Refrendan proyecto al NMSU para ubicar a portadores del zika
El nuevo contrato permitirá a los científicos descubrir condiciones específicas que atraen a los mosquitos
LInvestigadores de la Universidad Estatal de Nuevo México (NMSU) recibieron un segundo contrato de parte del Departamento de Salud de Nuevo México para expandir el proyecto del verano pasado para cartografiar la distribución geográfica de los mosquitos portadores del virus del zika en el estado.
En mayo, el nuevo estudio determinó que la especie que transmite el virus del Zika –Aedes aegypt– se encuentra en el Condado de Doña Ana. El año pasado, Nuevo México registró 10 reportes de casos de la enfermedad del virus del zika importada por viajeros. Este año, hasta la fecha, no ha habido reportes de casos de la enfermedad.
‘El estado se mostró muy contento con nuestro trabajo anterior’, dijo Kathryn Hanley, profesora de Biología de NMSU en el Colegio de Artes y Ciencias. ‘Consecuentemente, cuando había más dinero para estudiar estos vectores del virus del zika, nos pidieron que volviéramos a retomar el proyecto, y esta vez nos pidieron si podíamos hacer un estudio más detallado dentro de las ciudades’.
Hanley y las investigaciones que la profesora de geografía de NMSU, Michaela Buenemann, realizó el verano pasado, demostraron que los mosquitos de las especies y sólo se encuentran en el tercio del estado ubicado al sur de la entidad.
‘Todo lo que sabemos por ahora es que estas especies se encontraron en ambientes urbanos en los condados del sur de Nuevo México’, dijo Buenemann. ‘No sabemos dónde fueron encontradas estas especies dentro de las ciudades. Por ejemplo, no sabemos si son más prevalentes en áreas con vegetación o en áreas donde hay más edificios, en espacios abiertos o en lugares densamente poblados, o en vecindarios acaudalados o de bajos ingresos. Tanto el factor humano como el ambiental probablemente jueguen un papel en la distribución de estos mosquitos, pero por el momento, aún no lo sabemos’, agregó.
El nuevo contrato les permitirá a los investigadores descubrir ciertos detalles específicos sobre el tipo de condiciones que atraen a los mosquitos que potencialmente pueden transmitir el virus del zika.
‘Vamos a hacer un estudio detallado de las 11 ciudades más grandes en el sur de Nuevo México’, dijo Hanley. ‘Por lo que vamos hacer extensas capturas de ejemplares en las áreas urbanas. Vamos a tocar puertas para preguntarles a las personas si podemos acceder a sus patios para colocar nuestras trampas de mosquitos. Eso también nos ayudará a determinar qué tipo de factores ambientales en las ciudades juegan un papel en la distribución y abundancia de estos mosquitos’.
Estudiantes de posgrado que trabajan con Buenemann y Hanley ya realizaron un descubrimiento este verano. Comenzaron a colocar las trampas en la primavera, esperando ver a los primeros mosquitos en julio. En su lugar, capturaron mosquitos a comienzos de mayo, lo cual indica que los insectos han estado activos desde marzo, registrando un periodo más largo de riesgo de la enfermedad de lo que en un inicio se había estimado.
‘Continuaremos atrapando mosquitos al menos hasta que lleguen las primeras heladas’, dijo Hanley. ‘Asumimos que una vez que caiga una primera helada dejaremos de recolectar mosquitos de la especie Aedes aegypti, pero no es inconcebible que seguiremos atrapando mosquitos durante todo el año y hasta el próximo verano’.
‘No sólo estamos interesados en cómo estos mosquitos varían su distribución a tra- vés de un espacio y tiempo, sino que también nos interesa lo que los tipos de interacciones ambientales y humanas podrían explicarnos sobre estas distribuciones’, dijo Buenemann.
Este nuevo estudio incluirá dos áreas adicionales de investigación dirigidas por Immo Hansen y Jiannong Xu, ambos profesores asociados de biología en NMSU.
El laboratorio de Hansen va a analizar cuán resistentes son los mosquitos de Nuevo México a los insecticidas de uso común.
‘Los niveles de resistencia son importantes para saber cuándo puede haber un brote de la enfermedad, ya que ayudan a los profesionales en el control de los mosquitos a seleccionar el tipo adecuado de insecticida y a obtener los mejores resultados”, dijo Hansen.
Xu conducirá una investigación sobre los microorganismos de los mosquitos de Nuevo México, las bacterias y micosis que viven junto con estos insectos. Si se logran manipular los microorganismos de los mosquitos, esto también puede ayudar en las iniciativas de control.
‘Los microbios asociados al mosquito han coevolucionado con el huésped’, dijo Xu. ‘Estos han contribuido significativamente a varias características de la vida de los mosquitos, incluyendo desarrollo, fecundidad y competencia de vectores. Entender las interacciones de los mosquitos y sus microbios ayudará al desarrollo de nuevas estrategias para su control’.
La meta del Departamento de Salud de Nuevo México es informar a las comunidades del sur del estado sobre los riesgos del zika y otras enfermedades que portan los mosquitos.
‘El riesgo será determinado por cuántos mosquitos de la especie Aedes aegypti pueden llegar a encontrarse en una vivienda’, dijo Hanley. ‘Si usted vive en una granja, nuestra investigación sugiere que usted tiene pocas probabilidades de encontrar este tipo de mosquitos. Pero si usted vive en Las Cruces, nuestro estudio nos permitirá informarle sobre si su lugar de trabajo, o el área donde vive, tienen una alta o baja densidad de mosquitos’. concluye.