La salsa muestra su “Ritmo y Poder”
EFE
El Museo de la Ciudad de Nueva York inauguró “Ritmo y poder: salsa en Nueva York”, su primera exhibición sobre la historia de este género musical que nació en los barrios latinos de la Gran Manzana, en medio del activismo social y político de los sesenta, y se convirtió en un fenómeno mundial.
Fotos de músicos y bailarines, documentos audiovisuales, libros e instrumentos de reconocidos artistas presentan la salsa como un movimiento social que dio voz a comunidades latinas, en su mayoría puertorriqueñas y cubanas, que desarrollaron el género y lo llevaron de las calles a los clubes de Nueva Yorky al mundo.
“Ritmo y poder: salsa en Nueva York”, que se exhibirá hasta el 26 de noviembre, va acompañada de charlas y otros eventos que exploran además el papel de las dis + creciente movimiento hacia una empresa multifacética muy lucrativa.
La exhibición destaca que en la década de 1970, la creatividad se topó con negocios, medios de comunicación y + la Fania Records, que popularizó el nombre “salsa” como un término generalizado para cubrir varios géneros musicales relacionados pero a la vez muy distintos.
Destaca además que “con su inteligencia callejera”, Fania Records propulsó a la fama a sus talentosos músicos basados en Nueva York, con campañas publicitarias dirigidas por los fundadores + 7 ! + - do Jerry Masucci y el músico Johnny Pacheco.
Diferentes temas
La ex hibic ión está div idida por temas, comenzando por la época del mambo en el famoso y ya desaparecido salón de baile Palladium (1940-1960). También está la sección dedicada a la “salsa y activismo: la voz de la gente” que, a través de fotos y vídeo, acerca al público las luchas por derechos de los sesenta.
Recuerda también el “inquebrantable” comentario social en sus composiciones del músico y cantante Willie Colón, las propuestas de Ray Barretto a grupos de activistas y las “elocuentes” críticas de Rubén Blades sobre las injusticias en las Américas.
El público, que hace el recorrido mientras escucha a los artistas de la Fania u otras estrellas del género, también encontrará en la exhibición tesoros del género musical.
Entre ellos destacan timbales, zapatos y chaquetas que pertenecieron a Tito Puente; un vestido y zapatos de Celia Cruz, la “reina de la salsa”; el primer Grammy por el mejor disco que ganó Eddie Palmieri en 1975 por “The Sun of Latin Music” o el trombón de Jimmy Bosch.