Rodríguez Camusso: “Es un hecho repugnante, pero no Imprevisto”
“Hace cinco años, mes más o menos, en el Uruguay, en su proceso político y en su desenvolvimiento histórico se produjo un importante cambio. Valores tradicionales, estilos cultivados por encima de concepciones políticas, fueron vil e injustificadamente pisoteados: se aplicaron Medidas Prontas de seguridad que la Asamblea General, en uso de facultades constitucionales que nadie nunca sensatamente osó discutir, resolvió levantar y un Presidente de la República, que también ensució un juramento que pronunció por algo que, notoriamente, no tiene, desconoció aquel pronunciamiento. La Asamblea General de entonces no enfrentó aquella grosera violación de potestades institucionales como debió hacerlo y, a partir de entonces, gradualmente, con persistencia y con firmeza el Uruguay vivió un proceso implacable y feroz de deterioro de todos los valores fundamentales de que, como orientales, por encima de ideologías; nos enorgullecemos. La tortura, la persecución alevosa, campearon, por sus fueros desde entonces, el alud de negociados y de ilícitos más repugnantes, y la explotación más atroz signaron, en lo fundamental, la conducción política del país. Incluso las irregularidades en el campo de las opciones electorales, antes y durante el desarrollo de la confrontación pública de opiniones, sentó sus reales en estas desgraciadas circunstancias nacionales. Lo de hoy, es un hecho repugnante, pero no Imprevisto; lo de hoy, es un acontecimiento trascendente y significativo, pero no aislado, sino que entronca a la perfección en el marco de una situación lamentable que no tenemos absolutamente ningún derecho a ignorar o a limitar. Se pretende pisotear o vulnerar al Parlamento, en la misma medida y con el mismo espíritu con que se ha torturado, vejado, maltratado, calumniado y con que se ha asesinado. Se pisotea el orden institucional desconociendo al Parlamento, como antes se-desconoció y atacó la justicia. Se pretende Intervenir o sustituir al Parlamento elegido por el pueblo como antes se vulneró de modo absolutamente injustificado y violando el ordenamiento instltucional, todo lo que rige en materia de administración autónoma y descentralizada”.