Demandan a policía por uso excesivo de fuerza en muerte
Una familia paseña está demandando a un oficial de la policía y a la Ciudad de El Paso por haber matado a su hijo, después de haberlo sometido mediante el uso de una pistola eléctrica o taser.
En los últimos cuatro años, ambas entidades se han enfrentado a civiles fronterizos en al menos dos ocasiones por procedimientos policiales ortodoxos.
La demanda alega que la fuerza utilizada por el oficial Escajeda fue “irracional y excesiva”. La familia está demandando por daños compensatorios y ejemplares, así como honorarios de abogados.
Los demandantes son María Ramírez y Pedro Ramírez, padres de Daniel Antonio Ramírez, quien tenía antecedentes de enfermedad mental. De acuerdo a documentos de la corte, el 23 de junio de 2015, María llamó a la policía para informar que su hijo Daniel amenazaba con suicidarse.
Según la demanda, Rubén Escajeda Jr. fue el primero en responder a la llamada del 911 y, después de entrar en el patio trasero, encontró a Daniel Ramírez “colgando de una red de baloncesto”. Escajeda vio que Daniel estaba agarrando la cuerda alrededor de su cuello y tocando el suelo con sus puntas de pies tratando de salvar su propia vida. Sus dos manos estaban alrededor de la cuerda.
Los Ramírez aseguran que en ese momento fue cuando el oficial sacó su aturdidor y lo descargó sobre su hijo “a pesar de las claras señales de que Daniel estaba vivo y en la agonía de colgarse a sí mismo”, y a pesar de, junto a él, no había “ningún arma de fuego, cuchillo u otra arma”.
Daniel quedó inmóvil, suspendido, con los conectores del aturdidor pegados a su pecho y abdomen, antes de que Escajeda lo descolgara. Luego, tras intentos fallidos de reanimación, fue trasladado hasta el Centro Médico Del Sol, donde fue declarado muerto.
La demanda alega que la acción realizada por el agente Escajeda no está autorizada por la política del Departamento de Policía de El Paso porque “el uso de un taser es un uso de la fuerza de nivel 4 autorizado solamente para controlar la agresión activa o la resistencia defensiva cuando otros medios menores han fallado o cuando el oficial cree, con razón, son claramente ineficaces”.
Por lo anterior, los Ramírez dicen que “el EPPD ha fracasado sistemáticamente en capacitar a su oficial sobre cómo hacer el primer contacto con las víctimas de las crisis de salud mental y cómo seguir procedimientos para asegurar la seguridad de las víctimas de las crisis de salud mental”.
fue presentada el jueves en el Tribunal de Distrito de los Estados Unidos por los abogados Enrique Moreno y Lynn Coyle en nombre de María y Pedro Ramírez.
Más encuentros fatales
No es la primera vez que una familia lleva a los tribunales al Departamento de Policía y al municipio.
Uno de los casos más recientes es el de Erick Emmanuel Salas Sánchez, ocurrido en dos mil quince. De acuerdo con archivos de El Diario de El Paso, el incidente ocurrió el 29 de abril de 2015 en la cuadra 300 de la calle Jesuit, cuando el agente Mando Kenneth Gómez, de 37 años, respondió a un reporte de robo.
Al llegar al lugar, Gómez se topó con Salas, quien estaba armado con un objeto metálico y amenazaba con matarlo. Uno de los agentes que acompañaba a Gómez intentó someter sin éxito a Salas Sánchez con una pistola eléctrica (Taser), por lo que el agente le disparó cuando presuntamente intentó huir.
Salas Sánchez fue transportado al Centro Medico Médico del Sol, donde fue murió a consecuencia de sus lesiones.
El juicio contra Gómez está programado para el próximo 7 de agosto de este año. El oficial enfrenta cargos por la muerte de Salas Sánchez a quien, según documentos de la corte, disparó por la espalda cuando éste intentaba huir.
Otro de los casos sonados en El Paso es el del oficial José Flores, que disparó y mató al fisicoculturista Daniel Rodrigo Sáenz, de 37 años, el 8 de marzo de 2013, cuando lo trasladaba a una celda.
Según explicaron las autoridades, Sáenz, quien estaba bajo custodia por un incidente ocurrido ese mismo día por la mañana, fue esposado para ser trasladado para obtener un dictamen médico. Sin embargo, al exterior de la Cárcel del Condado comenzó a confrontar violentamente al policía, y éste terminó por dispararle.