Protestan en el Capitolio texano contra ley SB 4
Se oponen a medida que afecta a las ‘ciudades santuario’
Austin— Aproximadamente 50 manifestantes se reunieron este lunes en terrenos del Edificio Estatal de Seguros del Capitolio de Texas y bloquearon la entrada, para protestar por la Propuesta 4 del Senado, una medida que podría convertir en ilegales las jurisdicciones ‘santuario’ del Estado, la cual fue aprobada la semana pasada por la Cámara de Texas.
El Edificio de Seguros alberga varias oficinas administrativas del gobernador Gregg Abbott, incluyendo la de Recursos Humanos, Seguridad Interna y Divisiones de Justicia Penal.
Abbott urgió a los legisladores que aprobaran la propuesta de ley en esta sesión, la cual prohíbe las ‘ciudades santuario’ –lugares en donde oficiales locales no colaboran totalmente con las autoridades federales de inmigración.
La mañana empezó con una modesta reunión en la entrada sur del Capitolio.
Los manifestantes dejaron en claro su intento de mantener la lucha contra la propuesta de ley, aun cuando eso signifique una posible desobediencia civil.
Luego, los manifestantes dijeron a los reporteros que permanecieran alertas porque sucederían más cosas y empezaron la marcha hacia la parte este del terreno del Capitolio.
La propuesta podría hacer que los jefes de departamentos como sheriffs, alguaciles, jefes de la Policía y líderes locales cometan delitos leves de la Clase A si no colaboran con las autoridades federales y acaten las solicitudes de los agentes de inmigración para detener a internos que no son ciudadanos estadounidenses y son sujetos a la deportación.
También contempla sanciones civiles para entidades que violen esa provisión, las cuales empezarían desde 1 mil dólares por la primera ofensa e irían escalando hasta llegar a 25 mil 500 dólares por cada infracción subsiguiente.
Aunque los manifestantes insistieron en que se opusieron a esa propuesta de ley desde el inicio, el asunto tomó una nueva dimensión la semana pasada después que la Cámara de Texas enmendó una propuesta y agregó una medida más controvertida.
La enmienda permite que los oficiales de la Policía pregunten el estatus de inmigración de las personas durante una detención, contrario a estar limitados para ello durante un arresto legal.
Demócratas y grupos que están a favor de los derechos de los inmigrantes argumentan que la enmienda transforma la legislación en una especie de ‘muéstrame tus documentos’, ya que le permitiría a la Policía preguntar el estatus de inmigración de una persona durante la mayoría de sus tareas rutinarias, incluyendo la revisiones de tránsito.
‘Lo que esperamos es que las comunidades de Texas no vayan a quedarse inactivas y se limiten a aceptar eso’, comentó Bob Libal, director ejecutivo de Grassroots Leadership, grupos que están a favor de los derechos de los inmigrantes y son vigilantes privados de las prisiones, que tienen su sede en Austin.
Libal agregó que el objetivo final de los manifestantes es convencer a Abbott para que vete la propuesta, un resultado altamente improbable, ya que el gobernador declaró el tema como una ‘emergencia’ poco después que inició la actual sesión legislativa.
La oficina de Abbott no respondió a la solicitud que le hicieron para que comentara sobre el tema.
Poco después de haber arribado a la recepción del edificio, los manifestantes se sentaron frente a la entrada, impidiéndo el ingreso a los empleados por esa parte.
Luego, la mitad del grupo se movió a la entrada oeste y bloqueó esa puerta. Los asistentes dijeron a coro ‘la entrada está cerrada’, mientras los empleados trataban de ingresar al lugar.
Cuando le preguntaron si los manifestantes podrían ser arrestados, un oficial del DPS que estaba en el lugar de los hechos refirió todas las preguntas a la oficina de información pública de la agencia, en donde un portavoz dijo que la agencia ‘iba a seguir monitoreando la situación’.
La manifestante Norma Herrera, de 29 años, ex empleada del Consejo Legislativo de Presupuestos, comentó el lunes que cada día que trabajó para el Estado ‘siente que fue una mentira’.
Durante el transcurso del día, Herrera, una ex inmigrante indocumentada que actualmente tiene el estatus de residencia legal, comentó que está consciente de que eventualmente será arrestada.
‘Es una posibilidad, pero si ése es el caso, sé que lo que hago es mi obligación moral, debo resistirme a las leyes injustas’, dijo.