El Diario

Dos leyendas vivientes por el boleto

‘Big Ben’ le pidió un jersey regalado a Brady, pero mañana tratará de guiar a Pittsburgh al Super Bowl y evitar que el quarterbac­k más exitoso de la historia aspire a su quinto anillo

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Ricardo López Juárez

Cuando los Patriots visitaron a los Steelers en la primera parte de la temporada regular, Ben Roethlisbe­rger no estaba en activo.

Una lesión de rodil la lo dejó fuera de un nuevo duelo con Tom Brady.

Mientras Brady calentaba antes del juego, “Big Ben” se le acercó y tras saludarse el quarterbac­k de Pittsburgh le hizo una petición especial.

“Nunca he hec ho e s to, pero me gustaría tener un jersey tuyo en algún momento… Lo voy a poner en mi 3# < “Tú eres el mejor, hombre”.

Brady le dijo que le daría el jersey después del partido. Luego se dieron un abrazo y se despidiero­n.

Roethlisbe­rger, caba subrayar, es el rostro de la franquicia posiblemen­te más respetada de toda la NFL, la que más Super Bowls ha ganado. Él mismo ha sido campeón dos veces en una carrera que lo llevará un día al Salón de la Fama. Y cuando un tipo con sus credencial­es tiene un gesto de humilde admiración como ése por un oponente que a lo largo de su carrera se ha dedicado a dominar a los Steelers, es por algo.

Muchos no lo quieren y a muchos no les gustará cómo juega, pero Brady realmente ha sido el mejor de todos. Así lo demuestran sus récords de juegos ganados, de Super Bowls jugados y conquistad­os. Así lo demuestra su increí ble consistenc­ia cuando está ya muy cerca de los 40 años de edad, siendo “el abuelo” de la NFL hoy en día.

Y este domingo, estos dos titanes volverán a estar frente ' - ferencia, como lo estuvieron en enero de 2004 cuando Brady ayudó a los Pats a vencer a los Steelers del entonces novato sensación Roethlisbe­rger, quien había ganado sus 15 juegos iniciados en la NFL. Nueva Inglaterra ganó aquel partido para avanzar al Super Bowl, que luego le $ D

A la temporada siguiente, los Patriots no lograron defender su corona, y más bien atestiguar­on a la distancia cómo Roethlisbe­rger conducía a los Steelers a un inesperado e histórico título del Super Bowl para darle a la franquicia el llamado anillo del pulgar (el quinto anillo).

Ellos han marcado toda una época –junto con Peyton Manning, ya retirado– en la Conferenci­a A mericana y seguirán haciéndolo el domingo cuando salgan a la cancha del Gillette Stadium en busca del boleto al Super Bowl 51 del 5 de febrero en Houston. Y hablando de anillos, Brady aspira ya a su quinto, con lo que dejaría atrás a Terr y Bradshaw y Joe Montana, con quienes comparte la marca histórica.

Es mucho lo que Brady y “Big Ben” le aportan a sus equipos y a la liga. Uno es el ganador consumado, el as-

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