Farmacéuticos recetarán anticonceptivos en NM
Santa Fe– Nuevo México instituyó una nueva política el viernes permitiéndoles a los farmacéuticos recetar control natal directamente a las mujeres, parte de una ola de iniciativas estatales para hacer que sea más fácil para las mujeres obtener anticonceptivos.
Funcionarios estatales de salud dijeron que la decisión se basaba en un deseo para hacer que fuera más conveniente para las mujeres obtener medicamentos para prevenir el embarazo. Debido a que Nuevo México es predominantemente rural, las personas por lo regular tienen que manejar distancias muy largas para recibir atención médica, dijo Ben Kesner, director ejecutivo del Consejo Farmacéutico de Nuevo México, el cual aprobó la medida en abril.
La decisión fue tomada al mismo tiempo que otros estados están tomando acciones similares, preocupados de que la administración de Trump reduzca el acceso al control natal.
La administración ha dado señales de que quizás llegue a relajar una regulación emitida por la Ley de Salud Asequible que exige que la mayoría de las compañías deben ofrecer cobertura de control natal sin un co-pago como parte de los planes de salud para los trabajadores. Una revisión de dicha norma, obtenida por Vox.com, indica que la administración podría expandir las exenciones para los empleadores que abogan a favor de una objeción moral o religiosa para no incluir anticonceptivos en las pólizas de seguros de sus empleados. La Casa Blanca no ha confirmado la veracidad de dicha revisión.
Adicionalmente, los republicanos en el Congreso intentan bloquear fondos federales destinados a la federación de Planificación Familiar, una bien conocida organización que ofrece servicios abortivos y que también ayuda a muchas mujeres de bajos recursos a obtener control natal. Los críticos de la organización argumentan que otros proveedores garantizados pueden atender a dichas pacientes si la federación de Planificación Familiar es privada de sus fondos debido a la acción tomada por el Congreso.
Trump y el secretario de Servicios Humanos y de Salud, Tom Price, han dicho que ellos se oponen a que se destine dinero de los contribuyentes a la federación de Planificación Familiar debido a que es considerada el proveedor de servicios abortivos más grande en la nación. Y ambos han sugerido que la provisión de anticonceptivos de la Ley de Salud Asequible fue demasiado lejos al obligar a las personas de fe pagar por un servicio con el cual no están de acuerdo.
Trump firmó una orden ejecutiva que, entre otras cosas, ordena a los Servicios Humanos y de Salud a que reconsidere esta provisión. En un comunicado de prensa, Price dijo haber aceptado la orden dada por el presidente. “Tomaremos acción para cumplir con las instrucciones del presidente y salvaguardar las creencias religiosas de los estadounidenses que ofrecen planes de salud a sus empleados”, dijo.
El miedo a que estas acciones obstruyan el acceso a las mujeres al control natal ha conllevado a que algunos estados tomen medidas preventivas.
El gobernador de Nevada, Brian Sandoval, un republicano, firmó la semana pasada un proyecto de ley bipartidista que requiere que los planes de salud ofrezcan a las mujeres suministros de control natal por 12 meses sin copago. Colorado y Washington pusieron en vigor una legislación similar a comienzos de este año, y Nueva York y Massachusetts están considerando implementar sus propias versiones.
En abril, Maryland puso en vigor una ley con la que utilizará dinero del estado para reembolsar los recortes, a nivel federal, hechos a la federación de Planificación Familiar.
Más de una docena de estados han tomado acciones para proteger el acceso a los anticonceptivos en los planes de seguros para la salud, según dijo Elizabeth Nash, gerente de asuntos estatales del Instituto Guttmacher.
Por ejemplo, varios estados han tomado medidas para asegurarse que las mujeres puedan obtener un año de control natal, en lugar de las recetas a corto plazo que las compañías de seguros cubren.
Kesner dijo que la política de Nuevo México no era el resultado del clima político nacional sino del deseo de modernizar el acceso a un tipo común de medicamentos. Bajo la nueva norma, las mujeres podrán entrar a cualquier farmacia, hablar con un farmacéutico capacitado y luego recibir, justo en el momento, una receta o pastillas, un parche o una inyección.