Tu cuerpo te pide ¡agua!
¿Alguna vez has sentido una sensación de resequedad en la boca, acompañada con dolor de cabeza, mareo o fatiga muscular?
Es probable que tu cuerpo te esté indicando que estás deshidratado.
“Todos nuestros órganos están compuestos de un conjunto de células que contienen agua en su interior. Al momento de estar deshidratado, esa agua dentro de la célula se pierde y bajan los niveles de electrolitos como el sodio, potasio, magnesio y cloro”, indica la nutrióloga Silvia Galaviz.
La pérdida de agua ocasiona que el funcionamiento de las células no sea el adecuado y se produzcan estos síntomas.
El líquido es un componente vital para el buen funcionamiento del cuerpo, ya que representa entre el 50 y 75 por ciento del peso corporal.
“Además de hidratar, el agua mantiene el volumen de sangre, transporta nutrientes y oxígeno, lubrica, regula la temperatura corporal y elimina los desechos”, señala la nutrióloga.
Pese a que el organismo tiene la capacidad de almacenar cientos de nutrientes, no existe una forma de reserva de agua, por eso es necesario el consumo diario de líquidos, para evitar una deshidratación.