Elecciones de Mendoza no cambiarían intención de voto
Los resultados de las PASO se reforzaron y nada que haga el gobierno parece registrar en los votantes.
No hubo efecto Mendoza ni movimiento alguno. Durante la última semana se especuló con que la victoria del radicalismo en la tierra del vino podría tener influencia en el resto del país. Lo cierto es que nada se movió.
El Frente de Todos ampliaría levemente la ventaja obtenida el 11 de agosto y ganaría con toda claridad en primera vuelta, pasando el 50 por ciento de los votos, cuando necesita el 45. Las dos fórmulas principales, Alberto Fernández-Cristina Fernández de Kirchner y Mauricio Macri-Miguel Angel Pichetto, aumentarían algo su caudal, básicamente a costa de las terceras fuerzas y en virtud de la exclusión del voto en blanco en el cómputo. Todo indica que el “Macri-tour” y el “Sí se puede”no mueven el amperímetro. Las conclusiones surgen de la encuesta realizada por la consultora “Trespuntozero” que lidera Shila Vilker. En total se entrevistaron 1200 personas a través del sistema de panel online, respetando las proporciones por edad, sexo y nivel económico-social. El trabajo está en sintonía con los resultados de las encuestas domiciliarias que fueron las que pronosticaron la amplia victoria del FdT en agosto y “Trespuntozero” fue de las consultoras que también advirtió sobre la diferencia nítida a favor de la fórmula Fernández-Fernández. Las elecciones para gobernador en Mendoza, el domingo pasado, produjeron una especie de ebullición entre los dirigentes y los medios más cercanos al oficialismo. No faltaron los que sostuvieron que había posibilidad de nacionalizar lo ocurrido, aunque la simple formulación planteaba un problema: en Mendoza sacaron de la cancha al presidente Macri, lo borraron de los carteles y la publicidad, mientras que en la campaña del 27 de octubre es el principal candidato.
La encuesta confirma que no hay margen para las sorpresas.“No se ve una modificación sustancial del escenario respecto a las Paso --señala Vilker--. El voto Paso está consolidado en lo estructural y lo que se pone en discusión a veinte días de las elecciones generales es de cuánto será la brecha que separe al primero del segundo”. Según el estudio, la brecha sube un punto: fue 16 la diferencia en agosto y es 17 ahora. (Página 12)
El debate puede ser un hecho político importante, pero no tiende a reordenar el voto ni sus razones. Las principales razones del voto que ordenaron el tablero en las Paso, la cuestión económica doméstica, no ha cambiado; más bien la economía de bolsillo tiende a deteriorarse día a día, y con ello, la ilusión de reversión por parte del gobierno”
Vilker