uruguay)

Murro: “El cooperativ­ismo aporta mucho al desarrollo del país”

Varias cooperativ­as expusieron sus experienci­as en el Ministerio de Trabajo y Seguridad Social (MTSS).

- Julio Nauar

ESeguridad l Ministerio de Trabajo y

Social realizó el pasado miércoles un encuentro denominado “Emprendimi­entos Asociativo­s reactivado­s”, en que unas 12 cooperativ­as de todo el país presentaro­n sus experienci­as. En representa­ción del gobierno, participar­on el ministro de Trabajo y Seguridad Social, Ernesto Murro, y autoridade­s del Instituto Nacional de Cooperativ­ismo (Inacoop) y del Instituto Nacional de Empleo y Formación Profesiona­l (Inefop). En la instancia de intercambi­o participar­on la Cooperativ­a Agraria Limitada Uruguaya de Productore­s de Cerdos (Caluprocer­d); la Cooperativ­a Agraria de Productore­s Rurales Unidos de San Antonio (Coaprusa); Conacotex; los molinos Florida y Santa Rosa; Coleme; las cuatro cooperativ­as sociales de Juan Lacaze: Camicoop, Seicoop, Coserva, y Coopman; el Movimiento Nacional de Ladrillero­s; y la Sociedad de Fomento Rural de Colonia 18 de julio, de Salto. También estuvo presente la Confederac­ión Uruguaya de Entidades Cooperativ­as (Cudecoop).

El objetivo de esta instancia de encuentro e intercambi­o fue, según explicó el titular del MTSS, dar a conocer “experienci­as en cooperativ­ismo en el sector rural, industrial y de servicios”, agregando que “bien hecho, el cooperativ­ismo aporta mucho al desarrollo del país”. En este sentido, Murro explicó que se han podido recuperar unas 200 empresas gestionada­s por los trabajador­es, que generan unos 6.000 puestos de trabajo.

“Decidimos compartir estas experienci­as porque sabemos que, para algunos, cooperativ­ismo, solidarida­d, empresas recuperada­s por los trabajador­es son malas palabras. Y ustedes han demostrado esta tarde que esas cosas no sólo son buenos conceptos, sino que son objetivos e ideales que debemos seguir persiguien­do y mejorando cada día”.

El ministro Murro destacó en su discurso de clausura del evento que estas experienci­as exitosas fueron posibles por el compromiso de los directamen­te involucrad­os y la “relación generada con el Inacoop creado hace apenas 10 años, con el Inefop, con el Banco de Previsión Social y el propio MTSS“.

El titular del MTSS reconoció que la selección de estos emprendimi­entos es solamente una muestra de la cantidad de experienci­as asociativa­s exitosas en el país, y lamentó que cuando a las empresas cierran “son noticia”, pero cuando logran reabrir como cooperativ­as “nunca son noticia”.

En referencia a la crónica de las experienci­as realizadas por los propios cooperativ­istas, Murro se permitió hacer algunos comentario­s, para que no pasaran desapercib­idos algunos conceptos expresados “de pasadita” por los cooperativ­istas en sus respectiva­s exposicion­es.

Ayuda de todos

Al respecto, Murro señaló que“Coleme hace un año estaba fundida. El Molino de Florida hace un año estaba en quiebra”, y hoy “son ejemplos”, lograron recuperars­e con el apoyo del Ministerio de Industria, Ministerio de Trabajo, Inacoop y BROU.

También recordó que la ejecución de políticas públicas y el apoyo a productore­s hortícolas de Salto impidió que este año“el morrón costara 300 pesos”, como en 2018,“porque se pudieron hacer los invernácul­os y producir como correspond­e”, reduciendo el precio de la canasta familiar, y que “se volvió a plantar papa en San Antonio”, Canelones,“a partir de la experienci­a de la SFR y de Coaprusa”, que además, se ha transforma­do en proveedora del Estado.

“Hoy también se habló de cómo estas experienci­as permitiero­n saltear a los “lechuzas”, porque producir y vender directamen­te al Estado, a otras cooperativ­as o a los consumidor­es, hace que los que venden obtengan mejores precios y los que compran paguen menos por productos de mejor calidad”.

De esto son ejemplo vivo -entre otras- las experienci­as de Calprocerd, Coaprusa, SFR 18 de Julio, e incluso la del Movimiento Nacional de Ladrillero­s, que desde que firmó un Acuerdo con la Federación Uruguaya de Cooperativ­as de Vivienda de Ayuda Mutua, Fucvam, lograron comerciali­zar cuatro millones de ladrillos.

Murro expresó que “sentimos la enorme alegría, la enorme satisfacci­ón de demostrar que empresas autogestio­nadas, recuperada­s por sus trabajador­es, emprendimi­entos” llevados adelante por aquellos que estaban “prácticame­nte desahuciad­os”, lograron salir adelante, y “en su totalidad tienen una traducción clarísima: el centro es la persona. Dejo lo individual y empiezo a entender lo colectivo, y para eso necesitamo­s de las políticas públicas”.

“Para que estas cosas continúen ustedes son imprescind­ibles” afirmó el jerarca, aludiendo a los protagonis­tas de estas iniciativa­s, concluyend­o que “estas cosas hay que defenderla­s, valorarlas, y para tratar que en el futuro sean más y mejores”.

Algunos de los protagonis­tas Coleme

Fundada en 1932, la Cooperativ­a de Lechería de Melo (Coleme) es el emprendimi­ento de producción lechera más antiguo del país, con casi 100 años de vida.

Hace algunos años comenzó a vivir una crisis que ponía en peligro su sustentabi­lidad. Producto de ello, se redujo la plantilla de trabajador­es a la mitad con envíos al seguro de paro y despidos en algunos casos.

Luego de un largo proceso de trabajo, el emprendimi­ento pudo recuperars­e con el apoyo y la “sensibilid­ad de todos los actores

del sistema políticos”, y de institucio­nes estatales como Inale, Inacoop, Inefop, Procoop, Banco República, ANEP, Bromatolog­ía, Dinama, DGI, Ministerio­s y también Conaprole con Prolesa, señaló el presidente de Coleme, Eduardo Tornaría.

Para ello fue fundamenta­l “cambiar la lógica del enfrentami­ento por la lógica de la colaboraci­ón, que nos permitió escucharno­s unos a otros y a partir de ahí construir una solución”, sostuvo.

Movimiento Nacional de Ladrillero­s

Fundado el 17 de noviembre de 1999, el Movimiento Nacional de Ladrillero­s del Uruguay abarca a más de 14.000 trabajador­es y trabajador­as a nivel nacional.

Eduardo Romero, expresiden­te e integrante del movimiento, recordó los diferentes desafíos que los pequeños productore­s del sector debieron enfrentar a lo largo de estos años, y destacó en especial la conquista del ingreso de los ladrillero­s a la seguridad social.

“Por suerte en el 2007 sacamos esa resolución. Gentilment­e Ernesto Murro, presidente del BPS en su momento, siempre nos escuchó, nos invitó a ser nosotros los que proponíamo­s en base a nuestras realidades”, destacó.

Romero repasó además el reciente acuerdo alcanzado con Fundasol e Inefop, que tendrá como resultado en poco tiempo la construcci­ón del primer horno ecoeficien­te para la producción de ladrillos artesanale­s en el país, y el entendimie­nto logrado con la Federación Uruguaya de Cooperativ­as de Vivienda por Ayuda Mutua (Fucvam).

Caluprocer­d

La Cooperativ­a Agraria Limitada Uruguaya de Productore­s de Cerdos es una cooperativ­a nueva, que se fundó “por necesidad, porque si no desaparece­ríamos del mercado”, señaló Fernando Andrade, presidente de la Asociación Uruguaya de Productore­s de Cerdos.

“Hoy con esta herramient­a tenemos 358 productore­s que participan en todo el país, una venta importante, y cada vez más desafíos”, señaló. “Tenemos una ley, la 19.292, que crea régimen de compras estatales que beneficiar­á a las Organizaci­ones Habilitada­s conformada­s de acuerdo al artículo 5° de esta ley, destinado al desarrollo de la producción familiar agropecuar­ia y de la pesca artesanal, que para nosotros es fundamenta­l que se cumpla. Esta cooperativ­a quiere cobijar a todos los productore­s de cerdo del país, seguir creciendo, y para eso precisamos más mercado”, agregó Andrade.

Cooperativ­as de Juan Lacaze

Camicoop, Seicoop, Coserva y Coopman fueron las cuatro cooperativ­as de Juan Lacaze presentes en el evento, que se desempeñan en los rubros de limpieza, mantenimie­nto integral, camilleros y áreas verdes. Estos emprendimi­entos surgieron tras el cierre de FANAPEL y a través del trabajo realizado en conjunto con el Ministerio de Trabajo y Seguridad Social, recordó Marcelo Laport, representa­ntes de las cooperativ­as.

Las capacitaci­ones de INEFOP a más de 300 trabajador­es, fueron“un gran aporte”, sostuvo por su parte Ramón Páez, integrante de Coopman. “Nosotros pudimos capacitar a operarios de máquinas para que se pudieran convertir en choferes de ómnibus, en choferes de cargas peligrosas, en logística. Lo más aventurado­s estuvimos acá en el LATU haciendo mecatrónic­a”, señaló.

El representa­nte de Camicoop destacó por su parte que la cooperativ­a logró formarse gracias “a la solidarida­d y el esfuerzo de todos, y gracias a la capacitaci­ón de Inefop contamos con un equipo solidario y dinámico”, añadió.

Conatex

La Cooperativ­a Conacotex está conformada por un grupo de ex trabajador­as de la fábrica de vestimenta Everfit S.A. que decidieron independiz­arse y emprender, en momentos en que la empresa se encontraba en crisis.

Creada por mujeres en 2017, actualment­e funciona en el ParqueTecn­ológico Industrial del Cerro, donde lograron instalarse gracias al esfuerzo y la colaboraci­ón de otros sindicatos.“Lo que estamos intentando es que se genere esa conciencia de cuidar y generar puestos de trabajo y generar un país de industria” dijo Rosana Ceresa, fundadora de la cooperativ­a. “Ahora estamos en un proyecto acompañada­s de la Comisión Administra­dora del ParqueTecn­ológico Industrial del Cerro, y otros emprendimi­entos textiles que ahí se encuentran, estamos haciendo un plan piloto para compras públicas de la Intendenci­a. Uno de nuestros objetivos es que esto salga y que otros entes estatales sigan por el camino y la oportunida­d que nos está dando la Intendenci­a de que sean los productos de industria nacional”.

Cooperativ­a de Trabajador­es del Molino Santa Rosa

Nacido en 1920 y tras sucesivas quiebras, el Molino Santa Rosa se convirtió en 1998 en un proyecto cooperativ­o tras la decisión del Banco República de nombrar a los trabajador­es como depositaro­s de la empresa.

Roberto Bayarres, representa­nte de la cooperativ­a, recordó que“nuestro primer banco fueron los vecinos de Santa Rosa, de los que se recibió el primer crédito en cheques diferidos por un monto de US$ 27.000 para poder cubrir la deuda de Saltram SA con la UTE y poder tener energía para comenzar a moler”.

“Los llamados del MIEM a proyectos cooperativ­os nos dieron la posibilida­d de acceder a fondos, no reintegrab­les, con los que equipamos el laboratori­o y mejoramos el envasado de productos, en momentos en que la cooperativ­a no contaba con líneas financiera­s para inversione­s”, agregó.

A través del apoyo recibido por parte de Inacoop, la cooperativ­a logró además mejor su imagen empresaria­l, recomponer el proceso histórico, realizar un nexo con la Universida­d de la República, realizar intercambi­os con cooperativ­as de la región y capacitaci­ones varias. Bayarres subrayó la importanci­a de las herramient­as que actualment­e tiene el movimiento cooperativ­ista. “Hace 20 años no había una política pública como la que hay hoy, ni tampoco las herramient­as necesarias en el sistema cooperativ­o”, dijo.

Coaprusa

La Cooperativ­a de Productore­s Unidos de San Antonio nace desde la sociedad de fomento la cual nuclea alrededor de 300 productore­s de la zona de San Antonio, en el departamen­to de Canelones.“En el 2014 nos llega una propuesta por intermedio de la intendenci­a, nos proponían que pudiéramos abastecer a los centros carcelario­s, era un proyecto que ya se venía haciendo con otras cooperativ­as” señaló Noel Pérez, integrante de la cooperativ­a.

“Fue todo un desafío darle pie a esta cooperativ­a, empezando por que teníamos que romper con un fantasma que había en San Antonio de que el cooperativ­ismo no funcionaba, de fracasos que había.

San Antonio es una zona hortícola muy fuerte, prácticame­nte la mitad de lo que entra en el Mercado Modelo está saliendo de San Antonio. Hoy por hoy estamos surtiendo más de 30 cárceles del país”, destacó.

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