‘Hunde’ contadora a Paul Manafort
Gastaba millones hasta 2015, luego falseó cifras para obtener préstamos, testifica
Alexandria, Va.— La encargada de la contabilidad de Paul Manafort declaró en su contra el jueves diciéndole a un jurado de Virginia que su estilo de vida con gastos millonarios duró hasta aproximadamente el año 2015, cuando se acabó el dinero, las cuentas se acumularon y él y su socio comenzaron a manipular cifras para asegurar préstamos.
El testimonio seco pero potencialmente dañino de la contadora, Heather Washkuhn, pareció socavar la defensa de Manafort contra los cargos bancarios e impositivos, al asegurar que su socio comercial es el responsable de cualquier delito financiero. Pero Washkuhn testificó que Manafort aprobó “cada centavo”.
Washkuhn pasó horas en el estrado de los testigos, describiendo saldos de cuentas, facturas recibidas y pagos. Su testimonio es crítico para el caso, que es escuchado por seis hombres y seis mujeres en Alexandria, Virginia. Manafort, quien durante un tiempo fue presidente de la campaña del entonces candidato Donald Trump en 2016, enfrenta cargos de orquestar un complicado esquema para esconder millones de dólares del Servicio de Impuestos Internos (IRS), y luego, cuando se le agotaron los ingresos, mentir para obtener préstamos bancarios que le permitieran seguir disfrutando de la buena vida.
Washkuhn describió a Manafort como un cliente “muy conocedor”. “Estaba muy orientado a los detalles. Aprobó cada centavo de todo lo que pagamos”, dijo.
Ese punto podría ser vital para las deliberaciones del jurado porque los abogados de Manafort han dejado claro que pretenden echarle la culpa al testigo estelar del caso, Rick Gates, a quien describen como un mentiroso y malversador responsable de cualquier trampa financiera encontrada por el FBI.
En el estrado de los testigos, Washkuhn dijo que preparó los libros de contabilidad de Manafort, y que eventualmente se los entregó a sus ayudantes para que presentaran las declaraciones de impuestos. Dijo que a veces veía en esas cuentas transacciones y a otras a las que no tenía acceso.
De manera crítica, Washkuhn testificó que no tenía ningún registro de cuentas extranjeras controladas por Manafort, y que no había tenido conocimiento de tales cuentas. Los fiscales ya presentaron pruebas de que Manafort utilizó cuentas en el extranjero para pagar millones de dólares en ropa, automóviles, bienes raíces y remodelación de viviendas.
Los fiscales acusan a Manafort de ganar 60 millones de dólares entre 2010 y 2014, mientras trabajaba para el gobierno de Ucrania, y ocultó millones en cuentas extranjeras que no fueron reportadas al IRS.
Washkuhn describió cómo la firma de Manafort, Davis Manafort Partners, recibió millones de dólares al año antes de que sus ingresos se desplomaran en 2015. La empresa reportó sólo $338,542 en ingresos en 2015 y una pérdida de $1.2 millones en 2016.