Intensifica Beto ataques vs Cruz en segundo debate
San Antonio— En el período previo al debate por el Senado de Estados Unidos del martes por la noche, el candidato demócrata Beto O’Rourke escuchó a sus partidarios que querían que tomara una postura más agresiva hacia el titular republicano, Ted Cruz.
Al parecer O’Rourke escuchó.
Durante el evento con duración de una hora, el congresista paseño realizó una serie de ataques más duros de lo habitual hacia Cruz, incluidos un par de golpes evocadores de la batalla que enfrentó el senador con Donald Trump durante la campaña presidencial de 2016.
“Él es deshonesto”, dijo O’Rourke sobre Cruz en un momento dado. “Es por eso que el presidente lo llamó ‘Mentiroso Ted’ (Lyin’ Ted) y por eso el apodo se le quedó, porque es verdad”.
“Está claro que los encuestadores del congresista O’Rourke le han dicho que salga al ataque”, replicó Cruz. “Entonces, si él quiere insultarme y llamarme mentiroso, está bien”.
Él es deshonesto. Está claro por qué el presidente le llamó ‘Mentiroso Ted”
Beto O’Rourke Está claro que los encuestadores le han dicho que salga al ataque’’
Ted Cruz
San Antonio— Trump, quien vendrá a Houston el lunes para un mitin con Cruz, fue la fuerza invisible que impulsó una serie de intercambios polémicos durante el debate en los estudios de KENS 5, la filial de la CBS en San Antonio. Al principio, O’Rourke acusó a Cruz de no poder enfrentar al presidente en defensa de los texanos, mientras que Cruz rechazó la posibilidad de que O’Rourke pueda trabajar con el primer mandatario, luego de que expresara su apoyo para que se le someta a juicio político. “Lyin’ Ted” no fue el único insulto al estilo de Trump que escuchó en el debate: O’Rourke descalificó a Cruz varias veces diciéndole que era “puras palabras y nada de acción”.
Mientras O’Rourke golpeaba a Cruz, presentándolo como más interesado en su carrera política que en representar a Texas –“Ted Cruz es para Ted Cruz”, dijo el retador en un momento dado–, Cruz insistió en su posición ya conocida de que O’Rourke es un cautivo de la izquierda activista, y demasiado liberal para Texas. También describió a O’Rourke como un agitador clave si los demócratas toman el Congreso durante los próximos dos años bajo la administración Trump.
“¿Quieres hablar de un cierre?”, dijo Cruz después de que O’Rourke magnificara el papel protagónico que Cruz tuvo en el cierre del Gobierno de 2013. “Con el congresista O’Rourke a la cabeza, [habrá] dos años de un circo partidista y una cacería de brujas para el presidente”.
O’Rourke ofreció una respuesta inexpresiva y le dijo a Cruz que “resulta realmente interesante escucharlo hablar de un circo partidista después de sus últimos seis años en el Senado”.
Cruz y O’Rourke, quienes debatieron por primera vez el 21 de septiembre en Dallas, pudieron haber sostenido el martes su último encuentro cara a cara, antes de las elecciones, cuando subieron al escenario en San Antonio. Un debate que se había planeado para el 30 de septiembre en Houston se pospuso en medio de la batalla por la confirmación de Brett Kavanaugh ante la Corte Suprema de Estados Unidos, y aún no se ha reprogramado.
Tras el debate, O’Rourke se dirigió al Valle del Río Grande para participar en una audiencia pública de la CNN el jueves en McAllen.
Cruz se negó a aparecer en el evento, pero desde entonces ha tratado de convertirlo en otro debate.
La votación temprana comienza el lunes.