Endurecen inspecciones de vehículos ‘salvage’
Tendrán que someterse a inspección por parte del Condado
Dos carros robados de los denominados ‘salvage’ fueron detectados por inspectores de la Oficina de Recolección de Impuestos del Condado luego de que se diera la instrucción de revisar todos los vehículos que ofrecen en venta los comerciantes dedicados a este giro.
“Es una nueva directriz para evitar que haya fraudes en contra de los consumidores que los adquieren de buena fe”, dijo Rubén González, titular de la dependencia.
Explicó que en base a denuncias y quejas de loteros establecidos y consumidores hace un par de semanas inició una nueva ordenanza dirigida a comerciantes que ofrecen automóviles reconstruidos.
Un auto ‘salvage’ es aquel que fue declarado como ‘pérdida total’ por las empresas aseguradoras. Sin embargo, estos vehículos son adquiridos por comerciantes que los reparan aunque en el título queda constancia de su historial.
“Me causó sorpresa al saber de la nueva ley pero me parece muy buena la medida adoptada”, afirmó Ricardo Gardea, presidente de la Asociación de Loteros de El Paso.
La operación consiste en que los comerciantes acudan al taller de verificación del Condado para que se verifique el número público y confidencial del automóvil para corroborar que no haya sido robado o tenga partes robadas.
La medida provocó el enojo de los comerciantes dedicados al ramo, que convocaron a los integrantes a una reunión con el titular de la oficina de Recolección de Impuestos.
“Estaban molestos por la medida pero se les explicó los pormenores de la nueva ley y el costo que implicaría la inspección y al final estuvieron de acuerdo”, dijo González.
El Diario de El Paso intentó contactar al lotero Johnny Suárez para que ofreciera un testimonio por parte de la organización de los ‘salvage’ pero no fue posible su localización.
El costo de la inspección es de 40 dólares y el automóvil debe ser remolcado a las instalaciones ante la prohibición de que circule en las calles.
“Está prohibido su tránsito por las calles así que tienen que remolcarlo y pasar para iniciar el trámite de registro para obtener sus placas y engomado previo a la verificación ecológica”, dijo González.
Manifestó que durante la fiscalización se revisa que el título no tenga leyendas endosadas como de uso para exportación o una anotación del yonke para desmantelamiento, en el mejor de los casos.
Pero si tiene una alerta en la Policía de que ese número tiene reporte de robo de partes o del vehículo, se retendrá y reportará a la Policía para que inicie la investigación.
“La gente compra un carro pero no sabe que tiene anotaciones y se da cuenta hasta que llega a la oficina y le dicen que tiene que ir por una orden de fianza o de un juez”, dijo González.
Señaló que es triste ver a estas personas que batallan y al final pagan más dinero o no pueden registrarlo al ser timadas por gente sin escrúpulos en su afán por vender un automóvil.
De acuerdo a registros de la dependencia, existen alrededor de 300 personas dedicadas a la venta de automóviles identificados como ‘salvage’ pero muchas no tienen la licencia como comerciantes de venta de autos usados.
“Deben tener dos licencias, una de reconstrucción de vehículos ‘salvage’ y otra de venta de autos y hay mucha gente que no las tiene”.
Comentó que el objetivo es que se garantice a los compradores que la mercancía que están adquiriendo es de calidad y que no tendrán problemas a la hora de registrar su vehículo.
Trascendió que los loteros denominados ‘salvage’ pretenden conformar una asociación y estar debidamente registrados para evitar problemas con la autoridad.
Los automóviles que ellos venden son adquiridos en las llamadas subastas y se venden por el valor de las partes que se puedan utilizar, sin embargo hay quienes los reparan o reconstruyen pero el título no lo pueden cambiar.
Ante ello se recomienda verificar y no dejarse engañar porque aunque parezca una gran oferta por estar abajo de su precio podría ser objeto de un engaño. A menos de que el comerciante garantice que la reparación es efectiva y el título haya sido revisado y avalado por las autoridades para su venta.