Pega política de Trump a inversionistas mexicanos
Desalienta y amenaza la colaboración; empresarios aquí ejercen cautela, aseguran
Empresarios locales dicen ejercer cautela tras las continuas amenazas hechas por el presidente Trump en relación a la promulgación de un impuesto de ajuste fronterizo y la terminación de NAFTA o Tratado de Libre Comercio.
Esto se une a que los puntos de vista positivos sobre Estados Unidos han descendido abruptamente entre los mexicanos, al alcanzar el nivel más bajo en 15 años, mientras existe una profunda desaprobación sobre el Gobierno de Trump y su política hacia México, de acuerdo con un estudio realizado por el Centro de Investigación Pew.
Líderes comerciales e industriales en El Paso consideran que cuando casi dos tercios de los mexicanos tienen una opinión desfavorable sobre este país –más del doble de la proporción en comparación con la de hace dos años– se perjudican los intereses estadounidenses, en especial los fronterizos.
Opinan que los comentarios desafiantes del presidente Trump y su plataforma política amenazan con desgastar la colaboración e intercambio con México, poniendo en peligro miles de empleos que dependen de estos dos factores.
Sin embargo, coinciden en que a pesar de la opinión negativa que ahora México tiene de Estados Unidos, la relación entre los dos países no se puede terminar, ambas partes tienen mucho qué perder, especialmente en el caso de El Paso y Ciudad Juárez.
El resultado de opiniones adversas llega después de años de mejores percepciones sobre la Unión Americana por parte de los mexicanos, conforme la relación entre los dos países se ha profundizado.
Los lazos comerciales se fortalecieron bajo el Tratado de Libre Comercio de Norteamérica (NAFTA por sus siglas en inglés), al igual que el turismo estadounidense en México y los lazos familiares de millones de mexicanos en este país.
Sin embargo, el 65 por ciento de los mexicanos tiene actualmente una mala opinión sobre este país, mientras que en 2015 el 66 por ciento tenían una opinión positiva, de acuerdo al estudio.
Jerry Pacheco, representante de la Asociación de Industriales Fronterizos, con sede en Santa Teresa, Nuevo México, dijo que por tradición, las compañías estadounidenses están acostumbradas a un trato amable con México.
“El aumento del comercio bilateral ha convertido a México en el segundo mayor mercado de exportación de nuestro país, al mismo nivel que los mercados de China y Japón”, dijo.
“Sin embargo, la promesa de construir un muro fronterizo y la amenaza de hacer que México lo pague, además de la promulgación de un impuesto de ajuste fronterizo, han incrementado una especie de resentimiento. La amenaza de terminar con NAFTA también ha golpeado, haciendo que los inversionistas y comerciantes estén cautelosos”, añadió Pacheco.
Considera que en términos comerciales, especialmente EU trata a México como su enemigo, imponiendo barreras y obstáculos, cuando se le debería dar el mejor trato al ser su mejor socio, incentivando y fortaleciendo relaciones.
Richard Dayoub, director ejecutivo de la Cámara de Comercio de El Paso, opina que el discurso negativo y una retórica basada en amenazas han generado un ambiente desfavorable para las relaciones de los dos países, que afecta el intercambio comercial y en general todas las actividades binacionales.
“Los ataques del presidente Trump contra México han causado un efecto negativo desde el principio de su administración, sin embargo, poco a poco el Gobierno estadounidense se ha dado cuenta que México es muy importante para su economía”, comentó.
Dayoub agregó que “no obstante, los sólidos lazos con México no se van a romper tan fácilmente por una plataforma política, estamos trabajando fuertemente porque nuestras conexiones se fortalezcan y continúen, son imperantes para esta frontera”.
El cónsul general de México en El Paso, Marcos Bucio Mújica, aseveró que hay optimismo en la continuidad de las relaciones binacionales entre México y Estados Unidos porque los lazos son fuertes.
“Los lazos son históricos, no son sólo económicos o culturales, sino familiares, tenemos contacto en todo sentido entre americanos y mexicanos todos los días”, dijo.
“La realidad de la relación político-social de los pueblos transfronterizos está basada en hermandad y nexos muy establecidos”, mencionó Bucio.
Las cadenas de suministros y de producción se mantienen hasta el día de hoy, dijo el cónsul.
“Hay muchos insumos que produce México para Estados Unidos y viceversa. Es una relación que se ha construido a lo largo de casi 25 años”, agrega.
Jon Barela, director ejecutivo de Borderplex Alliance, organización que impulsa el desarrollo económico en esta región fronteriza, explicó que el sector comercial e industrial estadounidense en El Paso y Nuevo México, así como en toda la nación, tiene la esperanza de que las negociaciones del NAFTA mejoren e incentiven la economía binacional.
Pacheco reconoció que sí existe temor y cautela de parte de los socios comerciales mexicanos en esta región ante el discurso del presidente Trump pero piensa que los lazos entre los dos países se mantendrán sólidos, especialmente por la intención actual de todos los actores comerciales de seguir trabajando juntos.
“Lo que nos dicen todos nuestros miembros es que busquemos todas las estrategias para poder seguir trabajando juntos, impulsando nuestras empresas y generando ganancias para las dos economías”, dijo Pacheco.
Más sobre la encuesta:
Los puntos de vista de los mexicanos sobre el NAFTA también son favorables, tres de cada cinco mexicanos ven el acuerdo comercial como algo bueno para su país.
“Las crecientes actitudes negativas hacia el país parecen no afectar el deseo de los mexicanos de vivir y trabajar en Estados Unidos. Más de la mitad de aquellos que tienen una opinión desfavorable de Estados Unidos, 54 por ciento, afirman que la vida es mejor para aquellos que se mudan allá”, dicta el reporte del Centro de Investigación Pew.
La encuesta también descubrió un estado de ánimo sombrío generalizado entre los mexicanos, con un 85 por ciento que se muestran insatisfechos con la situación actual en su propio país.
Entre las preocupaciones más apremiantes, según el estudio, están la corrupción de la clase política, la violencia relacionada con las drogas, así como el crimen.