LOGRAN ACUERDO DE $1.9 MILLONES en demanda por caso de Sandra Bland
C— La madre de Sandra Bland, la mujer afroamericana que murió el verano pasado en un penal texano tras marcársele el alto de manera polémica, llegó a un acuerdo extrajudicial por 1.9 millones de dólares en su demanda por muerte por negligencia, informó ayer su abogado.
Funcionarios locales texanos insistieron en que el convenio aún no se finiquitaba, pero el abogado de la madre señaló que el trato era “absoluto” y que en unos cuantos días se retiraría la demanda interpuesta por la familia.
Bland, originaria de la región de Chicago, falleció en su celda días después de que un policía estatal blanco de Texas le marcó el alto por un delito menor de tránsito.
Se determinó que el deceso fue suicidio, mientras que la familia de Bland demandó posteriormente al condado Waller y al Departamento de Seguridad Pública de Texas.
En el acuerdo por 1.9 millones se incluye el requisito de que la cárcel cuente las 24 horas con enfermera o técnico médico de emergencias, aseguró en entrevista en su despacho el abogado familiar con domicilio en Chicago, Cannon Lambert.
El penal debe instalar asimismo sensores electrónicos con el propósito de garantizar que los custodios estén revisando a los detenidos, mientras que los acusados accedieron a cooperar en la presión para que se promulgue una ley estatal con el nombre de Bland según la cual se exija entrenamiento para asegurar que el personal cuide en forma adecuada a los internos, dijo Lambert.
La madre de Bland, Geneva Reed-Veal, señaló que dichos requisitos adicionales al convenio financiero son lo que realmente le importa. Y prometió asegurarse de su implementación.
“El día de hoy es una victoria para todas las madres del país”, dijo. “Nunca se trató nada más de Sandy. Era por todas las madres que han perdido injustamente a sus hijos por la brutalidad policiaca, por la violencia sin sentido con armas”.
Ayer el apoderado legal del condado Weller Larry Simmons confirmó haberse llegado a un convenio potencial pero señaló no ser definitivo.
Dijo también que las partes acordaron por escrito mantener confidencial el trato hasta que se hubiera completado y que el condado tenía intenciones de “cumplir esta promesa”.
Simmons informó que los abogados de ambos bandos “aún estaban trabajando en unos cuantos pormenores” y que los comisionados del condado deben aprobar cualquier acuerdo.
El condado niega “enérgicamente” cualquier falta o delito en la muerte de Bland, dijo, “y en el convenio no se admite nada en ese sentido”.
El acuerdo costaría al condado “un modesto deducible de mil dólares” de acuerdo con el seguro de responsabilidad civil, agregó.
El Departamento de Seguridad Pública de Texas, otro de los acusados, emitió un comunicado señalando que “no ha llegado a ningún acuerdo en torno a litigios sobre Sandra Bland y no forma parte de convenio alguno entre los demandantes y los acusados del condado Waller”.
Jeff Rensberger, profesor de la Facultad de Derecho de Houston, consideró que el acuerdo demostraba que tanto el condado como la aseguradora deseaban “dejar esto detrás”.
“Para ellos el costo del convenio representa un buen riesgo a comparación del riesgo de lo que un jurado podría hacer en este caso”, dijo.
A pesar de lo poco comunes, el resto de las estipulaciones incluidas en el convenio “no son raras ni sin precedentes”, sobre todo en alguna demanda de muerte por negligencia contra alguna instancia gubernamental, explicó Rensberger.
“Parte de la motivación para presentar demandas de muerte por negligencia en casos como éstos es para propósitos de reformas así como compensatorios”, abundó. “Así que esto tiene ese propósito de reformas”.
No quedó claro cuánto costaría la implementación de tales requisitos extras, pero Lambert dijo que definitivamente las reformas también beneficiarán a las autoridades locales.
Un policía estatal ordenó a Bland, de 28 años, detener la marcha en Prairie View, al norponiente de Houston, por cambiar de carril sin poner direccional.
La revisión condujo a una confrontación y el agente, Brian Encinia, le ordenó bajar del automóvil antes de obligarla a tirarse al suelo.
Fue detenida bajo cargos de agredir a un servidor público pero no pudo entregar de inmediato los 500 dólares de la fianza, según agentes investigadores.
En el video de la marcación de alto del 10 de julio del 2015 se aprecia a Encinia sacando su pistola eléctrica y diciendo a Bland, “¡te voy a encender!”.
Más tarde puede oírse la voz de ella gritando fuera de cámara que el policía iba a fracturarle las muñecas y quejándose de que le golpeó la cabeza contra el suelo.
El video desató indignación a nivel nacional y llamó la atención del movimiento Las Vidas Afroamericanas Importan.
Posteriormente Encinia fue despedido y acusado de un cargo menor de falso testimonio a raíz del arresto. Se declaró inocente.
En testimonio, Encinia dijo que sacó a Bland “de su vehículo a fin de seguir realizando una investigación más segura de tráfico”, pero los fiscales dijeron que los miembros de un jurado especial del condado Waller determinaron que dicha aseveración era falsa.