Un nuevo modelo de educación virtual con la pandemia
La expansión de Zoom marca un cambio trascendente impulsado por la pandemia. Implicó la generalización de una tecnología de comunicación con un rol educativo de interacción sincrónica con alta cantidad de participantes tanto de imagen y sonido como en chat, así como con capacidad de compartir pantalla y grabación, facilidad en el acceso y un ancho de banda sustentable a través de Internet. Zoom Video Communications es una plataforma de comunicaciones unificadas centrada en la tecnología de vídeo que ofrece reuniones con video, voz, seminarios web y chat en ordenadores, teléfonos, dispositivos móviles y sistemas de salas de conferencias.
Ella no es nueva, sino que fue fundada en 2011 y utiliza dos servicios llamados Zoom Meeting y Zoom Room, en donde la primera es la reunión de videoconferencia alojada en la plataforma y la segunda la configuración del hardware físico para programar y realizar conferencias. Otras aplicaciones como Blackboard brindan un servicio más completo, pero Zoom impulsó un modelo de negocios con una prestación de base gratuita y un formato de precios ventajosos que se constituyó en el impulso determinante de un nuevo modelo de educación. Este modelo educativo apoyado en clases a través de internet -casi igual a la dinámica presencialse conformó como el paradigma de continuidad educativa de la educación de emergencia que se gestó con la parálisis de la educación presencial. Pero también se conformó como un nuevo modelo híbrido y sincrónico de educación, con el traslado de la dinámica presencial al apoyarse en clases catedráticas por internet y acceso desde celulares y computadores, interacción amplia pero con posibilidad de ordenarla al abrir o cerrar micrófonos, con las mismas horas fijas de clases e incluso posibilidad de grabar y con ello la comodidad para tomar apuntes o ver la clase en diferido. Todo ello permitió su rápida generalización
Se gestó una educación sincrónica de aulas digitales pero también un modelo de negocio con una prestación de servicios mínimos gratuitos (los famosos 40 minutos) y múltiples prestaciones superiores de pago pero todas ellas con tarifas relativamente accesibles gracias a la masividad que adquirió el servicio a escala global por la generalización del acceso y el bajo costo de Internet. Fue un negocio fabuloso y permitió que el valor de las acciones de Zoom saltase de 76,3 dólares al primero de febrero del 2020, a 564 dólares al 20 de octubre. El valor de la empresa en apenas 8 meses se multiplicó por 7,3 veces con un crecimiento fantástico que la consolidó como la empresa dominante en este mercado de enseñanza y reuniones por internet. Zoom comunicó al mundo en la pandemia, casi anuló a Skype e impulsó el establecimiento de un modelo educativo a distancia a escala global y también impactó en la sustitución del modelo de negocios previo de educación virtual.
Este modelo anterior de educación a distancia y virtual, se apoyó en plataformas en una dinámica educativa asincrónica apoyado en plataformas de tipo LMS (Learning Management System): y tanto Moodle (de fuente abierta) como Blackboard (de fuente propietaria) se constituyeron en los mayores prestadores. Para el 2020, este mercado global de LMS alcanza a 13.4 mil millones de dólares en 2020 y se proyectaba un crecimiento anual del 14% para alcanzar a USD 25.7 mil millones para 2025. La realidad cambio con la disrupción tecnológica y los pronósticos seguramente cambiaran. La irrupción de un modelo de educación a distancia sincrónico en tiempo real como centro de las interacciones educativas, dejo de lado la centralidad del modelo de educación a distancia apoyado en actividades asincrónicas apoyadas en plataformas de tipo LMS y que requieren además de técnicos y especialistas para configurarlo en los servidores locales y asignar aulas o tareas. Esta modalidad de educación a distancia de tipo LMS estructurada en aulas virtuales ya se estaba trasladando a la nube con nuevas ofertas de proveedores de LMS que aportaban además de mayor seguridad y control al acceso a la información y permitiendo más ampliamente conexiones globales y permitían agregar nuevas prestaciones como video conferencias.
El nuevo modelo de educación a distancia que impulsó ZOOM en la pandemia, que funciona como una educación presencial en red y por ende sincrónica, o como una educación híbrida, también plantea la necesidad de actividades asincrónicas de apoyo a través de un campus virtual que permita el acceso a recursos de aprendizaje, evaluaciones automatizadas y actividades tutoriales y colaborativas u otras prestaciones más sofisticadas. En tal sentido el nuevo modelo se fragmentó entre la prestación de unas actividades sincrónicas de clases a través de ZOOM y otras actividades asincrónicas de apoyo, trabajo tutorial, información académica y acceso a recursos de aprendizaje en otra plataforma de tipo LMS. Muchas instituciones siguieron usando Moodle en combinación con ZOOOM. Sin embargo, tal fragmentación produce pérdida de tiempos y dificultad de una articulación y sinergias, como sí lo permite en mayor dimensión Blackboard o Canvas pero con costos elevados.
Google fue quien avanzó en forma significativa en este camino mediante la oferta de un modelo integrado llamado “Google Suite for Education” con un paquete de herramientas diseñadas para la enseñanza y el aprendizaje gratis para las escuelas y con el compromiso de seguirlo siendo, y que incluye Google Meet y Google
Classroom y que permite articular las actividades sincrónicas y asincrónicas en un campus virtual único y al mismo tiempo con capacidad de guardar recursos y con una estructura de costo mínima con lo cual muchas instituciones educativas que habían iniciado por Zoom han terminado migrando al emporio Google. Las capacidades de memoria distribuida, de red global, de accesibilidad y de financiamiento con apoyo en publicidad y múltiples mecanismos de esta empresa le permitieron introducir un modelo integrado de bajo costo que irá creciendo en el mercado y con muchas mejores prestaciones en las versiones de pago. El resultado para Google de la pandemia ha sido muy favorable como es de suponer: el 11 de marzo, las acciones de Alphabet Inc (la cabeza de Google) estaban en 1.119 dólares, y al 20 de octubre habían alcanzado a 1.541 dólares, o sea un aumento de 37% de rentabilidad en apenas 7 meses.
Con estas dinámicas, más que una sustitución de modelo por otro, lo que se produce una diferenciación de modelos de educación a distancia, pero donde el modelo sincrónico permite más prestaciones. Además de la educación semipresencial, o de la que se apoya en radio y televisión, y de la que tiene su basamento en plataformas de tipo LMS, irrumpe esta otra expresión de la educación a distancia con un enfoque centrado en clases sincrónicas. Igualmente está además el modelo de educación apoyado en MOOCs (Masivo Open On Line Courses) apoyado en plataformas tipo Coursera o Miriada X por parte de las universidades, procesos de posproducción más complejos en términos de integración de los componentes visuales, los componentes evaluativos y los apoyos de recursos de aprendizaje, y que han marcado otro mercado de la educación a distancia global.
La pandemia ha sido un aliciente fenomenal a la disrupción digital en el mundo educativo, y nos ha dejado un nuevo modelo de educación virtual.