Bernie Sanders nos obliga a retomar la reforma de salud
El miércoles, el senador Bernie Sanders, independiente por Vermont, 15 copatrocinadores, todos demócratas, presentaron el nuevo proyecto de ley “Medicare para Todos”. Es un plan ambicioso para iniciar una discusión crítica de políticas sobre cómo resolver costosas ineficiencias de nuestro sistema de salud, y a la vez que asegurar una cobertura robusta y asequible para todos.
Pero, un momento. ¿No es eso lo que la Ley de Cuidado de Salud Asequible hace o debe hacer? Vamos por partes. Primero, una breve descripción del plan de Sanders. En el primer año del plan, Medicare se amplía para cubrir a los niños menores de 18 años ya los mayores de 55 años. En los siguientes cuatro años, el plan incluye a todos los estadounidenses en un paquete integral que cubre la mayoría de las necesidades de atención médica, tales como atención hospitalaria y primaria, atención de maternidad y medicamentos recetados, beneficios de visión y dentales y servicios reproductivos. El gobierno sería el único asegurador.
El plan de Sanders no especifica cómo pagaría este enorme cambio; la suposición es de que tendrá que ser a través de impuestos graduales.
El plan obviamente requiere una mayor participación económica del gobierno en la atención de la salud y, por tanto, impuestos más altos, que será una de las fuentes de ataque de los opositores. Estos incluirán a los aseguradores, la industria farmacéutica, y a muchos proveedores de servicios de salud cuyos reembolsos estarían incluidos en el plan, sin mencionar a los contribuyentes. No se puede cortar el gasto per cápita de esta manera sin que alguien lo tenga que pagar.
En el nivel más básico, Sanders está hablando de tomar “beneficios excesivos” del sistema actual y usar ese dinero para proporcionar una cobertura completa para todos. Por supuesto, lo que él está llamando beneficios excesivos, alguien más los llama “los ingresos de mi familia”.
Con respecto a los costos, los partidarios contrarrestarán, correctamente, que el costo para los hogares debe considerar las primas de seguro que actualmente pagan. Sanders dijo que “la típica familia de la clase media ahorraría más de 4 mil 400 dólares bajo este plan”, y lo explicó de esta manera: la gente podrá intercambiar algunos de sus impuestos actuales para obtener una cobertura más robusta a un mejor precio, y por ende un ahorro.
No hay duda, hay muchas preguntas sobre los números involucrados, pero pero la formulación básica de Sanders describe los sistemas de salud en la mayoría de las otras economías avanzadas.
Obviamente, hay mucho que decir sobre factibilidad de esta propuesta, particularmente con el actual Congreso (de mayoría republicana y cuya prioridad a principios de año era revertir la ACA).
Podemos discutir todo el día sobre si ese era el camino correcto a tomar, pero no se puede negar que la ACA ha reducido la cuota de los estadounidenses sin cobertura de salud a niveles más bajos, mientras que ayuda a disminuir la tasa de crecimiento de los costos.
Las realidades políticas actuales requieren construir sobre estos logros, incluyendo a todas las partes interesadas. Es notable que Sanders no sólo es fiel a este objetivo. sino que fue uno de los defensores más enérgicos de la ACA durante los recientes intentos republicanos de derogarlo.
Lo que propone Sanders implícitamente es que tenemos que actuar de manera incremental al trazamos una nueva estrategia. Su plan, y el hecho de que tiene todos estos copatrocinadores, es francamente inspirador. Pero hay que tomar en cuenta de que este plan simplemente inicia la conversación de cómo mejorar el cuidado de salud en Estados Unidos y hacerlo más asequible.
Durante mucho tiempo, los demócratas han negociado entre ellos mismos, iniciando debates y terminando acorralados por los republicanos. El plan de Sanders tiene un objetivo claro y un mensaje fuerte.