La Republica (Uruguay)

Pepe Vázquez: “Los jóvenes tienen que saber que el miedo no es la forma”

El consagrado hombre de teatro recibirá la Medalla Delmira Agustini (MEC) el lunes 14 de octubre, a las 12 horas, en el Auditorio Vaz Ferreira.

- Alfredo Percovich

La Medalla Delmira Agustini se otorga con la finalidad de “distinguir a personalid­ades de la cultura y las artes”. El lunes 14, junto con Pepe Vázquez, serán reconocido­s el ministro de Economía y Finanzas, Danilo Astori y el director del Centro Cultural de España, Ricardo Ramón Jarne.

Pepe se apasiona cuando habla de casi todo. Pero se emociona especialme­nte cuando recuerda a su querida Imilce, compañera del alma. Habla con delicadeza puntual de los amigos que ya no están y cuida cada palabra para contar sus matices sobre el presente como para no herir susceptibi­lidades. Ninguna necesidad. De todos modos, su sonrisa divina lo suaviza todo. Incluso los reclamos sobre ciertos descuidos de las políticas públicas en materia cultural que le exigen pagar plata para trabajar. Un dinero desconside­rado y torpe que le asegure al Estado que no perderá plata por tener a una leyenda viviente del teatro nacional con sus obras en una sala pública.“Nunca creí en los Reyes Magos y por eso siempre supe que esto no iba a ser fácil”admite. Una tarde como tantas, Pepe recibió una llamada mientras selecciona­ba algunos poemas para leer en un evento al que fue invitado junto al Coro de Hombres Gay de Montevideo, que dirige Alejandro Giacone. Era la ministra de Educación que le informaba sobre un reconocimi­ento por su aporte a la cultura. El próximo lunes 14 de octubre, PepeVázque­z recibirá la medalla Delmira Agustini. “Fijate que ese premio se lo dieron nada menos que a Ida Vitale, algo merecidísi­mo para ella pero yo qué me iba a imaginar que me lo fueran a dar a mí. Es más, cuando escuché a la ministra que me decía eso me empecé a reír, supongo que por la mezcla de la emoción y los nervios. Es que me movió el piso, es algo muy valioso ”reconoce. Pero claro, el humor lo acompaña todo.“Y yo que pensaba que algún día me iban a dar el Óscar (risas)”. La noticia del premio la ha tenido a resguardo de vanidades anacrónica­s para cualquiera en estos tiempos de realismo real, más aún para alguien que anda por la vida con su bastón de aplomo. “Lo hablé con mis compañeros de teatro y mucha gente se puso muy feliz, la gente de la Comedia (Nacional), Marianita (Percovich) que es una mujer tan ejecutiva por sus responsabi­lidades del cargo, me felicitó y me preguntó día y hora de la entrega para poder ir, en fin, estoy muy contento, muy feliz”.

Pensar el futuro

Vázquez, como tantos trabajador­es y trabajador­as de la cultura, se define sin vueltas como “de izquierda de toda la vida”. Su compromiso ha trascendid­o lo partidario. Ha sido parte de la vida. Acaso por ello, no sorprende que unos días atrás haya sido convocado a una reunión para reflexiona­r en clave de políticas culturales para un posible gobierno del Frente Amplio .“Charlamos mucho, se habló de manera muy frontal. Yo destaco primero que nos hayan llamado. Eso es bueno. Que nos escuchen. Hubo aporte muy valiosos, como el de Mario Delgado Aparaín en relación a la importanci­a de la identidad nacional, o los actores que hicieron mención a la ley de medios en relación a la difusión. Hablamos del Plan Ceibal, de llegarle a la comunidad. Es importante que escucharan a la gente del cine, a los músicos, allí estuvo Eduardo Larbanois, oír lo que tiene para decir Carlos Liscano, debatir sobre lo que estamos pasando la gente de la cultura en materia de trabajo. También hubo por supuesto reflexione­s en tono crítico. Hubo de todo. Mario Carrero dijo que cuando era muchachito allá por la década del 60 le vinieron ganas de cantar y se mandó.Y en aquellos años la cultura era toda de izquierda, entonces nos invitó a reflexiona­r sobre qué nos pasó como sociedad en estos años y qué ocurrió en el mundo. Muchas cosas han cambiado. Pero será tal vez porque nunca creí en los Reyes Magos, que yo sabía que estos 15 años de gobierno no se iban a preocupar como prioridad en absoluto por la clase media, sino que se iban a preocupar por los más pobres desde el punto de vista económico. Se ha hecho este país posible. Que no quiere decir que no le tiremos de las orejas a los gobernante­s cuando

creemos que se lo merecen. Y Daniel (Martínez) nos escuchó, fue muy cálido. Tomaron nota. Me parece que ese es el camino. Por ejemplo, la cultura en Montevideo ha hecho muchas cosas muy importante­s.Y ahí estuvo Daniel (Martínez) como intendente hasta hace poco y la responsabl­e de cultura ha sido Mariana (Percovich). Por ejemplo, han logrado que la gente en determinad­os barrios se apropie del lugar y sean ellos quienes actúen como punta de lanza. Eso es acción cultural también. Se ha pensado en esa riqueza de la diversidad y la inclusión de la gente de los barrios”.

Derribando prejuicios

Días pasados, Pepe Vázquez fue invitado a participar de un espectácul­o con el primer Coro de Hombres Gay de Montevideo. “Están haciendo un trabajo divino.Yo pensaba desde los prejuicios que uno tiene si los escucharía­n… ¡Estaba repleto de gente! Lleno de gente humilde, de barrio. Ellos cantan de todo, desde Zitarrosa, Chabuca Granda hasta Villa Lobos. Me encantaría que todo el mundo los viera cantar con tanto amor. Que vea que hay mucha calidad musical y que provienen de distintos estratos sociales, muchos de ellos con pantalones rotos, pero no por estar a la moda, sino de pantalones viejos, porque son muy pobres y muy humildes.

Es decir, hay mucho por pensar juntos en términos de qué sociedad queremos. Mirá, yo ya no puedo asistir a las marchas en las que quisiera estar. Lo que hago es ir a los 100 metros finales para marcar mi presencia en apoyo a determinad­as causas como la de la Marcha del Silencio. Mi hija fue el otro día a la Marcha de la Diversidad con mis nietos y mi yerno.Y eso para mí es una emoción muy grande.

La reforma del miedo

En relación a la reforma constituci­onal que impulsa el senador Jorge Larrañaga, Pepe no anda con vueltas. “El miedo no es la forma ni lo será jamás. ¡Por supuesto que no voy a votar la reforma!”. Rechaza la idea que los militares vuelvan a las calles y está convencido que dicha reforma apunta a los jóvenes por ser los sospechoso­s de siempre.“A mí qué me van a pedir la cédula ahora de noche cuando vuelvo del teatro con mi bastón caminando como la tortuga Manuelita (risas).

Los abandonado­s

“Yo he sido un hombre de izquierda toda mi vida. Estoy dispuesto a dejar algunas cosas personales, mi comodidad personal o como se llame. Si es para hacer una política de inclusión hacia los más pobres, que lo hagan, que cuenten conmigo, yo no tengo ningún problema. Los Reyes Magos no existen. Quiero insistir en algo que hablamos recién, yo sabía que estos gobiernos no iba a priorizarn­os a nosotros, a la clase media, sino que iban a mirar a los más abandonado­s por la miseria y vaya si lo han hecho y todavía falta, sí, claro que falta, porque somos un pedazo chiquito de un continente que vive bajo los designios de ese 20% que maneja los dineros del mundo. Estos gobiernos de izquierda han apuntado a defender las posibilida­des de trabajar y no vivir la vida de prestado como ya vivimos con el Fondo Monetario. Hay que hablar de todo eso y yo estoy dispuesto a hacerlo. ¿Cuál es el problema? ¿Que no nos podemos comprar dos pares de zapatos por año? ¿Y para qué? Mirá, China Zorrilla fue un ejemplo de mujer austera. Ella trabajó en un medio en el que pudo ganar miles de dólares.Y yo me acuerdo que u día en un almuerzo con Mirtha Legrand dijo, la conductora le dijo: Chinita, siempre venís con el mismo tapado, hace años que lo tenés y ella dijo: soy cristiana, con lo que le pasa al mundo ¿para qué necesito otro, si este está nuevito?. Esa era China Zorrilla. La que con su dinero ayudaba a la gente, tenía tres o cuatro apartament­os en este país y ella se los daba para vivir a gente de teatro que andaba en la yaga. Si uno habla de Jesucristo -hay que leer el Sermón de la Montaña varias veces- hay que poner la cara.Yo no tengo problema, el flaco tampoco y hay una cantidad de compañeros de teatro que están mirando las cosas como nosotros”.

Teatro en la CNT

“Toda mi vida he estado vinculado al movimiento sindical. Recienteme­nte estuve actuando con mi obra“Paciencia y pan criollo” en la sede del PIT-CNT. Recuerdo que el día que se inauguró ese espacio, estuvieron el inolvidabl­e y querido Daniel Viglietti, Washington (Carrasco) y Cristina (Fernández), muy un día hermoso. Le dije a (Fernando) Pereira que cuente conmigo siempre. No solamente conmigo, él sabe que puede contar con muchos compañeros de la cultura. Mirá, antes de tener que irnos del país al exilio, íbamos con los compañeros del teatro El Galpón a las fábricas que estaban ocupadas para hacer actuacione­s, monólogos y también algunos sketches, especialme­nte cuando los trabajador­es estaban viviendo aquellos momentos tan difíciles. Había que estar y ahí estuvimos en las fábricas con la CNT. Ahora estamos para ir a apoyar lo que los trabajador­es precisen, como siempre. Te cuento algo más, todos los años me invita la Federación de la Carne (FOICA) a su aniversari­o para el almuerzo con los veteranos que todavía están vivos, que resistiero­n y que estuvieron en la cárcel.Yo me hice así.Y en eso estamos. Hay toda una construcci­ón que cuidar y defender.Y si se cae un poco de arcilla, pues habrá que empezarlo otra vez”.

Los jóvenes

“Me gustaría decirles que ellos son fundamenta­les, son imprescind­ibles en esta construcci­ón del futuro.Tienen que sentir que los apoyamos, saber que los viejos necesitamo­s el soporte de ellos y nosotros los tenemos que oír.Y entenderlo­s. Todos necesitamo­s el uno del otro y esos jóvenes tienen que poder correr, bailar y danzar. Tienen que poder manifestar todas sus necesidade­s de expresión. Y tienen que saber con certeza que tienen un lugar para expresarse.Y por supuesto, tienen que saber que el miedo no es el camino, que si no tenés cédula te puedo llevar preso y te meto adentro de una camioneta. No. No es así”concluyó .

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