La Rendición de Cuentas en la que la Infancia es prioridad
En esta oportunidad y habiendo recibido la Rendición de Cuentas me parecía importante denominar esta columna “la Rendición de Cuentas en la que la infancia es prioridad”. Obviamente de más está decir que esta Rendición como lo manifiesta su introducción, corresponde al año en el que a pocos días de instalado el gobierno se declara la pandemia del Covid-19. El gobierno nacional se basó en el respeto de las libertades de los ciudadanos a la hora de adoptar medidas. Respecto a la planificación esto obligó a movilizar los recursos necesarios para hacer frente a las demandas, ya fuera sanitarias, sociales, y económicas que fueron canalizadas por el llamado “Fondo Covid”, fondo solidario que fue constituido para tales efectos. Pese a todo lo que significó el año pasado, se logró cumplir con los objetivos fiscales que se habían planificado y que se habían mencionado en el Presupuesto. Hay una extensa lista en la cual no vamos a detenernos ahora. Pero quienes hemos estudiado varias Rendiciones de Cuentas, en realidad, nos parece que hay que poner un aspecto de la presente en relevancia. El gobierno actual, luego de haber llevado adelante una cantidad de acciones en concreto en un momento especial, también se dio tiempo para hacer evaluaciones como corresponde y observar aquellos números donde efectivamente había que reasignar y fortalecer partidas presupuestales. Por eso, cuando durante muchos años hablábamos de la necesidad de fortalecer en todas las instancias que se pudiera, la infancia y los desafíos que esto implica desde el punto de vista presupuestal, tener una Rendición de Cuentas de esta naturaleza nos parece que no puede pasar inadvertido. Por eso, queremos detenernos en el artículo 242 que reasigna créditos presupuestales en todo lo que tiene que ver con el Centro Ceibal y declara de interés nacional los programas de carácter general que tengan como objeto la innovación educativa, la inclusión de tecnologías digitales. Esto nos parece de suma importancia porque es eso todo lo que implican los desafíos de la modernidad, de los nuevos tiempos. El artículo 247, mientras tanto, asigna al Inciso 23, partidas a reaplicar Programa 404 “Atención Integral de la Primera Infancia”, una partida anual de $ 2.117.000.000 para fortalecer todo lo que tiene que ver con los programas y acciones destinados a la atención integral de la primera infancia. Asimismo, crea un grupo de coordinación que tiene como cometido establecer los lineamientos y las estrategias del programa antes mencionado, así como también proyectar la distribución de esta partida a las instituciones públicas que tienen a cargo esta ejecución. Este equipo de coordinación estará integrado por un representante de la OPP, el Ministerio de Economía y Finanzas, el Mides, el Ministerio de Vivienda, ANEP, el INAU, y ASSE. Asimismo, después de suscribir los respectivos convenios del Ministerio de Economía y Finanzas con cada una de estas reparticiones, de acuerdo a la asignación, a los 30 días ese convenio será enviado a la Asamblea General para el efectivo conocimiento del mismo, lo que implica una total transparencia en este aspecto. Nos parece totalmente importante además hablar del artículo 248, en donde habla también de partidas para reasignar de $ 352.000.000 con destino al desarrollo de políticas activas de empleo de los jóvenes entre quince y veintinueve años, de los trabajadores mayores de cuarenta y cinco años y de personas con discapacidad. Además, y no es menor, porque tiene que ver con contextos sumamente vulnerables, se habla también de una mirada estratégica a efectos del trabajo efectivo de regularización de los asentamientos, en el artículo 208, y se autoriza al Poder Ejecutivo a constituir un fideicomiso.