Ayudan comidas escolares a combatir inflación
SAN FRANCISCO — Los precios de los alimentos y bebidas aumentaron un 8 por ciento entre la primavera de 2021 y la primavera de 2022, superando a la mayoría de las otras categorías de inflación que afectan los presupuestos familiares y afectando particularmente a las familias de bajos ingresos.
A medida que los precios siguen subiendo, es posible que las familias tengan dificultades para asegurarse una alimentación adecuada, indica un reporte del Instituto de Políticas Públicas de California (PPIC).
Para aquellos con niños en edad escolar, el acceso a las comidas escolares puede ser prometedor como amortiguador contra los aumentos de precios.
Incluso antes de que despegara la inflación, la pandemia creó trastornos significativos para algunas familias, establece el reporte.
Entre 2019 y 2020, la inseguridad alimentaria se había disparado a nivel nacional entre los hogares con niños , aunque no creció para todos los hogares. En la primavera de 2020, el 14 por ciento de los hogares de California con niños en edad escolar carecían de acceso a alimentos suficientes, según la Encuesta de Pulso de Hogares del Censo.
Si bien el número cayó al 10 por ciento en el otoño de 2021 (y se mantuvo esencialmente igual en la primavera de 2022), las disparidades entre los grupos demográficos continúan siendo amplias: las familias negras, latinas y de bajos ingresos informan insuficiencia alimentaria a tasas mucho más altas que las familias en general.
Las respuestas a la pandemia de los programas de asistencia nutricional han ayudado a las familias que enfrentaron las interrupciones de la pandemia, afirma el Instituto.
Todos los escolares pudieron recibir comidas escolares gratuitas gracias a los esfuerzos apoyados por fondos federales. Pero con la mayoría de las escuelas cerradas físicamente, solo 25 millones de almuerzos mensuales llegaron a los hogares en el otoño de 2020, en comparación con los 55 millones del año anterior.
Un punto positivo fue un aumento en la cantidad de desayunos escolares, que las escuelas proporcionaron en la misma cantidad que el almuerzo, probablemente porque los distritos podían agrupar las comidas para recoger, aclara el reporte.
Cuando la mayoría de las escuelas regresaron a la instrucción presencial en 2021–22, la provisión de comidas se recuperó a 53 millones de almuerzos mensuales ( a partir del otoño de 2021), y el desayuno y el almuerzo continuaron siendo gratuitos para todos los estudiantes.