Los ataques anti LGBTQ muestran que la lucha aún no termina
San Diego — Tengo que hacer una confesión. Presenté esta columna muy tarde —alrededor de unos 20 años tarde.
Mi hermano, un especialista de mercadeo en Los Ángeles que declaró abiertamente ser homosexual hace dos décadas, muy a menudo me insta a que escriba más sobre la comunidad LGBTQ. Me estoy perdiendo una gran historia, según me dice.
Pero yo le digo que necesito una noticia de gancho. Ahora, de pronto, tengo para escoger.
Este año marca el 50 aniversario de los disturbios de Stonewall, el levantamiento en la Aldea Greenwich de Nueva York en junio de 1969, al cual se le da crédito de haber dado origen al movimiento por los derechos civiles de los homosexuales y lesbianas.
También parece que estamos viviendo un momento LGBTQ.
— La semana pasada, Jussie Smollett, un actor homosexual afroamericano que actúa en el drama de Fox “Empire” respondió a las dudas sobre su aseveración de que fue víctima de un ataque racista y homofóbico en Chicago el 29 de enero. Smollett dice que dos hombres le gritaron insultos, lo golpearon, lo rosearon con blanqueador y le amarraron una soga al cuello al mismo tiempo que gritaban, “¡Este es territorio MAGA!” En una emotiva entrevista el jueves en el programa de la ABC “This Morning America”, el actor llamó “ridícula” a la idea de que estaba mintiendo sobre semejante cosa, tal como algunos han sostenido. Smollett dijo a la copresentadora Robin Roberts: “Se hace un gran daño cuando ustedes mienten sobre cosas como ésta”.
— Unos días después del supuesto ataque contra Smollett, durante una presentación en el programa “The Late Show with Stephen Colbert”, la actriz Ellen Page lanzó su propio ataque. Page, quien se casó con una mujer, puso en la mira al vicepresidente Mike Pence. Page dijo que Pence intentó prohibir los matrimonios de parejas del mismo sexo cuando fue gobernador de Indiana, y dijo que el vicepresidente cree en la terapia de conversión. Ella acusó a Pence de “odiar” a las personas LGBTQ y de querer “ocasionarles un gran sufrimiento”. Ella culpó al vicepresidente del supuesto ataque contra Smollett y de otras agresiones contra las personas LGBTQ. “¡Esto necesita terminar!”, dijo Page ante los aplausos del público.
— Luego Page arremetió contra el actor Chris Pratt después de que la estrella de “Guardianes de la Galaxia” —durante su propia presentación en el programa de Colbert— hablara sobre su iglesia. En un tuit, Page se refirió a la casa de culto de Pratt —la Iglesia Hillsong— de ser “ínfimamente anti-LGBTQ”. De acuerdo con Variety, en el 2015, los ejecutivos de la iglesia fueron criticados por decir que la homosexualidad era un pecado. Pratt rechazó la acusación de Page y respondió con un post en Instagram, diciendo que “nada está más lejos de la verdad”. Su iglesia, según aseveró, “abre sus puertas a todas las personas en lo absoluto… sin importar su orientación sexual, raza o género”.
— En Texas, una pareja gay fue brutalmente golpeada el 19 de enero en un aparente delito de odio cometido por cuatro hombres, quienes ya fueron arrestados. De acuerdo con el reporte de la Policía, Spencer Deehring y Tristan Perry iban tomados de la mano cuando salieron de un club gay en el centro de Austin cuando escucharon a un hombre gritar un insulto homofóbico. Otras obscenidades se escucharon, y luego el hombre instó a otros a que se le unieran. Uno de los sujetos golpeó a Perry y lo derribó al suelo, y Deehring también fue atacado cuando intentó defender a Perry, de acuerdo con el reporte. Con ambos hombres en el suelo, los cobardes supuestamente los golpearon y los patearon hasta dejarlos inconscientes. Deehring sufrió cortadas y una conmoción menor, mientras que Perry sufrió una conmoción más severa, una hemorragia interna y una nariz rota.
—Y finalmente, tan sólo este pasado fin de semana, en San Diego, en lo que las autoridades definen como un delito de odio, un gatillero abrió fuego en el vecindario Hillcrest, el cual es considerado el epicentro de la comunidad LGBTQ de la ciudad. Armado con un rifle AR-15 de alto poder, Stefano Parker supuestamente disparó 19 veces por la ventana de un restaurante tras haber posteado un comentario anti-LGBTQ en Facebook. Había nueve personas en el establecimiento, pero nadie resultó lastimado. Parker fue acusado de nueve cargos por intento de asesinato.
Sólo por curiosidad. ¿Qué década es esta? Pregunto por mis amigos y familiares.
Lo que convencionalmente se creería es que —con millones de dólares destinados a combatir el SIDA, luego que la Suprema Corte anulara las leyes que prohíben los matrimonios gay, y veintenas de personajes e historias LGBTQ en cine y televisión— todas las batallas ya se pelearon y se han ganado.
Pero no es así. Miembros de la comunidad dicen temer que se avecina un retroceso a los derechos, privilegios y protecciones que han sido ganados a duras penas, y que traerán a colación el tema en las elecciones presidenciales del 2020. Esta es la conversación que Estados Unidos necesita tener.
En los noventas, la evasiva condición era: “No preguntes, no digas”. Hoy, en muchas familias, es más bien algo como: “No hables, no compartas”.
Nuestros compatriotas están sufriendo. Son marginados, amenazados y golpeados. Luego se les dice que algo está mal con ellos.