Cae en Houston por matar a menor a puñaladas
Houston — Un veterano militar de Houston de 27 años fue acusado de asesinar a puñaladas el mes pasado a un niño de 11 años que iba caminando de la escuela hacia su casa, reportó la Policía el sábado pasado.
André Timothy Jackson hijo fue arrestado el viernes por la tarde en el Ejército de Salvación en el Centro de Houston y acusado formalmente más tarde el mismo día, declaró el alcalde Sylvester Turner en conferencia de prensa de ayer sábado. Jackson se encuentra en la cárcel del Condado Harris con fianza de 100 mil dólares.
Jackson está acusado de acuchillar a Josué Flores cuando el alumno de sexto grado caminaba de la escuela a su casa el 17 de mayo. A Josué sólo le faltaban algunas cuadras para llegar a su casa.
‘No podemos traerlo de regreso, pero espero que el anuncio de hoy pueda quizás traer algo de alivio a aquellos que lo aman’, dijo Turner, quien se refirió al asesinato del pequeño niño como ’sin sentido, brutal y a sangre fría’.
No hay motivo para el asesinato ni conexión conocida entre Jackson y Josué, expresó ayer el teniente John McGalin.
Jackson es un veterano que había vivido en el Ejército de Salvación desde mediados de abril, comentó McGalin. No se supo de inmediato en qué rama de la milicia sirvió Jackson.
Esta semana, las autoridades publicaron un video de vigilancia con una ‘persona de interés’ (un grado menos que sospechoso). El video de 36 segundos mostraba a un hombre corriendo calle abajo no lejos de la escena del crimen vistiendo una chamarra verde con una palabra parcialmente oscurecida donde sólo se podían apreciar las letras ‘LYMEN’ en la capucha de la chamarra.
El video proporcionó pistas para otro video, el cual llevó a los detectives hacia Jackson, explicó McGalin. Jackson tenía consigo la chamarra cuando lo arrestaron, agregó McGalin.
Al preguntársele cómo estaba seguro de que se había arrestado al hombre correcto, McGalin señaló que la coartada de Jackson no pudo verificarse y que ‘hizo una declaración que corroboraba muchas cosas que se sabía con certeza y nos condujo a creer que tenemos al hombre correcto’.
Varios testigos dijeron a los policías haber oído fuertes gritos y visto a Josué forcejeando con un hombre. El menor se desvaneció y fue a dar al césped cercano a la banqueta, mientras que el hombre salió corriendo. Un transeúnte le hizo señas a una patrulla y alertó a los policías sobre el menor herido, quien fue trasladado al hospital presentando heridas punzocortantes pero poco tiempo después fue declarado muerto.
Acusan a veterano militar de asesinar a cuchilladas a niño, en Houston
Un crimen absurdo
Josué salió de casa rumbo a la escuela. Desde la distancia le mandó un beso a su mamá, María Flores, quien lo observaba desde el corredor de su vivienda. Ella recuerda que el niño le gritó que regresaría tarde ese día, como a las 4:30. Tenía que asistir a su club de ciencias después de las clases.
Eso es lo último que María recuerda de su hijo, a quien le arrebataron la vida de forma violenta cuando regresaba desde su escuela.
‘Como a eso de las 4:50 me hablaron y me dijeron que habían encontrado a mi hijo sangrando… pregunté si se había caído… me dijeron que lo habían acuchillado’, narró Flores.
Según versiones de testigos, el pequeño Josué, a quien todos recuerdan como un niño dulce, venía caminando por una acera por la calle Fulton, al norte de Houston cuando fue agredido.
Un hombre afroamericano caminaba en la misma acera y en un momento dado le propinó al menor al menos 20 puñaladas.
Vecinos del área reportaron que escucharon los gritos desgarradores de Josué, quien al parecer trató de defenderse del agresor.
Un residente del área (quien pidió no ser identificado) lo habría perseguido tras verlo empujar al menor al suelo. No logró detenerlo, pero sí pudo identificarlo más tarde, cuando fue a declarar ante las autoridades.
‘Lo asaltaron… (el sospechoso) le estaba quitando algo de la mano, (los testigos) no saben qué tenía en las manos, pero no se lo quiso dejar quitar…’, dijo Guadalupe Flores, her- mana mayor del niño.
‘Sabemos que se defendió, que él peleó, no se fue (de este mundo) tan fácil’.
Guadalupe afirmó que nunca habían visto al sospechoso antes, pero espera que pague por lo que hizo, por haberles quitado a su hermanito.
‘(El sospechoso) nos hizo un gran daño, nos quitó algo… de la manera que fue, es algo horrible… sólo pensar que mi hermano estaba allí solito… pero gracias a Dios las señoras que viven allí salieron… ellas estuvieron con él, estuvieron deteniendo su mano’.
La madre de Josué, quien tiene otros 6 hijos, está muy afligida y molesta. ‘(Ese hombre) le cortó la vida a un niño que tenía muchos sueños, que quería ser futbolista, quería ser doctor… a quien le encantaban las galletas… siempre, siempre estaba con una sonrisa’, recuerda María.
Por eso, ahora que sabe que las autoridades lograron detener al agresor y le han imputado cargos, espera que lo castiguen con severidad.
‘Me gustaría (que le impusieran) la pena máxima, y la pena máxima aquí es la muerte… porque se ensañó con él muy feo, uno se siente enojado, furioso…’, afirmó María Flores.