SE DAN CON ‘TODO’
Siento que no te gusten los pensamientos y oraciones. Oraré por cualquiera en riesgo de ser dañado” Ted Cruz Lo que parecía una reelección simple para el titular republicano se ha convertido en una de las carreras más disputadas del país Necesitamos un senador junior que confronte al presidente” Beto O’Rourke
Dallas— El representante Beto O’Rourke, de El Paso, nominado demócrata para el Senado de Estados Unidos, utilizó una reciente y agresiva táctica en contra del republicano Ted Cruz, titular del puesto, en su primer debate que se llevó a cabo el viernes por la noche.
En la Universidad Metodista del Sur, los candidatos intercambiaron golpes retóricos en cada pregunta, demostrando unas profundas diferencias que han sido evidentes desde hace tiempo en esta competencia.
Destacó la postura combativa de O’Rourke hacia Cruz después de haber pasado su campaña, hasta este punto, ignorando mayormente al senador en funciones.
En repetidas ocasiones O’Rourke recordó a la audiencia que es el único candidato que ha visitado los 254 condados de Texas: enérgicamente contraatacó en varias ocasiones cuando fue criticado por Cruz.
Dallas— “Esta es la razón por la que a la gente no le gusta Washington, D.C.: usted está diciendo algo que yo no dije y me lo está atribuyendo a mí”, le dijo O’Rourke a Cruz en cierto momento. “Es un truco que está empleando para confundir e incitar en base al temor”.
El debate fue agresivo desde la primera pregunta, que fue acerca de si a los “dreamers” –los jóvenes que fueron traídos al país ilegalmente cuando era niños– se les debería otorgar un camino para obtener la ciudadanía.
Manteniendo un apoyo firme para esa idea, O’Rourke acusó a Cruz de prometer que “deportaría a cada uno de los ‘dreamers’: esa no puede ser la manera en que Texas maneja ese tema”.
Sin negarlo, Ted Cruz respondió que Beto O’Rourke está enfocado en “luchar a favor de los inmigrantes ilegales” y en que “los estadounidenses son ‘dreamers’”.
Ambiguo cumplido
Aun en la última pregunta ostensiblemente positiva –¿Qué admira de su contrincante?– Cruz pareció lanzar un golpe, o por lo menos un cumplido ambiguo.
Al responder primero, O’Rourke comentó que como compañero del Congreso, respetaba el sacrificio que Cruz está haciendo con su familia para hacer lo que creía era lo mejor para el país.
Cuando llegó su turno, Cruz dijo que admiraba que O’Rourke fuera tan apasionado y creyera en eso por lo que estaba luchando: muy parecido a Bernie Sanders, el demócrata que se describe a sí mismo como socialista, hizo notar Cruz.
“Es una respuesta que es característica en usted”, replicó O’Rourke.
El tema del debate fue la política doméstica. Fue moderado por la reportera política de NBC 5, Julie Fine y el escritor político de Dallas Morning News, Gromer Jeffers.
En cuestiones más actuales, a los candidatos les preguntaron acerca de Brett Kavanaugh, el nominado a la Suprema Corte de Estados Unidos, cuya confirmación está en duda ya que enfrenta un alegato de mala conducta sexual de la época en que estuvo en la preparatoria.
Cruz dijo que la acusadora merece ser escuchada y tratada con respeto, mientras que O’Rourke fue más allá, al decir que es necesario que el FBI haga una investigación sobre la acusación.
Segunda Enmienda
Rápidamente, el diálogo se convirtió en una pelea más amplia sobre los nominados judiciales, Cruz trató de vincular a O’Rourke con Hillary Clinton, la nominada presidencial demócrata del 2016, y aseguró que ambos quieren jueces que anulen la Segunda Enmienda.
O’Rourke negó eso y ofreció otra réplica controvertida mientras Cruz lo desafió para que nombrara a un juez que él haya apodado y que defienda la Segunda Enmienda.
“Usted no entiende cómo funciona el Senado, pero nuestro trabajo en el Senado es decidir si vamos a apoyar o no a los nominados”, dijo O’Rourke –a lo cual Cruz lo presionó sobre si apoyó a Clinton en el 2016, cosa que si hizo, y O’Rourke insistió que la pregunta era irrelevante.
La Segunda Enmienda desató otro enfrentamiento entre los dos, ya que difieren en la necesidad de tener un control de armas después de los letales tiroteos ocurridos a principios de este año en Santa Fe High School.
Cruz dijo que los sobrevivientes le comentaron que no querían un control de armas sino más policías armados en las escuelas.
O’Rourke rechazó esa idea, argumentando que los maestros le dijeron que no creen que eso les dará más seguridad.
“Los pensamientos y las oraciones, senador Cruz, no van a acabar con eso”, dijo O’Rourke. “La gente de Texas –los niños de Texas– merecen que se tomen una acción”.
Cuando los moderadores trataron de seguir adelante, Cruz intervino para afirmar que “más policías armados en la escuelas no son pensamientos y oraciones”.
“Lamento que no le gusten los pensamientos ni las oraciones”, dijo Cruz. “Yo voy a orar por todos los que esté en peligro, pero también voy a hacer algo para solucionar eso”.
Bienestar de Texas
Cuando se les preguntó cómo representarían los valores de Texas, ambos tomaron la oportunidad de calumniar a su oponente en base a las contribuciones de campaña. Cruz describió a O’Rourke como un ideólogo de extrema izquierda que se apega a sus “intereses liberales”. O’Rourke describió a Cruz como alguien que está “cautivo” por las corporaciones e intereses especiales.
Pero ambos encontraron puntos en común en un área: cuando se les preguntó sobre la mejor manera de cubrir las necesidades del cuidado de la salud de los texanos, ambos candidatos dijeron que a los estadounidenses no se les debe negar la cubertura médica por condiciones pre-existentes.
Reñida contienda
El evento del viernes fue el primero de tres debates de una hora de duración, y tuvo lugar mientras las encuestas continúan mostrando una reñida contienda entre Cruz y O’Rourke, un congresista de El Paso. El viernes por la mañana, el Reporte Político Cook cambió su calificación de la contienda de “Inclinada hacia el republicano” a la de “tirar una moneda al aire”.
Los próximos dos debates están programados para el 30 de septiembre en Houston y el 16 de octubre en San Antonio. Las votaciones anticipadas comienzan el 22 de octubre.
Fue apenas hace una semana que O’Rouke y Cruz habían anunciado haber quedado de acuerdo en realizar tres debates, cerrando con ello un periodo de varias semanas de negociaciones entre sus campañas.
O’Rourke primeramente retó a Cruz a seis debates en mayo, y mientras que Cruz sostuvo que estaba abierto a debatir con su oponente, nunca respondió a ello de manera formal hasta julio. Fue entonces que Cruz propuso realizar cinco debates por el periodo de tres meses en cinco ciudades.
Entre los problemas que O’Rourke tenía con la calendarización de los debates propuesta por Cruz era que cada uno de estos caía en un viernes por la tarde durante la temporada de futbol americano de las preparatorias. Eso seguirá siendo el caso para el debate en Dallas, mientras que los otros dos debates en los cuales estuvieron de acuerdo realizar serán programados en días distintos. (Patrick Svitek/The Texas Tribune)