Confunden al país y al mundo señales ambiguas de Trump
Hemos escuchado decir al presidente Donald Trump que su estrategia respecto a Corea del Norte e Irán, que está marcada por lo impredecible y se opone a la diplomacia y compromiso de sus predecesores, va a terminar con los programas nucleares de ambos países de una vez por todas.
También ha dicho que aplicarle “una presión máxima” a Corea del Norte lo va a persuadir de desmantelar su arsenal. Y la decisión de Estados Unidos de retirarse del tratado nuclear con Irán “nos asegurará que nunca, pero nunca más, adquiera un arma nuclear”, dijo el año pasado.
Sin embargo, las acciones de Trump podrían enviar un mensaje muy diferente al mundo del que pretende. Al comprometerse a salirse del tratado nuclear con un país y negociar con otro, es un riesgo ya que Trump está enviando el mensaje de que las promesas estadounidenses son huecas, dándoles a sus adversarios una pequeña razón para hacer concesiones.
Al castigar a Irán aun después de haber congelado su programa nuclear pero estar de acuerdo en reunirse con el líder de Corea del Norte justo meses después de que llevó a cabo muchas de sus ambiciones nucleares, inadvertidamente, Trump está dando la impresión de que los países deshonestos son los más beneficiados si desafían y amenazan a Estados Unidos.
Y al amenazar con dar por terminado cualquier acuerdo que no reúna sus demandas, que en algunas ocasiones son inconsistentes, podría obtener algunas concesiones a expensas de socavar el papel tradicional de Estados Unidos como mediador y conciliador en las negociaciones, que es en lo que Washington se ha basado para promover sus intereses en foros internacionales.
Aunque Trump ha dado muestras de que disfruta el poder que tiene para ser el “aguafiestas” internacional.
Horas después de que el acuerdo entre las dos Coreas se dio a conocer, Trump escribió en Twitter que retiraría el apoyo estadounidense a cualquier país que “cabildeara en contra de que la Copa Mundial de Soccer del 2026 se lleve a cabo en Estados Unidos”.
“¿Por qué vamos a apoyar a países que no colaboran con nosotros?”, preguntó.