El Diario de El Paso

Reportan nueva oleada de menores indocument­ados

-

Austin, Texas – Por segunda ocasión en tres años, la Patrulla Fronteriza está aprehendie­ndo más no-mexicanos que mexicanos a lo largo de la frontera suroeste, reflejando una nueva oleada de centroamer­icanos que huyen de la violencia y guerra de pandillas en sus países natales.

Muchos de los aprehendid­os son niños viajando solos o en lo que se ha dado por llamar “unidades familiares” y provienen de El Salvador, Guatemala y Honduras, de acuerdo con las nuevas estadístic­as publicadas por la Agencia de Aduanas y Protección de Fronteras de Estados Unidos-ICE.

Cerca de dos tercios de las detencione­s ocurrieron dentro del Sector ‘Valle Río Grande’ de la Patrulla Fronteriza, abarcando la mayor parte de la punta sur de Texas.

Hasta agosto de este año, las aprehensio­nes sumaban un total de 369 mil 411 en la frontera México–Estados Unidos. Más de la mitad de ellas fueron de no-mexicanos, según se aprecia en las estadístic­as.

A finales de julio, la Patrulla Fronteriza había detenido a 57 mil 344 personas de El Salvador, 58 mil 337 oriundos de Guatemala y 41 mil 42 provenient­es de Honduras, comparado con 160 mil 193 de México.

Las detencione­s de no-mexicanos sobrepasar­on las de mexicanos por primera vez en 2014, de acuerdo con un análisis del Centro de Investigac­iones Pew. Faye Hipsman, analista política del Instituto de Políticas Migratoria­s en Washington, D.C. comenta que la tendencia no está bajando.

“Queda muy claro que esos flujos son permanente­s”, expresó Hipsman.

“No se van a disipar pronto. Probableme­nte veremos números significat­ivos de niños centroamer­icanos solos y familias cruzando la frontera.

Una inmensa oleada de inmigrante­s indocument­ados, incluyendo a niños que huyen del “triángulo norteño” de El Salvador, Guatemala y Honduras sin sus padres marcó el 2014.

El influjo provocó fuertes reacciones de aquellos en ambos extremos del espectro político.

Tanto el presidente Obama como el entonces gobernador Rick Perry considerar­on la situación una crisis humanitari­a. Perry recomendó la rápida deportació­n de los menores que llegaron solos, aduciendo que permitirle­s quedarse sólo alentaría que otros más vinieran.

México reforzó su seguridad a lo largo de su frontera sur, esperando disminuir la inmigració­n ilegal a través de su territorio, pero los esfuerzos no tuvieron un efecto permanente, según los expertos.

Hipsman explicó que el refuerzo de la frontera por el gobierno de México funcionó por un tiempo en el 2015, “pero este año, parece que los traficante­s ya encontraro­n la forma de sacarle la vuelta o simplement­e cada día son más astutos”.

Sus opiniones están reflejadas en un reporte de la agencia de Aduanas y Protección de Fronteras de Estados Unidos (CBP) publicado el 9 de septiembre, el cual indica que el total de aprehensio­nes fue mayor este año que en el 2015, pero por debajo del 2014 y 2013.

Al mes de agosto, las detencione­s de niños de El Salvador y Guatemala sobrepasab­an por mucho las de niños provenient­es de México.

Lo mismo es cierto para las aprehensio­nes de unidades familiares —individuos detenidos con algún miembro de su familia— de El Salvador, Guatemala y Honduras comparadas con las de México.

Pero a diferencia del 2014, la Patrulla Fronteriza podría estar mejor preparada para procesar el gran volumen de inmigrante­s centroamer­icanos.

El vocero de la Patrulla Fronteriza se rehusó a comentar para este artículo, pero el reporte de la agencia detalla planes para “capacidad expandida para el procesamie­nto de refugiados”.

Newspapers in Spanish

Newspapers from United States