Francotirador era veterano que ‘quería matar blancos’
Nueva York— El fuertemente armado francotirador que acribilló a oficiales de la Policía en el Centro de Dallas, dejando a cinco de ellos muertos, específicamente tenía la intención de matar a cuantos oficiales anglosajones pudiera, según informaron las autoridades el viernes. Era un veterano del Ejército que había hecho su servicio en Afganistán, y tenía un arsenal en su casa que incluía material para hacer bombas.
El gatillero convirtió una demostración y marcha pacífica, en contra de los tiroteos fatales de la Policía ocurridos esta semana en Minnesota y Louisiana, en los que murieron hombres afroamericanos, en una escena de caos y derramamiento de sangre dirigida a los elementos policiacos.
El tiroteo fue un acto violento en represalia, uno que la gente había estado temiendo que sucediera tras dos años de protestas y manifestaciones por todo el país en contra de las muertes perpetradas por la Policía, provocando que se suscitara otro nuevo dilema en los debates en torno a la raza y la justicia penal, los cuales ya han dividido profundamente a la nación.
Las demostraciones continuaron el viernes en ciudades de todo el país, con una de las más grandes teniendo lugar en las calles de Atlanta, donde miles de personas se manifestaron en contra del abuso de la Policía, deteniendo por completo el tránsito vehicular.
Jeh Johnson, secretario de Seguridad Nacional, dijo en Nueva York que aparentemente se trataba de un solo francotirador, aunque hubo una gran cantidad de disparos y tantas víctimas que los oficiales al principio especulaban sobre la posibilidad de que fueran varios.
Los oficiales dijeron que no encontraron evidencia de que el atacante, Micah Johnson, de 25 años, tuviera vínculos directos con ninguna de las protestas o grupo político, ya fuera pacífico o violento, pero su página de Faceboock mostraba que apoyaba al Nuevo Partido de las Panteras Negras, un grupo que aboga a favor de la violencia en contra de anglosajones, y judíos en particular.
• La Policía utilizó robot para eliminar al agresor • Murieron cinco agentes y siete más están heridos; hay tres detenidos
Al realizar un cateo de la vivienda del asesino el viernes, “los detectives encontraron material para hacer bombas, chalecos antibalas, rifles, balas, y un diario personal de tácticas de combate”. Según informó el Departamento de la Policía de Dallas en un comunicado.
Otras tres personas fueron arrestadas en conexión con el tiroteo, pero la Policía no reveló sus nombres ni dijo por qué habían sido detenidas.
Adicionalmente a los cinco oficiales que resultaron muertos, siete oficiales y dos civiles resultaron heridos. El Departamento de la Policía dijo que 12 oficiales habían respondido a los disparos durante una serie de batallas a tiros que se extendieron por varias cuadras.
Luego que el tiroteo bajara de intensidad, Johnson, quien portaba un rifle de asalto y una pistola, se enfrascó en un atrincheramiento con la Policía que duró horas en un edificio de estacionamientos, aseverando —aparentemente de manera falsa— que tenía explosivos en el área, y amenazando que mataría a más oficiales. Al final, la Policía lo mató el viernes por la mañana con un explosivo dirigido por un robot a control remoto, según dijo el jefe de la Policía de Dallas, David O. Brown.
Durante el atrincheramiento, Johnson, quien era afroamericano, dijo a los negociadores de la Policía que “estaba molesto por el movimiento Black Lives Matter”, dijo Brown. “Él dijo que estaba molesto por los recientes tiroteos. El sospechoso dijo que estaba molesto con las personas anglosajonas. Estipuló que quería matar a personas anglosajonas, especialmente a oficiales anglosajones”.
Brown se negó a desestimar la posibilidad de que hubiera más personas involucradas, diciendo que “No estamos satisfechos con la idea de que hayamos agotado todas las líneas de investigación”.
Johnson, quien vivía en el área de Dallas, sirvió como cabo en la reserva del Ejército de marzo del 2009 a abril del 2005, de acuerdo con archivos dados a conocer por el Pentágono. Estaba enlistado como especialista en carpintería y mampostería, y sirvió en Afganistán de noviembre del 2013 a julio del 2014.
La secuencia de eventos de esta semana provocó enojo y desesperación, y se lanzaron críticas tanto a la Policía como a los críticos pacíficos de la misma, quienes han tenido que impugnar las aseveraciones que según indican que la indignación por los tiroteos perpetrados por la Policía fomenta la violencia y pone las vidas de los mismos oficiales en peligro.
“Todo lo que sé es que esto debe parar, esta división entre nuestra Policía y nuestros ciudadanos”, dijo Brown.
Horas después el Presidente Obama, reaccionando a las grabaciones en video de los tiroteos en Baton Rouge y Falcon Height, Minnesota, habló expresando su angustia sobre el discrepante tratamiento que el sistema de justicia penal le da a las distintas razas, se sintió obligado a volver a hablar, esta vez sobre las personas que atacaron a los oficiales.
Sin duda alguna, aprenderemos más sobre sus torcidas motivaciones, pero seamos claros: No hay posibles justificaciones a estos ataques ni a cualquier tipo de violencia dirigida a la Policía”, según dijo el viernes por la mañana en Warsaw, donde había asistido a una reunión de la cumbre de la OTAN, tras hablar por teléfono con el alcalde Mike Rawlings de Dallas.
La Casa Blanca dijo que Obama viajará a Dallas a principios de la semana entrante, atendiendo a la invitación que le hizo el alcalde de la ciudad. Posteriormente el Presidente dirigirá una discusión entre la Policía y los líderes comunitarios para ayudar a encontrar soluciones a las disparidades raciales y mejores manera de apoyar a la Policía, según informaron sus auxiliares.