Un exjuez y un diputado colorado entre los cinco imputados por explotación sexual de adolescentes
“Operación Océano”: también fueron imputados el dueño de una discoteca, un arquitecto y un exasesor de la Ursea.
Fuentes de Interpol dijeron que puede haber más detenidos en las próximas horas. El delito de explotación sexual de menores tiene una pena de 2 años de penitenciaría a 12 de prisión. No es excarcelable.
L a Fiscalía Penal de Montevideo de Delitos Sexuales, Violencia Doméstica y Violencia basada en Género de 5º turno, integrada por la fiscal titular Darviña Viera y las fiscales adscriptas Fulvia Favretto y Giuliana Realini, imputó en la tarde del miércoles a cinco hombres detenidos en el marco de la Operación “Océano”.
La fiscal penal Darviña Viera imputó a cinco personas de un delito de explotación sexual de adolescentes y dispuso la prohibición de acercamiento a las víctimas. Dos de los imputados también fueron imputados por suministro de estupefacientes. Los cinco imputados son un exjuez de menores y Aduanas, un legislador suplente del Partido Colorado, el dueño de una discoteca, un arquitecto y un exasesor de la Unidad Reguladora de Servicios de Energía y Agua (Ursea), entre otros, ya que habría una treintena de investigados, según supo LA REPÚBLICA y confirmó ante la prensa este miércoles a primera hora de la tarde la fiscal. Viera dijo que si bien el delito no es excarcelable, en esta etapa no creyó necesario pedir la prisión preventiva, lo que no quita que cuando se haga el juicio se determine la condena con prisión efectiva. La fiscal dispuso, además, la suspensión en el ejercicio de la patria potestad o guarda de los imputados respecto de sus hijos y se los inhabilite para el ejercicio de funciones públicas y privadas en el área educativa, de la salud y todas aquellas que impliquen tratos directos con niños, niñas y adolescentes, personas con discapacidad y personas mayores en situación de dependencia.
Imputaciones
Uno de los hombres fue imputado por un delito de prometer pagar a una adolescente a cambio de la ejecución de actos sexuales, en reiteración real con la modalidad de ofrecimiento de estupefacientes, según informa el dictamen fiscal del caso. A otro se le imputaron reiterados delitos de retribución a una adolescente a cambio de la ejecución de actos sexuales, en reiteración real con reiterados delitos de suministro de estupefacientes. Por último, los tres hombres restantes fueron imputados por reiterados delitos de retribución a una adolescente a cambio de la ejecución de actos sexuales.
En rueda de prensa la fiscal Viera sostuvo que “por ahora no es necesaria la prisión preventiva”, por lo que se dispuso “no acercamiento ni comunicación con las víctimas y fijación de domicilio”.
“Puede llegar a haber más personas implicadas, pero Fiscalía está investigando. Las personas no tienen antecedentes”, aseguró la fiscal Viera.
La investigación comenzó en Maldonado tras una denuncia. Se incautaron los celulares de las víctimas y desde allí se llegó a los involucrados en el caso, explicó la fiscal en rueda de prensa tras la audiencia de formalización.
Delitos Especiales de Interpol fue el encargado de la investigación, con un operativo enfocado en fiestas electrónicas en las que se reclutaban a menores de edad a quienes se pagaba a cambio de sexo.
La pista
La investigación tiene puntos de contacto con el hallazgo en marzo del cadáver de una joven de 17 años a orillas del arroyo Solís Chico. La víctima había partido desde Tres Cruces y no se supo más de ella hasta la comprobación de su muerte. Los investigadores dieron con una amiga de la joven fallecida, que ejerce la prostitución en Punta del Este. Se supo entonces que ambas habían denunciado por abuso sexual a un hombre. A su vez, el denunciado las acusó de extorsión. La fiscal Viera dijo que las retribuciones a menores se hacían con pagos en efectivo, pero también con regalos. Además, se investiga el uso de drogas.
La defensa de algunos de los detenidos sostiene que hubo chantaje detrás de la denuncia y aseguran tener copias de los chats de sus clientes con las jóvenes, lo que comprobaría que nunca supieron la edad de las involucradas.