Algunas vindicaciones para los sobrevivientes
Washington— Gritos de asombro y alaridos desgarradores llenaron una corte de Pensilvania después de que se anunciara el veredicto del jurado que declaraba culpable a Bill Cosby por todos los cargos de drogar y abusar sexualmente de una joven mujer hace 14 años.
Dos mujeres que dijeron que ellas también fueron víctimas del icónico cómico estallaron en lágrimas y tuvieron que ser sacadas del tribunal. Hubo palabras airadas y profanas del acusado de 80 años.
Sin embargo, nada fue más dramático que las simples palabras de disculpa del fiscal a la víctima, ya que no se presentaron cargos cuando ella dio el primer paso hace una década.
¿Por qué llevó tanto tiempo llevar ante la justicia a un hombre que ha sido acusado por más de 50 mujeres de delitos sexuales durante cinco décadas? Sí, es bueno que la justicia haya sido, finalmente, alcanzada. Pero piensen en las mujeres que han sido lastimadas en el camino.
Afortunadamente, el caso servirá de estímulo para que la policía y los fiscales superen una reticencia inherente a buscar casos de agresión sexual a menudo difíciles; a los depredadores sexuales para darse cuenta de que serán considerados responsables de sus crímenes; y, sobre todo, a mujeres que han sido victimizadas, que pueden tener más razones para esperar ahora que serán creídas.
Cosby, declarado culpable el jueves de tres cargos por el delito de agresión sexual de 2004 contra una empleada de la Universidad de Temple, Andrea Constand, enfrenta hasta 10 años de prisión por cada cargo.
Es probable que las pautas de sentencias del Estado den lugar a una sentencia más breve, pero se enfrenta a la posibilidad de pasar el resto de su vida en prisión (a menos que su apelación sea exitosa).
Es un triste final para su otrora gloriosa carrera como actor que rompió barreras, comediante, filántropo y, a través de su amado personaje Cliff Huxtable, modelo a seguir a nivel nacional.
Sin embargo, cualquier simpatía por Cosby estaría fuera de lugar. El fiscal de distrito del condado de Montgomery, Kevin Steele –quien resucitó el caso criminal después de que su predecesor optó por no presentar cargos y que siguió adelante con un nuevo juicio luego de que el primero contra Cosby terminara con un jurado empatado–, describió a Cosby como un “hombre que evadió este momento por demasiado y largo tiempo”.
Detalló cómo Cosby “utilizó su fama, utilizó su riqueza, usó su red de seguidores” para atacar a mujeres jóvenes, muchas de las cuales lo consideraban un amigo y mentor, y luego para ocultar sus horribles crímenes.
En lugar de centrarnos en el perpetrador, diríamos que este es un momento para rendir homenaje a los sobrevivientes de agresión sexual que tuvieron el coraje de hablar y la persistencia de mantener sus historias durante largos años de negligencia oficial, minimización e incredulidad.