Músico rarámuri expondrá su arte al piano en UTEP
Romeyno Gutiérrez, junto con su padre, dará un concierto de su obra original
S er concertista de piano no es una carrera fácil, sobre todo si se es originario de la sierra de Chihuahua, y perteneciente a la etnia Tarahumara (Rarámuri), pero Romeyno Gutiérrez Luna decidió tomar este camino, y el próximo 26 de julio se presentará junto a su padre para ofrecer un recital con música tradicional de su comunidad.
La cita es en el Fox Fine Recital Hall de UTEP, ubicado en la 500 West University Avenue, donde Juan y Romeyno Gutiérrez ofrecerán lo mejor de su repertorio tradicional en evento gratuito, organizado por el Consulado General de México en El Paso.
“Romeyno es un virtuoso de la música, y por este medio comparte su cultura, con creaciones Rarámuris y propias”, dijo el cónsul mexicano Marco Bucio, sobre la presentación de los músicos tarahumaras, en apoyo al talento mexicano.
Este evento será de hecho la primera vez que los talentos musicales de padre e hijo se presenten en un escenario, y será la ciudad de El Paso la sede de tal acontecimiento cultural.
“Mi papá fue un corredor muy exitoso, y ya grande (a los 25 años) decidió aprender a tocar el violín en las festividades de nuestra comunidad, él aprendió solo y ahora por primera vez me va a acompaña en un recital”, dijo Romeyno vía telefónica a El Diario de El Paso.
La historia musical de los Gutiérrez va de la mano al pianista estadunidense Romayne Wheeler, quien al visitar Batopilas, Chihuahua conoció a Juan, y tras fincar una entrañable amistad el tarahumara prometió bautizar con el nombre de su amigo a su primogénito, de ahí el nombre de Romayno.
Wheeler no tan solo cambió su residencia a la sierra chihuahuense, sino que apadrinó a Romayno en sus estudios musicales, con lo que el joven Rarámuri es ahora reconocido en el mundo entero como el primer concertista de piano de origen indígena.
“Ahora vivo en la ciudad de Chihuahua, porque estoy yendo a la universidad para terminar mis estudios de Licenciatura en Música, pero siempre recordando la riqueza tradicional de la música de mi comunidad”, afirmó Romeyno.
Aunque Wheeler presentó a Romeyno las obras de Mozart, Chopin y Schubert, este próximo lunes el pianista tarahumara presentará su disco “Danzas Raramuris al Piano”, en el Teatro de Cámara Fernando Saavedra, previo a su presentación en El Paso.
Músico de oído
De acuerdo a Romeyno, su padre Juan Gutiérrez no tomó clases de música, todo lo aprendió de oído, y de hecho él fabricó el violín con el que participa en los rituales de su comunidad.
“El escuchaba a otros músicos y así es como se hizo el violinista de la comunidad, por ello es que esta va a ser la primera vez que él me acompaña, es algo que nunca habíamos realizado”, afirmó.
Como es fácil de notar, las hechuras musicales de padre e hijo difieren bastante al momento de programar un concierto, ya que Juan no sabe leer partituras como lo hace su hijo Romeyno, de ahí el reto de presentarse juntos en un escenario creció.
“Por supuesto que yo conozco la música tradicional de mi comunidad, y la interpreto, pero en esta ocasión yo voy a tener que seguir a mi papá y no él a mi”, afirmó el pianista.
Sobre el contenido del programa, Romeyno aseguró que será de gran agrado de quienes ya lo han escuchó en ocasiones anteriores, siendo la más reciente en noviembre pasado.
“De alguna manera es la unión de dos culturas, por medio del piano y del violín, y aunque al principio no sabíamos cómo se iba a escuchar, estamos seguros que a la gente que nos acompañe le va a gustar esta experiencia”, sostuvo.
Aunque las piezas que Juan y Romeyno van a interpretar no tienen un nombre preciso, la espiritualidad de cada pieza será un punto de unión con el sentir de la comunidad Rarámuri y los espectadores.
“Todas estas piezas tienen un sentido ritual, ya que primeramente la música se toca en cada fiesta cuando por ejemplo se sacrifica un animal, y hay que tocar para pedirle permiso al creador cuando vamos a hacer alguna cosa así”, subrayó Romeyno.
De ahí que la mayoría de las piezas musicales son dedicadas a
los animales que habitan la sierra, como lo es la danza del conejo, de la ardilla y del venado entre otras.
“De alguna manera todo es simbólico, es una conexión con la espiritualidad, y para dar una mejor calidad de sonido mi papá va a utilizar un violín diferente al tradicional”, dijo Gutiérrez.
El recital para piano y violín de Juan y Romeyno Gutiérrez será condimentado con explicaciones de los músicos antes y después de ejecutar cada una de las piezas con que cuentan en su repertorio, mientras que también se presentará la exposición fotográfica “Raíces Raramuri” por parte del fotógrafo chihuahuense Heber A. Nickolath.