En el MAM se celebrará el Día Mundial de la Alimentación
Esta jornada de concientización será celebrada en 150 países y la FAO lo hará en nuestro país con varias actividades en el MAM.
El Día Mundial de la Alimentación 2019 marcará el 74º aniversario de la fundación de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO). El 16 de octubre es uno de los días más celebrados en el calendario de las Naciones Unidas. Esta fecha será conmemorada por la FAO en su sede central en Roma y a nivel local en unos 150 países. En tanto, en Uruguay la celebración se llevará a cabo en el Mercado Agrícola Montevideo, MAM.
En la conferencia de prensa de lanzamiento de las actividades a realizarse con motivo del Día Mundial de la Alimentación, participaron la directora del MAM, María Elisa Areán; el ministro de Ganadería, Agricultura y Pesca, Enzo Benech; el director del Instituto Nacional de Alimentación (INDA), Gerardo Lorbeer; y el oficial a cargo de la representación en Uruguay de la FAO, Vicente Plata.
Según lo expresado por el funcionario de la FAO, el organismo internacional “fue fundado el 16 de octubre de 1945, por lo que conmemoramos el Día Mundial de la Alimentación ese día”, eligiendo cada año un lema diferente. El objetivo de la conmemoración “es sensibilizar a los Gobiernos y a las poblaciones de que eliminar el hambre y todas las formas de malnutrición en el mundo es una de las tareas más importante que tenemos”.
En 2019 el lema de la celebración será “Nuestras acciones son nuestro futuro. Una alimentación sana para un mundo Hambre Cero”. Según Plata, la elección de la consigna obedece a que “somos la primera generación que puede llegar a habitar en un mundo libre de hambre y libre de malnutrición. Esto está directamente relacionado con el segundo Objetivo de Desarrollo Sostenible” que todos los países han suscripto, incluso Uruguay, y que se espera lograr a más tardar en 2030.
Para alcanzar este objetivo es necesario adoptar “una combinación de dietas que sean saludables y mejores estilos de vida. Hoy, el problema es que hay tanta gente con sobrepeso y obesidad como personas que padecen hambre”. Cada uno de los grupos suma más de 800 millones de personas, según datos de la FAO.
Vicente Plata invitó a la participar de la celebración del Día Mundial de la Alimentación, cuyas actividades centrales se llevarán a cabo en el MAM. En esa jornada se desarrollarán varias actividades. A partir de la hora 9 diferentes instituciones brindarán información, se instalará una huerta educativa, habrá actividades recreativas para escolares y liceales, y a la hora 12, se realizará una instancia protocolar en la que participarán diferentes autoridades nacionales y departamentales.
El rol clave del MAM
Por su parte, Lorbeer, dijo que “lo que el MAM ha hecho para Montevideo, para el país, para su sociedad, es poner por encima del desarrollo económico las actividades para conformar desarrollo humano, lo que además impacta directamente, no solamente en la actividad propia en el mercado, sino en una zona pauperizada, deprimida que se vio rejuvenecer. Eso es el mensaje que queremos dar con las actividades del 16 de octubre: No es solamente seguridad alimentaria y nutricional, es desarrollo humano sostenible”. Lorbeer agregó que “nos falta más legislación para asegurar, garantizar y consagrar el derecho a una alimentación adecuada en todas las edades de las personas”.
Benech aseveró que “se necesita trabajar fuerte en educación, porque vivimos en un país extremadamente rico, nos sobran alimentos, le vendemos al mundo, pero a todos nos falta comer bien. Consumimos mucho menos frutas y verduras de las que deberíamos, a pesar de que está lleno y de que hay mucha gente que vive de esto. Pero si los productores familiares no logran vender su producción, poco sentido tiene”, advirtió.
Areán, anfitriona del Día Mundial y de la conferencia de
lanzamiento, destacó que la jornada del 16 de octubre“va a tener muchísimas y coloridas muestras, más todo lo que está promoviendo el MAM”.
La jerarca destacó también “la alegría que nos da recibir todos esos productos frescos y coloridos, maravillosos, y el cambio de alimentación, (que incluye) más vegetales, más alimentación saludables y más vida al aire libre”.
La situación uruguaya
El hambre fue erradicada en Uruguay. No obstante, no estamos ajenos al problema de la malnutrición. El sobrepeso y la obesidad presentan un “crecimiento exponencial”, según evalúa el Ministerio de Salud Pública, quien califica esta condición como “una epidemia”.
Uruguay aparece como uno de los países donde los porcentajes de afectación crecieron con mayor rapidez en los últimos 10 años. El 36% de los niños tienen sobrepeso y el 12,2% obesidad. Nuestro país presenta las cifras más altas del continente en sobrepeso infantil. Por otra parte, siete de cada diez adultos tienen sobrepeso u obesidad.
La causa fundamental del sobrepeso y la obesidad es el desequilibrio energético entre las calorías consumidas y gastadas. Eso se debe, principalmente, a un aumento en la ingesta de alimentos de alto contenido calórico y ricos en grasa; y a un descenso de la actividad física“debido a la naturaleza cada vez más sedentaria de muchas formas de trabajo, los nuevos modos de transporte y la creciente urbanización”, señala la Organización Mundial de la Salud, OMS.
Este organismo indica que para disminuir la obesidad y el sobrepeso“es necesario limitar la ingesta de alimentos ricos en grasas y azúcares, y sustituirlo por un mayor consumo de frutas, verduras, legumbres, cereales integrales y frutos secos, y realizar una actividad física periódica de 60 minutos diarios para los jóvenes y 150 semanales para los adultos”.
También asevera que“la industria y el gobierno deben tomar medidas para reducir el contenido de grasa, azúcar y sal de los alimentos procesados, y asegurar que las opciones saludables estén disponibles y a precios accesibles”.
“Nuestras acciones son nuestro futuro”
Alcanzar el Hambre Cero no es solo abordar el hambre, sino también nutrir a la población, mientras se cuida del planeta. Este año el Día Mundial de la Alimentación demanda acciones en distintos sectores para hacer que las dietas saludables y sostenibles sean accesibles para todos. Al mismo tiempo reclama que todos empecemos a pensar en lo que comemos.
En las últimas décadas hemos cambiado drásticamente nuestras dietas y hábitos alimenticios como resultado de la globalización, la urbanización y el aumento de los ingresos. Hemos pasado de consumir platos de temporada elaborados principalmente a base de plantas y ricos en fibra, a dietas hipercalóricas con un alto contenido de almidones refinados, azúcar, grasas, sal, alimentos elaborados, carne y otros productos de origen animal.
Se dedica menos tiempo a preparar comidas en casa y los consumidores, sobre todo en las zonas urbanas, dependen cada vez más de supermercados, establecimientos de comida rápida, vendedores de alimentos en la vía pública y restaurantes de comida para llevar.
Una combinación de dietas poco saludables y estilos de vida sedentarios ha disparado las tasas de obesidad no solo en los países desarrollados, sino también en los países de bajos ingresos, donde el hambre y la obesidad a menudo coexisten. Ahora, más de 670 millones de adultos y 120 millones de niñas y niños (de 5 a 19 años) son obesos, y más de 40 millones de niños menores de 5 años tienen sobrepeso, mientras que más de 800 millones de personas padecen hambre.
La dieta poco saludable es una de las principales causas de muerte en todo el planeta por medio de las enfermedades no transmisibles (ENT), incluidas las enfermedades cardiovasculares, la diabetes, y ciertos tipos de cáncer. Los hábitos alimenticios poco saludables, relacionados con una quinta parte de las muertes en todo el mundo, también están repercutiendo adversamente en los presupuestos sanitarios nacionales, con un costo de hasta 2 billones de dólares al año.
Hoy en día hay poco espacio para los alimentos frescos producidos localmente en el modo de funcionamiento de nuestros sistemas alimentarios, desde la producción agrícola hasta el procesamiento y la venta al por menor, ya que los cultivos rentables y de alto rendimiento tienen prioridad.
La producción de alimentos intensificada, combinada con el cambio climático, está causando una pérdida rápida de biodiversidad. Sólo nueve especies de plantas representan el 66% de la producción total de cultivos, a pesar del hecho de que a lo largo de la historia, más de 6.000 especies se han cultivado para obtener alimentos. Una variedad diversa de cultivos es crucial para proporcionar dietas saludables y salvaguardar el medio ambiente.