Más de 1 millón de latinos en Texas, sin representación de funcionarios hispanos
Austin, Texas – Más de 1.3 millones de latinos en Texas viven en ciudades o condados sin ningún funcionario electo de ascendencia hispana, reveló una investigación de The Austin-American Statesman.
En Texas, la representación latina no ha crecido sustancialmente durante las últimas dos décadas, lo cual no solo margina la voz de esta comunidad en todos los niveles de gobierno, sino que tampoco prepara a incipientes políticos hispanos para ocupar puestos importantes a nivel estatal.
La investigación del American-Statesman, la primera de su tipo, encontró una escasez generalizada de representación de la población hispana, que es la de mayor crecimiento en el estado, en concejos municipales y cortes de comisionados a lo largo de Texas.
Esta disparidad se agudiza especialmente a los más altos niveles de los gobiernos locales. En un estado donde los hispanos representan el 38 por ciento de la población, menos del 10 por ciento de los jueces de condado y alcaldes de Texas son hispanos.
En los concejos de los gobiernos municipales, la representación latina también se ha estancado ampliamente durante las últimas dos décadas. En 1994, los latinos ocupaban el 10 por ciento de los puestos en las cortes de comisionados; hoy, ese porcentaje apenas ha llegado al 13 por ciento, aun cuando el número de residentes hispanos a lo largo del estado casi se ha duplicado durante ese mismo periodo de tiempo, de 4.9 millones a 9.4 millones.
En algunas partes de Texas, la representación se ha avanzado muy poco desde que el movimiento por el derecho al voto de la década de 1970 impulsara cientos de demandas destinadas a abrir espacios para una mayor participación hispana.
Lydia Camarillo, la vice presidente del Southwest Voter Registration Education Project en San Antonio, una organización sin fines de lucro, dijo que mientras que algunas áreas del estado, notablemente el sur de Texas, han visto dramáticos aumentos en el número de latinos que votan en las elecciones locales, los hallazgos del Statesman demuestran que aún existe una “disparidad descarada” en Texas.
Expertos en elecciones del estado y autoridades hispanas de algunas de las regiones con mayor falta de representación de Texas dicen que el nivel de disparidad no puede ser explicado fácilmente.
Ellos apuntan hacia las leyes del estado que han hecho más difícil registrarse para votar, los esfuerzos de redistribución de distritos locales para diluir la influencia hispana y un virtual abandono a nivel estatal por parte de los partidos políticos. Incluso, en distritos con mayorías significativas, son pocos los hispanos que salen a votar.
Localmente, los residentes y activistas dicen que la falta de representación puede llevar a que no se satisfagan las necesidades de sus comunidades. Pero el impacto puede sentirse incluso más allá de los ayuntamientos y cortes debido a que los cargos locales son utilizados usualmente como un campo de entrenamiento para candidatos que posteriormente llegan a ocupar cargos estatales y nacionales.
Los activistas temen que las perspectivas de los candidatos hispanos podrían deteriorarse.
A pesar de eso, el análisis del Statesman también encontró patrones similares por todo el estado. En el condado de Medina, justo a las afueras de San Antonio, en donde el 50 por ciento de la población es latina, no hay ningún representante en la Corte de Comisionados; en Odessa, donde el porcentaje de hispanos llega al 53 por ciento, apenas se tiene a un concejal latino, la mayor tasa de falta de representación para un municipio de más de 100 mil habitantes.
En el centro de Texas, específicamente en condados como Guadalupe y González, donde los hispanos representan a más de un tercio de las personas aptas para votar, no se cuenta con ningún comisionado latino.
Muchos de los lugares con falta de representación latina tienen mucho en común: antecedentes de violaciones a los derechos de los votantes y órdenes del Departamento de Justicia relacionadas con materiales electorales en idioma español o secretarios electorales; bajos números en cuanto a total de hispanos nombrados a directivas locales o comisiones, el “campo de entrenamiento” para llegar a un cargo de elección popular; y bajos niveles de participación electoral notables.
Las áreas donde se registra una mayor falta de representación también tienden a ser más republicanas, algo que los expertos dicen que también limita la participación de los latinos, quienes tienden a votar por los demócratas.