Exigen justicia racial empleados de UMC
Personal del Centro Médico Universitario (UMC) se reunió con pancartas afuera del hospital para protestar bajo el movimiento nacional ‘Black Lives Matter’, luego de la muerte del afroamericano George Floyd, en Minneapolis.
Con mensajes como ‘No Puedo Respirar’ y ‘Batas Blancas por Vidas Negras’ poco más de una docena de trabajadores de la salud exigían a coro justicia por la muerte de Floyd, además de denunciar la brutalidad policiaca de la que fue víctima.
Enfermeros, médicos y estudiantes permanecieron por poco más de una hora sobre la avenida Alameda para exigir justicia. Asimismo, rindieron honor al afroamericano con minutos de silencio y permaneciendo a momentos de rodillas, símbolo que se ha utilizado en los Estados Unidos para protestar contra la brutalidad policial y el racismo. El acto en sí se ha referido ampliamente como emblema de las recientes manifestaciones.
El personal de Salud se une a una serie de protestas realizadas en El Paso por el homicidio de Floyd. El domingo hubo una manifestación afuera de la sede del Departamento de Policía (EPPD), en el área conocida como “Cinco Puntos” en la zona Central, que se trasladó al Memorial Park y terminó de forma violenta.
En el parque, ubicado a unas cuadras de los cuarteles generales de la Policía, los manifestantes se enfrentaron con las autoridades y hubo tres detenidos.
El martes por la tarde alrededor de 200 manifestantes se reunieron en el Parque del Calendario Azteca –en la calle San Antonio, casi en contraesquina del edificio de la Corte del Condado– convocados por los “Brown Berets de El Chuco”, una organización que data de la lucha del movimiento chicano de la década de 1960. Marcharon primero a la Corte del Condado y después al City Hall en una caminata pacífica.
Una de las manifestaciones más prominentes se realizó a principios de esta semana, cuando el obispo Mark Seitz, de la Diócesis Católica de El Paso, se arrodilló en las inmediaciones de Memorial Park para protestar por la muerte de Floyd, que calificó como injusta, rogando por el descanso de su alma.
En medio de otros religiosos y con una pancarta que repetía “Black Lives Matter”, el obispo católico se arrodilló públicamente en reconocimiento simbólico de la injusticia racial y la brutalidad policial en Estados Unidos.
Seitz se arrodilló y cerró los ojos, dirigiendo una oración silenciosa durante 8 minutos y 46 segundos, el tiempo que el oficial de Policía de Minneapolis, Derek Chauvin, sostuvo su rodilla sobre el cuello de George Floyd.
Esta misma actividad se realizó por parte de los médicos y enfermeros en UMC, quienes mantuvieron esta postura ayer al mediodía en un clima con una temperatura de casi 100 grados Fahrenheit.
El Diario de El Paso pidió una declaración a UMC acerca de las manifestaciones, sin embargo, el hospital prefirió no hacer un comentario oficial.