Ejecutan a mexicano por matar a su prima
Hmexicano condenado a muerte en Texas por el asesinato de su prima de 16 años en 1997 fue ejecutado el miércoles por la noche.
Rubén Ramírez Cárdenas, de 47 años, recibió la inyección letal por el asesinato de Mayra Laguna en el Valle del Río Grande, en el sur de Texas, en febrero de 1997. La ejecución fue demorada varias horas mientras la Suprema Corte de Justicia examinaba la apelación.
La estudiante de secundaria fue secuestrada de su habitación en el apartamento de la familia en la ciudad de McAllen, y su cadáver fue hallado en un canal cerca de un lago.
En una confesión a la Policía, Ramírez dijo que él y un amigo se llevaron a Laguna en el auto de su madre, que él tuvo relaciones sexuales con ella y luego la mató a golpes cuando ella peleó con él después de que la desató para dejarla irse.
Sus abogados le pidieron al máximo tribunal que postergara el castigo porque no tuvieron tiempo suficiente para apelar un sobreseimiento de un tribunal inferior a una demanda de derechos civiles, en la cual argumentaron que el derecho de Ramírez al debido proceso y sus derechos civiles fueron violados porque las autoridades de Texas no permiten el acceso a la evidencia de forma que pueda ser sometida a nuevos exámenes de ADN.
Los abogados del Estado consideraron que esa demanda era inadecuada, y dijeron que los tribunales estatales ya habían rechazado la solicitud de ADN porque el reo no pudo demostrar que exámenes más avanzados derivarían en su exoneración.
El amigo que iba con él, José Antonio López Castillo, hoy de 45 años, fue sentenciado a 25 años de prisión por secuestro
La aplicación de pena de muerte se retrasó en espera de decisión de la Suprema Corte
agravado.
Ramírez, de 47 años, se convirtió en el séptimo condenado ejecutado este año en Texas, que realiza más ejecuciones que ningún otro estado.
“Yo no planeé hacer eso, pero estaba drogado con cocaína”, les dijo Ramírez Cárdenas a las autoridades.