Buscan vecinos de San Elizario opciones para frenar oleoducto
Asisten a charla informativa sobre proyecto Comanche Trail
San Elizario— Medio centenar de residentes de San Elizario asistieron a una charla informativa sobre las obras de instalación de un oleoducto que corre por dicha franja fronteriza, y que es parte del proyecto Comanche Trail.
Las autoridades del Condado de El Paso dicen haber agotado las instancias administrativas que tienen para detener la construcción, los habitantes de la ciudad pidieron al municipio realizar algún tipo de maniobra para, por lo menos, dilatar el asunto mientras se buscan remedios legales.
En palabras del comisionado Vince Pérez, del precinto 3, las compañías hacen uso de los vacíos legales para tomar ventajas a su favor. ‘El proyecto está siendo construido por espacios donde ni la Ciudad de San Eli ni el Condado de El Paso tienen autoridad administrativa (es decir que no puede poner en acción leyes) que impidan construcciones como la de este gasoducto’, dijo.
Además, explicó que el Condado representa al gobierno al que se busca apelar para que pare el avance de la construcción. Dio a entender que pelear contra él, sería como estar peleando contra ellos mismos.
Pero los vecinos afectados dicen que se tiene que hacer algo debido a la falta de voluntad política local. Por ejemplo, Jesús Ochoa, un residente de la localidad, de 82 años de edad, veterano nativo americano, dijo que hay que usar cualquier posibilidad para demandar al gobierno y llevarlo ante la Corte federal para que detenga esta expropiación de la que están siendo objeto.
Por ejemplo, dijo, ‘si se puede probar que en esos terrenos existe algún valor histórico que ponga en peligro algún artefacto nativo americano, eso podría ser una oportunidad para ponerle un alto al proyecto’.
La construcción del Comanche Trail ganó notoriedad mundial cuando diferentes tribus americanas se opusieron a las obras llevadas a cabo en Standing Rock, North Dakota, donde los contratistas tratan de concluir el tendido de tuberías ante el descontento de los manifestantes pacíficos que se han congregado en el lugar.
Pero, otros sugirieron que se buscara, a nivel local, si se podría implementar algún tipo de ordenanza con la cual se pudiera ganar tiempo para contrarrestar el avance de la construcción. Hubo quien mencionó poner en marcha algún tipo de orden en contra de la contaminación sonora que se genera por la instalación del gasoducto.
Uno de los estudios que están exigiendo los representantes comunitarios es el de un análisis de situaciones de emergencia, así como respuestas a preguntas como cuáles serían los daños posibles a las comunidades, el rango de alcance, y la posible cantidad de afectados.
El gasoducto Comanche Trail es propiedad de un consorcio integrado por la tres compañías energéticas, entre ellas Carso Energy, propiedad del magnate mexicano Carlos Slim.