Cobran drogas legales más vidas que las prohibidas
En esta ciudad mueren más personas por drogas legales que por las ilícitas. De acuerdo con los registros de las autopsias del Médico Forense del Condado de El Paso, suman más fallecimientos por sobredosis de opioides legales y etanol (bebidas alcohólicas) que por metanfetaminas y cocaína.
Los fallecidos son desde menores y adultos jóvenes hasta de la tercera edad.
Hasta mayo de este año 32 personas habían muerto por sobredosis de opioides, donde se incluyen los fármacos controlados y la heroína. Los fallecidos fueron personas con edades de 22 a 81 años, según los reportes.
Por sobredosis de etanol han muerto cuatro personas en el 2016 de entre 40 y 67 años de edad.
En el mismo lapso, una persona de 52 años murió por exceso de metanfetaminas, dos por anfetaminas –de 25 y 43 años de edad–, mientras que seis, de entre 24 y 65 años, fallecieron por sobredosis de cocaína.
Durante el 2015, se registraron tres muertes por sobredosis de metanfetaminas –las edades de estas personas oscilaban entre 49 y 55 años–, así como 22 por cocaína, en estos casos las edades iban de los 26 a los 59 años, según los informes de las autopsias.
En el mismo período fueron 55 los fallecimientos por exceso de opiáceos, entre ellos medicamentos controlados que contienen metadona o hidrocona, así como heroína ilegal. Las personas tenían entre 22 y 74 años de edad.
Alcohol y opioides recetados son más letales que cocaína y metanfetaminas: forense
En su corta historia, la metadona ha transitado de fármaco indeseable a fármaco providencial gracias a las políticas gubernamentales y el apoyo de los terapeutas y compañías farmacéuticas que la producen, según los informes del medicamento. La hidrocona es un derivado de la codeína.
De acuerdo con los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC), en Estados Unidos mueren más personas a causa de las drogas prescritas por la ley que de heroína y cocaína juntas.
Un estudio realizado por la revista Journal of Public Policy reveló que los adolescentes siguen siendo particularmente vulnerables a la seducción de los medicamentos de venta con receta porque perciben los farmacéuticos como “bendecidos por una entidad de confianza”: la Administración de Drogas y Alimentos (FDA).
Las bebidas embriagantes, tales como el whisky, vodka, tequila, cerveza o brandy, contienen el elemento tóxico etanol. Pese a que el tóxico es legal en el mercado, un consumo desmedido puede ocasionar la muerte.
En el Condado de El Paso, 39 personas, uno de 15 años de edad, murieron por sobredosis de etanol entre 2014 y lo que va del año en curso, según los registros oficiales.
Durante el 2014, fallecieron 22 personas por etanol, con edades de entre 22 y 62 años; en el 2015 murieron 13, de 15 a 70 años.
Por sobredosis de metanfetaminas, fallecieron cuatro consumidores de 33 a 44 años de edad; por cocaína murieron 20, de entre 24 y 68 años, mientras que por opioides fueron 43 los decesos, con edades de los 18 a los 83 años.
Guillermo Valenzuela, portavoz del Centro de Tratamiento a las Adicciones de Drogas Aliviane, dijo que durante los años recientes, los pacientes que tratan en El Paso por abusos de heroína consumían analgésicos para el dolor.
“La dependencia viene cuando ya no lo necesitas por el dolor y entonces empiezas a abusar del medicamento. Entonces se convierte en una adicción”, afirmó.
Una gran cantidad de usuarios de analgésicos, cuando terminan su tratamiento médico, buscan evitar el síndrome de abstinencia con el consumo de heroína.
“No tardan muchos días en buscar la heroína”, dijo. “Los analgésicos son los que presentan el mayor problema en nuestra comunidad. A nivel nacional es lo que está causando la sobredosis con la heroína. Recientemente vieron el caso de Prince”.
La sobredosis de heroína se presenta cuando el opioide interrumpe el ritmo cardiaco del consumidor, explicó el especialista.
Drogas legales: etanol
El consumo excesivo de sustancias tóxicas es ajeno a la legislación estadounidense. El etanol, conocido como alcohol etílico, es adquirido de manera legal en cualquier almacén que lo oferte.
Valenzuela aseguró que hay mayor riesgo de morir por una congestión alcohólica que por una sobredosis de cocaína.
“El 52 por ciento de nuestros pacientes en el centro están por el abuso del alcohol”, afirmó. “El alcohol es de las que más estragos causa en la comunidad, porque es muy adictiva y es legal”.
En años anteriores, los pacientes que buscaban atención en el centro Aliviane eran mayores a los 30 años de edad, pero en años recientes, la población es más joven y ha transitado de los fármacos controlados a la heroína.
“Después del alcohol, las mujeres reportan que su segunda droga es la cocaína. Los hombres dicen que la mariguana”, mencionó.
Aliviane atiende a los adictos a la heroína con metadona controlada, dijo.
El consumo excesivo de mariguana no lleva a la muerte por sobredosis, añadió.
“Gonzalo”, coordinador y miembro del Grupo Amigo de Alcohólicos Anónimos de El Paso y quien lleva más de 30 años sin consumir etanol, aseguró que el alcoholismo es una enfermedad que puede causar la muerte en sobredosis.
“Es una enfermedad que de acuerdo a nuestros libros es trifásica: física, mental y espiritual”, dijo.
En esta comunidad se han presentado muchos fallecimientos relacionados al consumo excesivo de bebidas alcohólicas.
“Hay casos de suicidios durante las depresiones. Estando bajo estado etílico, el individuo no es consciente de sus acciones”, explicó. “Como el alcohol entra al torrente sanguíneo, no llega el oxígeno al lóbulo frontal y la persona actúa por inercia”.
Dijo que el alcoholismo es una enfermedad de tipo mental y que los afectados desconocen los motivos por los cuales beben en exceso.
Muchos enfermos mentales se encuentran en la fase de negación porque se mantienen productivos en el mercado laboral y en ocasiones son reconocidos por su estatus social, afirmó “Gonzalo”.
Cada año es más recurrente que las personas que se acercan al grupo Doble A no sólo beban de manera desmedida sino que también usen drogas ilegales, tales como la cocaína, dijo.
“En los últimos años se ha incrementado mucho. Ahora es más común que tengan una doble adicción, como cocaína, heroína, piedra”, mencionó. “Muchos empezaron tomando alcohol, una cosa los llevó a otra”.
Patti Fernández, directora de programas locales de NAMI (Alianza Nacional de Enfermedades Mentales), ha dicho que una gran cantidad de enfermos mentales en El Paso tiene una pobre calidad de vida, abrumada por la desesperanza.
En muchos casos, explicó, los afectados consumen algún tipo de sustancia tóxica, legal o ilegal.
“Si no sabes qué es lo que está pasando pues a lo mejor empiezas a tomar, a usar algún tipo de droga legal o ilegal para tratar de sentirte mejor, sin saber que eso trae secuelas mucho más severas”, dijo.