Quedan ‘cortos’ Texas y NM en bienestar infantil
De acuerdo con el más reciente reporte anual de la Fundación Annie E. Casey –KIDS COUNT Data Book 2016–, Texas y Nuevo México son dos de los estados con menores niveles de bienestar para los niños en todo Estados Unidos.
La organización ha observado el bienestar infantil durante la recuperación económica del país y después del fin de la recesión de junio de 2009. Este año se ha enfocado en las tendencias de los últimos seis años (aproximadamente 2008-2014), en donde examina la influencia de la educación de los padres y madres, de la salud y de otras circunstancias de la vida en el bienestar de sus hijos.
Según el informe, Texas se encuentra en el fondo a nivel nacional en lo que respecta a Familia y Comunidad para los menores.
En nivel de bienestar para los niños, Texas cayó dos puestos en el ranking nacional, del número 41 al 43.
“Alrededor de 784 mil niños de Texas, el 11 por ciento de la población joven, carece de seguro de salud. Esa cifra sigue siendo baja a pesar del número de niños sin seguro que ha bajado a 400 mil personas desde 2008. Mientras tanto, más de 1.7 millones de niños en todo el estado —uno de cada cuatro— viven en la pobreza”, indicó el reporte.
Están entre los peores del país, por falta de seguros médicos y alto nivel de pobreza
Malos hábitos
Ejemplos de este descuido de los estados de Texas y NM sobran. Entre ellos están los niños de Jamie González, quienes eran aficionados a los videojuegos, su actividad física era casi nula y entre sus platillos favoritos se encontraban la pizza, las hamburguesas y en general, la comida rápida.
Con el tiempo, estos hábitos comenzaron a cobrar factura en el hogar.
“Antes sí salíamos muy seguido, que a la pizza o McDonald’s, pero eso ya ha cambiado mucho”, dijo. “A veces andábamos todo el día fuera y no nos alcanzaba para llegar a hacer algo, y queríamos llegar a comprar algo rápido”.
Preocupados por el bienestar de sus hijos, ahora de 11 y cinco años de edad, respectivamente, los padres acudieron a las reuniones de Familias Triunfadoras, organización del Condado de El Paso encargada de asesorar a familias de la región.
A partir del año pasado, la dieta de los menores es más rica en nutrientes, sus actividades físicas han aumentado y la interacción familiar es de mayor calidad.
“Ahora ya nos sentamos todos para comer a la misma hora. Antes no, antes llegaban de la escuela y se encerraban a sus juegos y a la computadora”, mencionó González, residente de San Elizario.
El niño de 11 años ahora juega futbol americano en un equipo para menores y la hija de cinco pertenece al grupo de porristas.
En El Paso son muchas las familias cuyos hijos viven en condiciones parecidas por diferentes circunstancias. Hay casos, incluso, donde existen problemas con el consumo de drogas y alcohol en los menores.
“Estamos viendo mucho problema de obesidad en los niños y claro de enfermedades, porque estamos enfrentando niños con diabetes tipo uno, a causa de la mala nutrición. No comen saludable y aparte la falta de ejercicio”, dijo María Covernali, directora ejecutiva de Familias Triunfadoras.
El grupo ha encontrado que una gran cantidad de niños canalizan su energía en sus teléfonos celulares, tabletas o consolas para videojuegos, al tiempo que su educación física y alimenticia es deficiente, mencionó.
“Es difícil involucrarlos a actividades físicas y que las compartan con sus padres”, afirmó. “Ya no hay comunicación, ni colaboración con los padres. Los padres no motivan a los niños a que se involucren en actividades o con ellos”.
Los padres de familia deben romper rutinas y encontrar tiempo de calidad con los hijos, aseguró.
“Vemos que muchas veces, estos niños se deprimen tanto, yo creo de la misma situación en la que viven”, agregó. “Hemos descubierto tantas cosas que afectan a los niños tanto sicológicamente, como en la salud”.
Familias Triunfadoras ha trabajado con menores de edad que consumen alcohol y drogas en las diversas colonias de El Paso.
“Es sorprendente ver cómo se están drogando estos niños. Dentro de la violencia en el hogar, existe el alcohol, las drogas. Los hijos las buscan”, dijo. “Estamos hablando de niños desde 12 años”.