Enfrentan ciudades de Texas al gobernador
Mandatario y Legislatura republicanos chocan con municipios liberales
Austin— Citando graves inquietudes en torno al comportamiento “socialista” en las ciudades liberales del estado, el gobernador republicano Greg Abbott ha hecho un llamado a los legisladores texanos a fin de que este mes se congreguen en una sesión especial en la cual se analicen proyectos de ley destinados a reducir la autoridad local en temas que oscilan desde la implementación de impuestos hasta la cobranza de cuotas sindicales.
Probablemente Texas represente el ejemplo más dramático de la relación cada vez más tensa entre líderes de estados republicanos y sus centros urbanos demócratas, los cuales han tomado enérgicas medidas, a menudo contra la naturaleza de la entidad, a efecto de ampliar las regulaciones ambientales y los programas sociales.
A lo largo y ancho del país líderes estatales republicanos han respondido a las diferencias culturales al alza aprobando legislaciones por encima de las leyes locales.
“Estas leyes prioritarias están diseñadas para intimidar a los funcionarios locales para que representen a un grupo menor de personas”, señaló Michael Alfano, de la Campaña en Defensa de las Soluciones Locales, organización sin fines de lucro dirigida contra los esfuerzos estatales por minar la autoridad local.
Matthew Walter, presidente del Comité de Liderazgo Estatal Republicano, una organización de funcionarios estatales republicanos, consideró que las leyes prioritarias cada vez se deben más a las derrotas políticas demócratas a nivel estatal y federal.
Las ciudades “parecen ser como la última vanguardia de ideales demócratas y progresistas, los cuales en este momento continúan moviéndose a la izquierda hacia… una visión más socialista”, dijo Walter. Debido a que los gobiernos de ciudades y condados obtienen su autoridad del Gobierno estatal, los estados tienen derecho a contener a los gobiernos locales desbocados, agregó.
La sesión especial texana no ha sido bien vista en la capital, Austin, baluarte liberal cuyos funcionarios se dicen usados en el golpeteo político de los legisladores estatales republicanos que intentan granjearse a los electores del resto de esta entidad conservadora.
Abbott y los funcionarios del Gobierno de la ciudad se embarcaron en un duelo de palabras, mientras que un regidor municipal consideró que Abbott actuó “cobardemente” por su enfoque destinado a tomar severas medidas contra las “ciudades santuario” y Abbott se burló del aroma del aire de Austin.
“En cuanto uno cruza la línea limítrofe del Condado Travis empieza a oler distinto”, bromeó Abbott durante una reunión de republicanos, refiriéndose al condado donde se localiza Austin. “¿Y saben cuál es esa fragancia? La libertad. Es el aroma de la libertad que no existe en Austin, Texas”.
Los comentarios no agradaron en esta ciudad de rápido crecimiento que alardea sobre su alta calidad de vida.
“El aire de Austin es muy agradable, con una tasa de desempleo un punto más baja que la del estado, una tasa más baja de delitos violentos que la del estado y las tasas de patentes y capital especulativo más altas a nivel estatal”, contraatacó el alcalde de Austin, Steve Adler, quien es demócrata. “Y el aire huele a tacos”.
Adler ha acusado al gobernador de iniciar una “guerra contra los gobiernos de las ciudades”, catalogando los intentos estatales por interferir con lo que las comunidades locales creen les funciona mejor “el punto extremo de control”.
“Aquí nos sentimos sitiados”, dijo Adler.
Los legisladores estatales republicanos sostienen a su vez que los gobiernos de ciudades como Austin se han excedido al regular a sus ciudadanos, con las regulaciones protectoras de árboles que limitan lo que los propietarios pueden hacer en sus propios terrenos constituyendo un ejemplo.
El decreto sobre árboles protegidos es uno de los 20 temas incluidos en la agenda que Abbott desea que los legisladores analicen durante la sesión especial programada para iniciar el 18 de julio. Entre el resto de las propuestas están el aumento de sueldos para los maestros, nuevas restricciones en los abortos y una medida inspirada en la iniciativa sobre el uso de los baños del Carolina del Norte por parte de la comunidad LGBT –con mucho, el tema más polémico.
En la agenda de Abbott también se encuentran medidas a fin de restringir la capacidad de los gobiernos locales para recaudar impuestos a la propiedad, anexar terrenos, cobrar cuotas sindicales de los empleados y establecer reglas para el uso de celulares al manejar.
La sesión tendrá lugar en un momento cuando están aumentado las tensiones entre el Estado y varias ciudades liberales texanas, como Austin, en torno a la aplicación de las disposiciones migratorias federales. Este año, la Legislatura aprobó una medida destinada a obligar a las ‘ciudades santuario’ a ayudar a detener por más tiempo y deportar a las personas que se encuentren ilegalmente en el país. Austin es una de las ciudades que están demandando al Estado por la nueva ley.