Vigilará Border Patrol ‘Abrazos, No Muros’
Mañana sábado se llevará a cabo la sexta edición del evento binacional “Abrazos, No Muros” (“Hugs Not Walls”), en un hecho sin precedentes en donde la frontera entre Anapra y Sunland
Park se abrirá para permitir por unos minutos la reunión de familias completas separadas por el marco legal de inmigración de los Estados Unidos.
Este año, el papel que interpretarán los agentes de la Patrulla Fronteriza será bajo una estricta y protocolaria serie de medidas para garantizar la seguridad fronteriza.
“El apoyo que se provee para que estas organizaciones puedan lograr lo que han estado haciendo se da, siempre y cuando no se comprometa la íntegra seguridad de nuestras fronteras”, dijo a El Diario de El Paso, Ramiro Cordero, vocero de la Border Patrol Sector El Paso.
El trabajo conjunto de las autoridades fronterizas con las organizaciones ha permitido la realización de eventos que han dado la vuelta al mundo, como éste.
Abrirán compuerta en valla para hacer posible reunión familiar
Hasta ahora se han realizado cinco ediciones de “Abrazos no Muros”, en un período menor de 30 meses. Todas esas ediciones se realizaron a la mitad del Río Bravo, muy cerca de la parte inferior del puente internacional Paso del Norte.
Debido a la actual construcción del muro fronterizo de cuatro millas autorizado por la administración presidencial, el evento fue movido a las instalaciones de la valla fronteriza entre Anapra y Sunland Park.
Cordero expresó que se tuvo una junta con la Red Fronteriza por los Derechos Humanos y se dialogó para la posible aprobación de la petición para abrir uno de los portones.
El lugar en la valla fronteriza estaba asegurado, sin embargo, el abrir una de las compuertas de la franja, no.
“Hay circunstancias, como el lugar de la construcción actual no es un espacio apto para que la gente ande moviéndose ahí, los expertos en esa área somos nosotros y se determinó que no es un área segura así como se determinó que no será el evento ahí”, dijo.
Según Cordero, cada una de las organizaciones, la Diócesis, o cualquier otro organismo, han planteado un malentendido ante los medios y la comunidad.
“Cada una de las peticiones son revisadas caso por caso y de ninguna manera se hacen aprobaciones por nosotros localmente. Cuando estas organizaciones quieren hacer algo, cada vez que se hace algo nos tenemos que sentar a platicar y ver qué se está haciendo para poder llevar a cabo esos eventos”, expresó.
Asegurar la frontera
Durante esta edición, se espera la participación de 200 familias que han sido parte de las estadísticas de las leyes de inmigración.
“Sí se manejarán medidas extremas de seguridad, sabemos que estarán agentes de la Patrulla Fronteriza en la puerta vigilando que todo se realice de la forma correcta. Y creemos que sí hay que reconocer la voluntad de la agencia por permitir que esto suceda”, comentó Fernando García, director de la RFDH el martes pasado.
Será justo en la milla 357 de la demarcación de la frontera, en donde la Border Patrol abrirá un portón para permitir que las familias se encuentren, en un espacio aproximado de 1.30 metros (4.26 pies), el cual aún es parte del territorio estadounidense, por lo que “no se cruzarán fronteras ni se violarán leyes de inmigración”.
Cordero manifestó que la prioridad es mantener el resguardo de las fronteras, obstruyendo cualquier intercambio, como mercancías o de otro tipo.
La Red tiene un sistema muy efectivo, que ha funcionado y nuestro deber es garantizar que no se rompan las leyes en el campo migratorio o criminal, según informó.
Esta edición de “Hugs Not Walls” contará con tiempo y espacio sumamente limitado.
Las familias podrán conversar, abrazarse y tocarse por un período aproximado de 3 minutos, informan los organizadores.
La cita es mañana 13 de octubre en punto de las 9 de la mañana en la valla fronteriza de Anapra-Sunland Park.