No reportaron a FBI historial de victimario
Omisión permitió a Devin P. Kelley comprar armas, revela Fuerza Aérea
Austin— Este jueves, una oficial de alto nivel de la Fuerza Aérea de Estados Unidos reconoció públicamente que debieron haberse reportado al FBI los cargos sobre violencia doméstica por los cuales en el 2012 se realizó una Corte marcial al victimario de la iglesia texana.
Anteriormente, la Fuerza Aérea había señalado que el fallo de culpabilidad emitido contra Devin P. Kelley no se remitió al FBI para su captura en la base de datos del Centro Nacional de Información Penal, el cual se utiliza a fin de revisar los antecedentes de las personas que desean adquirir armas, dejando en duda si se debió haber informado. Dicha omisión permitió a Kelley comprar armas que el veredicto hubiera impedido.
“Los delitos por los cuales el tirador de Texas fue sujeto a una Corte marcial debieron haber sido reportados”, dijo en rueda de prensa del Pentágono la secretaria de la Fuerza Aérea Heather Wilson. “Por esa razón iniciamos una investigación a fondo sobre este caso y otros similares”.
Wilson no explicó por qué no se notificaron las faltas. Señaló que el objetivo de las indagatorias de la Fuerza Aérea es averiguarlo.
“Creemos que había un problema”, agregó, pero aún está por determinarse la magnitud del mismo.
Kelley prestó servicio por dos años como soldado de la Fuerza Aérea antes de ser declarado culpable de dos cargos de agredir a su entonces esposa y a su hijastro. En noviembre del 212 fue sentenciado a 12 meses de prisión, degradado al rango más bajo y dado de baja por mala conducta. El domingo en la mañana, asestó un ataque fatal a feligreses en Sutherland Springs, Texas.
Wilson anunció esperarse que la semana próxima se termine el informe en torno a la razón de que no se reportaran los antecedentes penales. Añadió que, a partir del domingo, la Fuerza Aérea ha interrogado a cerca de 100 personas.
El jefe del Estado Mayor de la Fuerza Aérea, el general David Goldfein, dijo en la misma rueda de prensa que 12 de las 26 personas asesinadas en el templo de Sutherland Springs tenían nexos directos con la Fuerza Aérea, “eran integrantes o tenían lazos familiares”.