Prepara Trump orden ejecutiva para debilitar Obamacare
Ante el fracaso de varios intentos por derogar la Ley de Cuidado de Salud Asequible (ACA u Obamacare), la Casa Blanca parece estar preparando un nuevo acto de sabotaje para debilitar las bolsas de seguros de salud subsidiados.
Según varias fuentes, el presidente Trump prepara una orden ejecutiva que debilitaría el requisito de que todos los estadounidenses tengan seguro médico o paguen una multa. El llamado “mandato de seguro” es una garantía de ingresos a las arcas del ACA, ya sea persuadiendo a personas saludables a que compren pólizas de seguro, o requiriendo dinero a quienes decidan no comprarlas.
Trump utilizaría esta nueva “opción nuclear” si la mayoría republicana del Congreso no logra derogar este requisito particular del Obamacare como enmienda a la reforma tributaria recién presentada hace unos días.
Trump apoya la abolición de la obligatoriedad del seguro de salud, pero no puede eliminarlo unilateralmente porque está consagrado en la ley. Dado que varios proyectos de ley republicanos destinados a desentrañar la ACA han fallado, Trump y sus adjuntos ahora están buscando otras formas de reducir el requisito.
La solución que plantean es descarada: La orden ejecutiva ampliaría la “exención por dificultades económicas” que la ley ACA provee. No está claro todavía cómo lograrían este objetivo, pero puede ser algo tan simple con dejar que las personas hagan esta afirmación en sus declaraciones anuales de impuestos, y no establecer un mecanismo para verificar si es cierto o no.
La orden aún no se ha emitido, y las fuentes advirtieron que la Casa Blanca continúa presionando a los líderes del Congreso para que cambien el requisito a través de la legislación. El Departamento del Tesoro, que hace cumplir el mandato, ha otorgado esta exención en casos como la muerte de un familiar, la bancarrota, un desastre natural o cuando un contribuyente no puede pagar sus servicios públicos.
La eliminación directa del mandato individual desencadenaría una tormenta política entre los demócratas y algunos republicanos centristas, ya que se considera un poderoso incentivo para alentar a los consumidores más saludables a inscribirse en un seguro de salud.
La multa actual por no tener cobertura es de 695 dólares por adulto y 347.50 por niño, hasta 2 mil 85 por familia, o el 2.5 por ciento del ingreso familiar, el que sea mayor. Unos 6.5 millones de contribuyentes pagaron una multa por no tener seguro en el 2015, según el Servicio de Impuestos Internos (IRS), aunque la multa ese año fue de 470 dólares por adulto en ese entonces.
La Oficina de Presupuesto del Congreso proyectó en un informe de diciembre de 2016 que abolir el mandato individual podría dejar sin seguro a otros 15 millones de estadounidenses en el 2026. En otras palabras, eliminar el requisito tendrá como resultado que millones de personas saludables abandonen el sistema.
El mes pasado, la Casa Blanca señaló que se vería más favorablemente una ley de salud bipartidista en el Senado si la medida eliminara retroactivamente el mandato individual, así como un requisito de que los empleadores con al menos 50 empleados brinden cobertura, para este año.
La senadora Susan Collins, republicana de Maine, que es vista como un voto decisivo sobre los impuestos, advirtió que la inclusión de una derogación del mandato individual es un proyecto radical. Pero los republicanos de la Cámara de Representantes están considerando revocar el mandato individual en su propuesta de reforma tributaria.
Es seguro decir que la lucha por mantener o quitar el Obamacare no ha terminado.