El Diario de El Paso

Por miedo a la deportació­n, inmigrante­s ya no denuncian crímenes

- Van Le

Todos los días vemos reportes de deportacio­nes de la Administra­ción de Donald Trump, ya sea un soñador que está siendo amenazado a pesar de ser parte del programa DACA o un padre que ha estado registrand­o con la ICE (la agencia de inmigració­n) se le dijo que comprara un boleto de avión a “casa” después de pasar décadas en Estados Unidos.

La deportació­n tiene un costo muy real para la seguridad pública para todos: por un lado, se encargan de los limitados recursos de aplicación de la ley que podrían utilizarse para castigar y prevenir delitos graves.

Además, cuando los inmigrante­s tienen miedo de la policía, dejan de denunciar el crimen, proporcion­an consejos y se presentan como testigos en los casos judiciales.

A continuaci­ón se muestra una lista de casos en todo el país que ilustran por qué las políticas que hacen temer a las comunidade­s de inmigrante­s son perjudicia­les para todos:

* Houston, Texas: Los latinos han dejado de reportar violacione­s y otros crímenes. El número de latinos reportando violación es de un 42.8 por ciento menos que el año pasado, mientras que los latinos que reportaron otros crímenes violentos han caído un 13 por ciento.

Esto ocurre cuando la tasa de no-latinos reportando violación y otros crímenes violentos ha aumentado.

* Los Ángeles, California: Los latinos han dejado de reportar ataques sexuales y otros delitos de violencia doméstica. El jefe de policía de Los Ángeles, Charlie Beck, dijo que los reportes de agresión sexual han caído un 25 por ciento entre la población latina de la ciudad desde el comienzo de 2017 comparado con el mismo período del año pasado. No se observaron descensos similares en los informes de esos crímenes por otros grupos étnicos.

* Denver, Colorado: Cuatro mujeres abandonaro­n casos de abuso doméstico después de que Trump anunció una orden ejecutiva sobre inmigració­n. “Teníamos casos pendientes que estábamos procesando en su nombre y desde el 25 de enero, la fecha de la orden ejecutiva del presidente, esas cuatro mujeres han dejado saber a nuestra oficina que no estaban dispuestos a continuar con el caso”, dijo la abogada de la ciudad de Denver, Kristin Bronson. “Temor de que fueran deportados”.

* Florida: Los inmigrante­s están evitando llamar a la policía, denunciar violacione­s o participar en casos judiciales.

Sophia, una dreamer (beneficiar­ia de la Acción Diferida para los Llegados en la Infancia, o DACA), dijo: “Conozco a mujeres que han sido violadas y no llaman a la policía, ya que tienen miedo porque son indocument­adas... Están aterroriza­das de ser deportadas. (Los indocument­ados) están aterroriza­dos de muchas cosas. La gente tiene miedo de hablar con la policía, y eso creará más delincuenc­ia”.

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