Rechazan maestros texanos portar armas en clases
Los miembros de AFT en Texas incluyen maestros de escuelas públicas y empleados, así como también los que trabajan en colegios y universidades. Zeph Capo, presidente de AFT Texas, dijo en una conferencia de prensa que se efectuó el miércoles que la Legislatura de Texas ha hecho que sea más fácil para la gente comprar armas en lugar de enfocarse en proteger las vidas de los niños.
“Dependemos del Congreso de Estados Unidos para tomar una acción debido a que la Legislatura de Texas nos ha demostrado que hace otras cosas en lugar de arreglar este problema, ellos sólo quieren ponernos un curita en la herida”, dijo.
Capo hizo un llamado a los texanos para que en el mes de noviembre voten por personas que realmente cambien la política sobre las armas y protejan a los estudiantes y maestros de Texas.
Hace casi una década, los legisladores de Texas crearon el programa del marshal escolar, una vía para que los educadores portaran armas dentro de las escuelas. Sin embargo, desde entonces, sólo 84 distritos escolares han optado por tal programa.
En esos distritos, sólo 361 personas han sido autorizadas como marshals escolares en todo el estado en donde hay 9 mil campus y más de 369 mil maestros de escuelas públicas.
El sondeo realizado entre empleados escolares de Texas encontró que existe un abrumador apoyo para que haya leyes más estrictas sobre las armas.
De todos los que respondieron el sondeo, el 98 por ciento apoya las leyes de alerta, que podrían permitir que oficiales locales le quiten las armas a alguien si un juez declara que representa un peligro; el 96 por ciento desea que la edad mínima para comprar armas legales se incremente de 18 a 21 años, y el 83 por ciento apoya la prohibición de las armas de asalto.
Los demócratas de Texas ya habían hecho un llamado para llevar a cabo una sesión legislativa especial para aprobar una reforma integral sobre las armas.
El tiroteo en Uvalde también podría tener consecuencias para la fuerza laboral de maestros de Texas, que ya tiene algunos problemas. Un poco menos de la mitad de los que fueron encuestados dijeron que el tiroteo podría afectar su decisión para dejar esa profesión.
En los dos últimos años, la pandemia y los ataques contra maestros han exacerbado la escasez de docentes en el estado. Esto se ha convertido en un importante problema para los distritos escolares, tanto que el gobernador Greg Abbott creó un equipo para que encontrara maneras de solucionar el problema.
En todo el estado, los maestros de Texas están terminando uno de los años más difíciles que han experimentado. Desde que llegó la pandemia hace dos años, los maestros han tenido que navegar por una serie de disrupciones causadas por el coronavirus: primero, el cierre de escuelas y el cambio a la educación en línea, luego, el regreso a los salones de clase el otoño pasado que se vio afectado en dos ocasiones por brotes importantes.
Al mismo tiempo, han tenido que enfrentar el enojo de los padres de familia acerca de los mandatos para usar mascarilla y aprender a diseñar lecciones de historia acerca del racismo para impedir que los estudiantes se sientan “incómodos”, debido a una ley estatal que fue aprobada el año pasado. Katrina Rasmussen, una maestra de preparatoria de Dallas y miembro del sindicato que asistió a la conferencia de prensa de AFT, dijo que se supone que las escuelas deberían ser uno de los lugares más seguros para las comunidades, pero la única respuesta que ha escuchado son más armas.