Restricción de visas ataca a la economía
Cuestionan abogados violación a la ley; limitación deja sin fondos a USCIS, agencia federal
Las recientes restricciones en el sistema de migración del país, ordenadas por el presidente Donald Trump, han sido descritas por defensores y analistas como un ataque a la inmigración, a la economía y a la fuerza laboral.
Localmente, Linda Rivas, directora del Centro de Defensoría Las Américas, comentó que estas acciones tomadas por el mandatario –anunciadas a principios de la semana– son para preocuparse.
“Son ataques al sistema migratorio que tenemos actualmente, el presidente quiere seguir limitando la inmigración legal, la cual, dice que está a favor, pero estamos viendo un ataque a las leyes migratorias”, comentó Rivas.
El lunes, Trump emitió una orden ejecutiva que prohíbe muchas categorías de trabajadores extranjeros y limita las visas de inmigración hasta fin de año, cambiando los criterios que la Administración considera como necesarios para ayudar a los trabajadores estadounidenses después de la pérdida de empleos en medio de la pandemia de Covid-19.
“Las compañías que piden estas visas para sus empleados son para personas que se especializan en un trabajo. Uno tiene que comprobar que se han hecho los esfuerzos para ver el mercado, esto nos podría limitar a personas con talento que sólo pueden fortalecer a la economía nacional y local”, expresó Rivas.
De acuerdo con la orden, la congelación se aplicará a las visas de trabajo que utilizan muchas empresas, especialmente en el sector tecnológico, los servicios de diseño y la industria forestal.
Excluye a los trabajadores agrícolas y a algunos empleados de salud, e incluye una exención para los aproximadamente 20 mil proveedores de cuidado infantil que vienen a los Estados Unidos como niñeras, (Au Pairs).
Golpe duro para USCIS
El Servicio de Ciudadanía e Inmigración (USCIS) ha rescindido dos memorandos de política responsables de la mayor parte del aumento de la administración Trump en las denegaciones de peticiones
H-1B.
Las comisiones son para cumplir con un acuerdo legal alcanzado tras la reciente victoria de un grupo empresarial en un tribunal federal sobre USCIS. El impacto en las empresas dependerá de otras acciones del USCIS y de una proclamación presidencial del 22 de junio que suspende la entrada de nuevos titulares de visa H-1B.
Así como este caso, muchas empresas locales e internacionales se verán afectadas. USCIS depende de la emisión de visas, pasaportes y otros trámites para seguir con su operación.
“De hecho es un gran problema para USCIS porque estas visas congeladas son visas que cuestan mucho dinero para ser procesadas”, dijo Rivas.
“USCIS está cerca de no tener fondos suficientes, la agencia está en decadencia, estas decisiones que toma la Administración no son prácticas. Esta visas son carísimas, cuestan bastante dinero para procesarse y ayudan a la agencia a seguir con su sistema, sus empleados, sus oficinas… es un ataque de inmigración de ambos lados”, añadió.
La congelación se aplicará a las visas H1-B, H4 y L, así como a la mayoría de las visas J y H2-B. La Administración también dijo que emitiría nuevas regulaciones negando la autorización de trabajo a los solicitantes de asilo con reclamos pendientes por un año, argumentando que el programa humanitario está siendo explotado por migrantes económicos que presentan reclamos sin mérito.