¡FUERA DUDAS!
Que un adulto ya no necesita beber mucha leche, que consumir productos lácteos ayuda en la reducción de peso, que el plátano no es recomendable para diabéticos, que el azúcar morena es mejor que la refinada o que hay que eliminar de la dieta la margarina y la mantequilla son mitos que existen en torno a estos alimentos.
Ana Laura Pulido, jefa de Nutrición de Médica Sur, proporciona información veraz sobre estos alimentos.
PRODUCTOS LIGHT
Por sí solos no ayudan a perder peso, esto no es posible, si la dieta no es baja en energía y equilibrada. Para perder peso se requiere gastar la energía de lo que se consume e incluso más, para hacer uso de la reserva de grasa acumulada. Es por ello que una dieta de reducción se debe acompañar de actividad física. Hay productos, como la leche light, que resulta saludable, porque tiene menos grasa de origen animal, que es la saturada. Pero hay otros con lo que hay que tener cuidado, como los helados, que pueden tener sólo 20 kilocalorías menos que la presentación normal.
AZÚCAR MORENA
El consumo de azúcar de cualquier tipo no se recomienda más allá de un 10 por ciento del total de las kilocalorías del día.
LÁCTEOS
Expertos han demostrado que el consumo de lácteos sin grasa y sin azúcar, como la leche o el yogur descremado, sirven para mantener la salud ósea, un peso saludable y un buen estado de nutrición, gracias a la cantidad de proteínas de alto valor biológico y calcio que contienen.
PLÁTANO
Es una fruta con beneficios como la fibra y que aporta una cantidad importante de potasio. No debe prohibirse a menos que la persona tenga una enfermedad que no permita el buen manejo del potasio. Las frutas entre más verdes, menor cantidad de azúcar contienen, por lo que podría recomendarse comer lo menos maduro posible.
MANTEQUILLA Y MARGARINA
La mantequilla es de origen animal, es grasa saturada. El origen de la margarina es vegetal, de aceites. Ambas son grasas que por salud en general no deberían de consumirse en exceso. La ventaja con las margarinas es que contienen grasas esenciales para el organismo, a diferencia de las mantequillas que al ser grasa animal, conlleva mayores riesgos a la salud. La recomendación es que en las kilocalorías totales de la dieta sólo el 30 por ciento máximo sean grasas.