Se ríen de Trump en la ONU
Asistentes ríen cuando dijo que su administración había hecho más que cualquier otra en la historia del país
Nueva York — El presidente Donald Trump declaró el martes que su administración rechazará los intentos de otras naciones para imponer restricciones a Estados Unidos, prometiendo tomar acción en las relaciones mundiales basándose en su propio juicio sobre cómo esto beneficiará a los estadounidenses.
En los primeros momentos del discurso, Trump declaró que él había logrado mucho más progreso que “casi cualquier otra administración en la historia de nuestro país”—provocando las risas en la cavernosa cámara de la Organización de las Naciones Unidas. Un desconcertado Trump pareció perder el equilibrio por un momento.
“No esperaba esa reacción, pero está bien”, dijo. Pero el presidente pareció un tanto desanimado después de eso, incluso mientras cuando fielmente recitaba los enunciados en los apuntadores electrónicos.
En un discurso ante los líderes mundiales en la Asamblea General de la Organización de las Naciones Unidas, Trump emitió una aguda advertencia a los líderes de Irán, Siria, Venezuela y China sobre lo que él describía como su corrupto comportamiento. Pero el presidente también puso en claro que Estados Unidos, bajo su mandato, no permanecerá atado en sus relaciones por los consensos entre aliados y asociados tradicionales.
“Estados Unidos siempre optará por independencia y cooperación sobre un gobierno global, control y dominación”, según Trump. “Honro el derecho de toda nación en esta sala de apegarse a sus propias costumbres, creencias y tradiciones. Estados Unidos no les dirá cómo deben vivir, o trabajar, o alabar. Sólo pedimos que ustedes honren nuestros derechos a la soberanía por igual”.
Los comentarios del presidente tenían la intención, según auxiliares, de elevar el tema de la “soberanía estadounidense”, y Trump no perdió tiempo en declarar que él ha hecho un gran progreso en una agenda que según él llama “Estados Unidos primero”. Sin embargo, dicha postura no necesariamente contó con mucho del apoyo de parte de los líderes de los otros 192 países que conforman la Organización de las Naciones Unidas.
Trump buscaba convencer a su audiencia que él ha logrado el calificado éxito en su más grande apertura en la política extranjera —sus esfuerzos para convencer a Corea del Norte a que desmantele su programa de armas nucleares. Hace un año, Trump utilizó su primer discurso en la ONU para sermonear al líder norcoreano, Kim Jong Un, advirtiéndole que se encontraba en “marcha rumbo al suicidio” si no acataba lo que se le pedía.
Sin embargo, tras una histórica cumbre con Kim en Singapur en junio, Trump públicamente le dio las gracias a Kim por su “valentía y en los pasos que él ha tomado”. Trump, quien dijo esta semana que tendrá una segunda cumbre con Kim “muy pronto”, enfatizó que Pyongyang no ha hecho ninguna prueba con un misil balístico desde que comenzara el proceso de compromiso a comienzos de este año.
Pero a los otros dos países contra los que Trump arremetió el año pasado —Irán y Venezuela— el presidente les ofreció nuevas advertencias. Aunque Trump tuiteó en la mañana que él creía que se reuniría en un futuro con el presidente iraní, Hassan Rouhani, y dijo que él está “seguro que él es absolutamente un hombre muy agradable”, el presidente despotricó contra Teherán.
Haciendo referencia a la sangrienta guerra civil en Siria, Trump culpó a la “corrupta dictadura en Irán” por haber inflamado el conflicto por medio del dinero y el apoyo que ofreció al régimen de Bashar al-Assad.
“Ellos sembraron el caos, la muerte y la destrucción”, dijo Trump. “Estados Unidos conduce una campaña de presión económica para negarle fondos al régimen necesarios para avanzar en su sangrienta agenda”.
Luego que esta administración sacó a Estados Unidos fuera del acuerdo nuclear negociado por la administración de Obama con Irán y otros varios países, Trump agregó que, “Sanciones adicionales serán reanudadas el 5 de noviembre y habrá otras más impuestas a futuro”.
En Venezuela, Trump denunció al gobierno socialista del presidente Nicolás Maduro, cuyo opresivo liderazgo resultó en un colapso de la economía de la nación y en una masiva crisis de derechos humanos a manera que miles de venezolanos abandonan el país.
Trump anunció nuevas sanciones de Estados Unidos impuestas contra maduro y su círculo interno. “Virtualmente en todos los lugares en los que se ha implementado el socialismo y el comunismo, siempre ha conducido a la corrupción y a la decadencia”, según dijo Trump. Hizo luego un llamado al mundo para “resistirse al socialismo y a la miseria que trae consigo para todos”.
Una y otra vez, Trump regresó al tema de la soberanía. Subrayó las decisiones de su administración de no apoyar el Pacto Global de la ONU en el tema de la migración.
“Nosotros no seremos gobernados por un cuerpo internacional que no se responsabiliza de sus propios ciudadanos”, según declaró Trump. Luego agregó que la única solución a largo plazo a la crisis migratoria es “ayudar a la gente a construir mejores futuros en sus propios países —hacer que sus países sean grandes otra vez”.