Los demócratas no están poniéndo atención
San Diego— ¿Biden y Harris serán compañeros de formula en el 2020? ¿Están bromeando?
Ustedes no podrán encontrar una boleta demócrata más sorda, especialmente en la Época de George Floyd. Con todo el alboroto que está ocurriendo en estos días en cuestiones relacionadas con la raza, la policía y la justicia penal, la senadora demócrata Kamala Harris de California, la persona que los medios de comunicación insisten en que es la candidata que aventaja para convertirse en compañera de fórmula del presunto nominado demócrata a la presidencia Joe Biden, no debería estar en ningún lugar que esté cerca de esa boleta.
Pregunta: ¿Qué es lo que realmente quieren los manifestantes de Las Vidas de los Afroamericanos Importa y las demás personas que están presionando para que haya una reforma policíaca?
Respuesta: Más que nada, los activistas quieren que sus compatriotas estadounidenses los escuchen y entiendan que no están locos. Ellos no están escuchando que los afroamericanos, y es importante mencionar a los latinos, son usualmente el objetivo favorito de la policía. Ellos quieren que sus compatriotas estadounidenses enfrenten la idea de que tenemos un sistema corrupto para aplicar la ley que está apoyada, empoderada y financiada por unos políticos que son aún más corruptos y que dicen estar a favor de la ley y el orden.
¿Han visto a los políticos, ya sea republicanos o demócratas, el día en que una propuesta penal importante ha sido firmada? Ellos les regalan cosas a los departamentos de policía, al igual como cuando Oprah da regalos.
¡Ustedes recibirán un tanque! ¡Ustedes un helicóptero! ¡Ustedes obtendrán 10 lanzadores de cohetes! ¡Todos tendrán un equipo contra motines!
Tanto Biden como Harris, en varios momentos de sus carreras políticas, han aclamado y apoyado a los policías y han tratado de anotarse puntos con los anglosajones encerrando a los afroamericanos y latinos que los amenazan.
En ese aspecto, esa dupla podría parecer extraña. No hay química, a menos que uno se refiera cuando mezcla dos sustancias en un tubo de ensayo y explota.
Harris hizo de todo excepto llamar a Biden racista durante su primer debate demócrata por haberse comportado amistoso con los segregacionistas anglosajones en el Senado y oponerse al traslado forzado en autobuses en los años 1970. Eso fue incómodo.
Los encargados de la campaña de reelección de Trump, que también son conocidos como El Templo de la Muerte, con toda seguridad tienen preparado el material de ese video.
Biden trató sumisamente de defenderse en contra del ataque de Harris, quien fue procuradora de distrito, al decir que cuando egresó de la Escuela de Derecho, presumiblemente durante la Época de la Prohibición, “Fui un defensor público y no me convertí en procurador”.
Aunque Harris tal vez no esté tan equivocada al implicar que Biden era un fanático por haber mimado a los segregacionistas. Durante una audiencia de confirmación del Senado en 1993 para la entonces nominada a la Suprema Corte Ruth Bader Ginsburg, Biden catalogó a Las Hijas Unidas de la Confederación como “buenas personas que siguen mostrando la bandera de la Confederación como un símbolo”.
El presidente Donald Trump describió a los manifestantes de Charlottesville, Virginia que defendieron las estatuas de los confederados como “unas buenas personas”.
La buena noticia Sr. Presidente es que podríamos encontrar a un hermano al que perdimos hace mucho tiempo.
Pero hay que regresar al dúo dinámico demócrata. En otro aspecto, Biden y Harris hacen una pareja perfecta. Mientras Harris estuvo en la Costa Oeste construyendo su reputación como una fiscal ruda contra el crimen en San Francisco, y posteriormente como procuradora general de California, fue Biden el que le proporcionó los ladrillos en la forma de una tristemente célebre y racista propuesta de ley penal que él redactó y defendió.
Es la misma propuesta de ley penal que impulsó el encarcelamiento masivo que devastó a la población afroamericana de este país.
De hecho, en mayo de 1992, Biden presumió que su propuesta era tan estricta que podría “hacer todo excepto colgar a la gente por cruzar imprudentemente una calle”.
Creo que las declaraciones de Hillary Clinton para apoyar la propuesta que se enfocaba en los “súper depredadores” que necesitan ser forzados a obedecer fue la cosa más insensible racialmente que un demócrata haya dicho acerca de la legislación.
Aunque de acuerdo a expertos legales, Harris no fue la “fiscal progresista” como le gusta describirse. De acuerdo a un medio de comunicación, mientras se desempeñaba como procuradora de distrito en San Francisco, se excedió al enviar a la gente a la cárcel.
Un artículo que fue publicado en The Atlantic en agosto del 2019 se refirió a “graves acusaciones en su contra porque luchó duro para mantener en prisión a inocentes y no luchó de la misma manera en contra de los policías corruptos”. De verdad que si era progresista.
En el caso de Harris, la fuerza que la impulsaba no era la justicia. Siempre fue su ambición y su aparente necesidad de demostrarles a los anglosajones que financiarían sus futuras pretensiones de ocupar un puesto más alto que los protegería a ellos ya sus propiedades de las personas de color.
Justo como lo hizo Biden en ese mismo momento, a 3 mil millas de distancia, en el Senado.
Si pensamos en eso, dejando a un lado lo raro, éste podría ser un matrimonio perfecto que ilustraría claramente lo que es realmente el Partido Demócrata en las cuestiones de la raza, la vigilancia policiaca y la justicia penal. Finalmente salieron las cosas a la luz.
Como ya lo dije, los que están presionando para que haya una reforma policíaca quieren saber que los estamos escuchando. Si Biden escoge a Harris como su compañera de fórmula, eso demostrará que los demócratas no lo están haciendo.