Falcons tienen fuego
No hay duda que los Patriots son favoritos en el Super Bowl, pero Atlanta es un ‘animal’ distinto a otros
Ricardo López Juárez
B@ Ricardo_Deporte
Los Patriots de Nueva Inglaterra son favoritos en el Super Bowl LI (51) el próximo domingo 5 de febrero. En eso no hay sorpresa: f ueron el equipo que más partidos ganó en la temporada (14), el que más dominó a los rivales, el que luego resolvió con facilidad a Houston y Pittsburgh en los playoffs, y claro, es la escuadra que tiene a Tom Brady como quarterback y a Bill Belichick como entrenador.
Las casas de apuestas pusieron a Nueva Inglaterra favorito sobre los Falcons de Atlanta por 3 puntos desde la noche del domingo y ese número se ha mantenido.
Pero mientras nadie puede poner en entredicho que los Pat r iot s son favor itos, los Falcons se presentarán en Houston como el invitado incómodo; como el amigo de un amigo que llega a invitado y termina siendo el que mejor baila.
Atlanta no era visto como un contendiente a l Super Bowl ni mucho menos cuando la temporada inició. Ni siquiera se pensaba que pudieran ganar su división, la misma en la que habitan los Panthers de Carolina que hace un año llegaron al Super Bowl 50.
Pero los números de estos dinámicos Falcons no mienten: sus 540 puntos anotados en la temporada regular so la séptima mayor cifra de todos los tiempos en la NFL, y en sus anteriores ocho partidos anotaron 38, 28, 42, 41, 33, 38, 36 y 44 puntos, respectivamente. Mucha pegada.
En los playoffs, la ofensiva que conduce de manera im- pecable el quarterback Matt Ryan, le anotó 36 puntos a una defensa de Seattle que se jacta de ser la más golpeadora de la liga, y 44 a los Packers de Green Bay con una mano en la cintura. Si hubiesen querido, habrían sido más de 50.
E s ju s t a mente Ry a n e l hombre clave del Super Bowl, porque para vencer a los Patriots se van a necesitar pun-
El ‘Monje’ Belichick prepara su estrategia
Bill Belichick, el genial entrenador de los Patriots, empezó a ganarse esa reputación en el Super Bowl XXV, cuando era el coordinador defensivo de los NY Giants. En esa ocasión, diseñó un plan para frenar a los Bills de Buffalo, que contaban con el ataque más explosivo. Lo hizo al acumular muchos defensivos profundos, restándole profundidad a los Bills. La semana pasada, un cuarto de siglo más tarde, Belichick volvió a lucirse al debilitar al mejor receptor de los Steelers (Antonio Brown) al enviarle doble cobertura, y obligar a Pittsburgh a tratar de hacerle daño con receptores jóvenes que no dieron el ancho. A eso se enfrentan los Falcons. Todos esperan que Belichick se enfoque en frenar lo más posible a Julio Jones, el imponente receptor abierto que es el arma preferida de Matt Ryan. Jones tuvo 83 recepciones para 1,409 yardas en la campaña.
tos. La defensa de Atlanta no es especialmente fuerte y se espera que Brady haga lo que siempre hace.
Al mismo tiempo, el historial de Belichick para preparar juegos de campeonato supone un desafío tremendo para Ryan, un veterano de 31 años de edad que es el favorito para obtener el premio de “MVP” de la temporada.
El encanto de los Falcons, a todas luces el preferido sentimental del público que no es de los Pats, es que tienen un estilo de juego abierto y agresivo, por el cual su coordinador ofensivo Kyle Shanahan, de 37 años, estaría por convertirse en el nuevo entrenador de los 49ers de San Francisco.
Ryan (4,944 yardas, 38 pa- ses de TD, 7 interceptados) distribuye el balón tan bien o mejor que el propio Tom Brady. Mientras Julio Jones es el hombre fuerte del ataque, Atlanta tuvo esta temporada a cinco jugadores que atraparon arriba de 30 pases y ocho con al menos 20 recepciones. Todo un arsenal.
Además, los Falcons pueden hacer mucho daño con sus corredores Devonta Freeman y Tevin Coleman (24 touchdowns entre ambos en 2016), ambos muy rápidos y productivos. No es, pues, una sorpresa que el equipo rojo y negro haya sido el No. 1 de la NFL cuando ataca.
El otro lado de la moneda es la defensa de Atlanta, que fue la No. 27 de la temporada en cuanto a recibir puntos (25.4 por partido). Sin embargo, los Falcons se sien & * mantenido a Aaron Rodgers y Green Bay en cero puntos hasta el tercer periodo de la 0{%
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